Había una vez en Santiago de Chile, una joven llamada Mitsuko, ella vivía con sus padres y su hermano menor. Durante sus vacaciones la había pasado muy bien junto a toda su familia, pero como suele suceder todo llega a su fin.    Ya comenzaba un nuevo año escolar lo cual la tenía a la vez contenta y triste, contenta porque iba a ver a sus queridas amigas y triste porque temía reprobar matemáticas, ya que no era buena para esa detestable asignatura, pero debería poner de su esfuerzo para poder salir adelante y no reprobar.    Al otro día Mitsuko se levanto muy temprano para no llegar atrasada a su primer día de clases, al llegar a su colegio busco a sus amigas, pero no las encontró, estaba todo claro se habían quedado dormidas las muy flojas, en fin dijo ella, deberé estar sola por hoy. Pero no iba a ser así como ella lo había pensado ya que estaba a punto de experimentar algo que jamás paso por su mente hasta ahora... justo ese día su vida estaba a punto de cambiar ya que el destino le tenia deparado algo que jamás imagino, eso que quizás tampoco pasa por tu mente, cuando eres inocente, te gusta jugar, reír, saltar y te conformas con cosas tan simples que a medida se van tornando mas dificiles de conseguir, quizás mas les cuesta a algunos mas que a otros pero llega el amor a tu vida en un abrir y cerrar de ojos.    Justo ese día llegó un alumno nuevo, la maestra lo presento sin larga espera y le asigno un puesto justo al lado de Mitsuko su nombre era Edwars, ella se puso muy nerviosa ya que éL tenía la mirada bastante penetrante y misteriosa pero triste a la vez, parecía haber sufrido mucho por algo pensó Mitsuko así que decidió hablarle y dijo: hola ¿cómo estás?, pero él no le contestó, que grosero se dijo así misma, no contestarle a una dama ja!, yo muy amable con él y no me contesta pfff... y para colmo solo me mira, para hacerme un desprecio bastante feo y de mal gusto, nose para que me molesto y soy amable con la gente que no lo merece hasta cuando cambiaré, por eso te suceden estas cosas Mitsuko eres una tonta!. Por supuesto que a ella no le pareció nada bien lo que había hecho este joven.Por fin era la hora del tiempo libre, la mayoría de sus compañeros estaban acompañados de sus amigos, menos ella ya que a sus amigas se les habían alargado las vacaciones, pero no tan solo Mitsuko estaba sola también el joven grosero como lo había apodado en sus pensamientos, él también se encontraba solo, de un momento a otro le dio por mirar a Edwars para ver si le podía devolver el horrible desprecio que le había hecho que tanto le molestó, pero el joven estaba llorando... a Mitsuko le dio mucha pena ya que era muy sensible y le gustaba ayudar a los demás; así que decidió acercarse a pesar de como había sido con ella solo olvido lo sucedido. Se acercó lentamente a él y le pregunto; ¿por qué lloras? ¿tienes problemas? heemm.. ¡Cuenta conmigo si tu quieres!, él por fin se digno a contestarle y le dijo; Discúlpame por lo que te hice hace rato, no fue mi intención es que mi mirada es así... Además yo pensaba que te ibas a burlar de mi, por eso te hice ese desprecio, fui muy grosero, tu fuiste la única que se acercó a mi y me saludo me caíste super bien por eso pero no sabia como decírtelo, por favor lo siento mucho y ella dijo; ¿Por qué pensaste que me iba a burlar de ti?, esa es una de las tantas cosas que detesto de este mundo, el burlarse de los demás o molestar eso no esta bien, además eres un niño muy lindo... ¿Quién querría burlarse de ti?, y él le contesto; heemm muchas...gracias...tu también eres una niña...muy linda...y me caes muy bien, gracias le respondió Mitsuko a lo que enseguida agrego; y a todo esto ¿Quieres ser mi amigo? a lo que Edwars respondió sin demora; Sí, si quiero, eres mi primer amiga, lo dijo con voz un poco triste, y ella le dijo: ¿De verdad?, entonces seré tu mejor amiga, quiero que me cuentes tus problemas, no los ocultes, siempre cuenta conmigo te apoyare y no me alejare de ti nunca, y sabés siento que este es el comienzo de una larga y hermosa amistad. Hey! parece que ya se te paso la pena, que bueno, la verdad es que no quiero que llores más así que es mejor que ni pregunte por qué estabas llorando, para que no te vaya a dar penita de nuevo. Edwars  se sintió tan bien al lado de ella, algo que jamás imagino pero que estaba pasando, y sin darse cuenta se había enamorado una vez más, al mismo tiempo Mitsuko tambien se había enamorado de él, era amor a primera vista y con sentimientos muy profundos que nunca antes habían sentido, era amor de verdad.    Había pasado ya mucho tiempo de que Mitsuko y Edwars estaban juntos, eran muy felices y se amaban intensamente, no se ocultaban nada, eran almas gemelas que nada podía separar... Pero Edwars ocultaba un oscuro, trágico y triste pasado, el cuál aun no se atrevía a decírcelo a Mitsuko no por que no la amara de verdad, si no que tenía miedo que lo dejara solo y no quisiera verlo nunca más, a él eso le aterraba pero ya no podía ocultárselo más, por que ella era tan sincera con todos y cada uno de sus pensamientos, que Edwars se sentía muy mal al ocultarle este frío, oscuro y trágico secreto, por muy terrible y amargo que fuera para él recordar aquellas imagenes en su mente con tan solo contar lo que dicho secreto lo acechaba y lo hacía llorar desconsoladamente, pero había llegado el momento de contarle a ese ser tan maravilloso que se encontraba a su lado, su amada Mitsuko...   Al llegar la fria y oscura noche, decidió contárselo para salir de esto de unas vez por todas, aunque esto significase para él recordar eso que le había arruinado su feliz e inocente vida, lo tan terrible que había vivido. El joven se armo de valor y coraje se acercó a su amada y con un resperio profundo y ese suspiro que le salio del alma le dijo; Tengo algo muy importante que decirte y que te he ocultado durante este largo tiempo que llevamos juntos y créeme que han sido los momentos mas bellos de mi vida junto a ti, te pido que me escuches con atención, ya que esto para mi es muy difícil de recordar.     Ella antes de que Edwars le dijiera lo que tenía que decir, suspiro profundamente y dijo; ¿Por qué me has estado acultando algo? ¿acaso no te he dado la confianza suficiente este último tiempo? ¿o acaso tu no sabes que una relación se construye no tan solo de amor y sentimientos encontrados en lo mas profundo del corazón, si no que tambien de confianza? Porfavor no quiero que se vuelva a repetir, yo te amo tanto que daría todo por ti y tu felicidad, tu y yo somos almas gemelas ¿recuerdas? y nada ni nadie nos podra separar jamás, además no te hace nada de bien guardarte cosas malas que te hayan pasado, yo estoy aqui para escucharte y comprenderte, desahógate te escucho.    En ese momento el joven le empezó a relatar su trágico y triste pasado y dijo; -Esto paso cuando yo tenía 14 años de edad, estaba por cumplir mis 15 años, mi padre había decidido que me llevarían a EE.UU, para que me hicieran un tratamiento mas avanzado debido a mi enfermedad, padecía un leucemia aguda y mis defensas bajaban cada vez más y más, mi padre no podía acompañarme debído a su trabajo y el puesto tan importante que tenía en la empresa, mi madre había fallecido dos días después de yo haber nacido ya ella tuvo muchos problemas durante el embarazo y siempre fue muy débil,  por lo mismo yo nací antes de tiempo y siempre fui muy delicado de salud. Así fue como mi padre contrato un tutor que me cuidaría y enseñaría en ese país que seria totalmente desconocido para mi, el nombre de ese tutor era Mitsuo, al pasar el tiempo me gustaba estar siempre a su lado, él era una persona muy amable y cariñosa a la cual le había tomado un enorme cariño de hermano mayor, siempre fue bueno conmigo me trataba bien y me enseñaba las cosas con paciencia y dedicación, jamás se enojaba, siempre estaba atento a mis necesidades y sueños mas profundos...hasta que ese día llegó... Recuerdo perfectamente llovía torrencialmente , habían truenos, mucho viento, estaba asustado y solo en el departamento, Mitsuo no se encontraba conmigo, ya era tarde no llegaba, de pronto sentí la puerta salí a mirar con miedo ya que a causa de la tormenta se había cortado la luz y era él, pero no el mismo Mitsuo dulce, amable y paciente que yo conocía, sino que una persona totalmente diferente, estaba todo claro el olor y su rostro enrojecido daban a entender que había estado tomando y había llegado hasta el punto de estar en estado de ebriedad, me acerqué a él para ayudarlo a que se fuera a descansar y preguntarle que donde había estado pero no me contesto, solo me miró muy fijamente a los ojos con una mirada determinadamente fría y sin sentimientos, como la de un asesino cuando estrangula y mata deliberadamente a su víctima, era una mirada que yo jamás había visto en su rostro, su personalidad era otra... Mitsuo se empezó acercar a mi y me arrincono,  saco algo de sus bolsillos era un arma...yo le grité asustado ¡alejése de mi y baje esa arma por favor...! de inmediato me hizo callar y puso el arma en mi cabeza, yo lloraba... tiritaba... y al mismo tiempo con mucho miedo le pedía que por favor bajara el arma...me dijo que me callara que si hacía lo que el me dijera no me haría ningun daño, pero sino le obedecía me mataría sin pensarlo.   Quiso abusar de mi amenazándome con un arma sobre mi cabeza, yo estaba llorando, él me empezó a besar el cuello...quería abusar de mi, así que en un momento lo empuje lo más fuerte que pude, fue muy peligroso ya que aun me apuntaba con el arma, por suerte al caerse soltó sin querer la pistola, inmediatamente yo la tome para que no me siguiera amenazando con ella y asi poder escapar de ese lugar... Pero él ya estaba de pie y me dijo; Dame esa pistola, mi querido Edwars, los niños no cargan armas de fuego, pásamela para que no vaya a ocurrir ningún accidente que podamos lamentar...yo le dije que no se la daría y que no se acercara a mi o sino le dispararía sin pensarlo.  Yo estaba tiritando con la pistola en la mano, él igual se me acercó por que no me creía capas de hacerlo, me empezó a tocar y a besarme, cerré mis ojos con mucho miedo y nuevamente lo empuje y le dispare...lo mate...solté el arma y me tiré de rodillas al suelo ensangrentado a llorar desconsoladamente donde yacía el cuerpo sin vida de Mitsuo, derrepente mi vista se nublo... caí desmayado debido a mi enfermedad y por lo sucedido. Al otro día me desperté en el hospital no se cuánto tiempo estuve desmayado, pero mi padre ya estaba ahí, conmigo acariciándome la cabeza y diciéndome tranquilo todo va a estar bien, ya nos iremos a casa , toda esta pesadilla acabará y yo(...) Pero justo en ese momento Mitsuko le dice; ya basta no me sigas diciendo más, es que te estas haciendo daño te pusiste muy pálido, ya tranquilo, es suficiente, ahora solo cierra tus ojitos, para qué le dijo él, solo ciérralos, perdóname, cierra tu boquita... en eso ella le da un beso muy tierno y apasionado, esa noche se entregaron el uno al otro fue maravilloso sentir sus cuerpos tan juntitos, sus labios tiernanamente abrazados, con el fuego del amor y la pasion de por medio y compartian unas lágrimas que recorrían sus mejillas tiernamente abrazadas, lágrimas de alegría al saber que se estaban entregando por amor, ese amor intenso y hermoso que sentían ambos, acariciando su piel suavemente, tiernos besos y palabras muy hermosas que escapaban de sus labios de lo mas profundo de su alma y corazón, esa noche sería inolvidable para los dos, pero más para Mitsuko iba a ser inolvidable por lo que estaba a punto de pasar.  Al llegar la mañana después de esa maravillosa noche, Mitsuko despertó y miró que Edwars no estaba junto a ella, entonces se levanto, lo fue a buscar, lo llamaba y lo llamaba pero Edwars no contestaba solo le faltaba revisar el baño pero la puerta no abría, intento forzarla pues era claro su amado se encontraba dentro, le hablaba a él para que le abriese la puerta y no le contestaba, Mitsuko se empezó a desesperar así que empujó con todas sus fuerzas la puerta hasta que por fin cedió, miró para todos lados hasta que por fin lo hayo recostado en la tina cubierto de sangre yacía muerto el cuerpo de su amado, el se habia cortado las venas y ya era demasiado tarde ya nada se podía hacer, ella se puso a llorar  y se tiró al suelo llorando desconsoladamente,  centímetros más allá vio una hoja doblada. Era una carta de su amado junto a una rosa roja la tomo llorando, la leyó y decía así; -Mi amor perdóname por lo que hice, es que ya no soportaba más con esta culpa que me tenía prisionero, me sentía muy mal, acorralado me sentía por haber matado a esa persona que fue tan especial en mi vida a Mitsuo. La única manera de pagar por lo cometido era costa de mi propia vida, tu mi amada Mitsuko me hicíste muy feliz durante este largo tiempo que pasamos juntos yo te amaba y te seguire amando donde quiera que yo este, tu me hiciste sentir el amor verdadero, me hicíste estremecer entre tus brazos y me amaste con ternura y pasión. Eres una persona verdaderamente maravillosa y por eso te mereces a alguien mejor y no un asesino como yo, espero que me sepas perdonar algún día donde quiera que yo este, nunca te olvidaré y quiero que sepas que deseo que sigas adelante no te eches a morir porque ya no estaré contigo nunca más.   Al contrario siempre recuérdame en tu corazón y mente, yo ahora estoy descansando de esa culpa que me tenía cada vez mas mal, esa culpa que sentía mientras estaba vivo y me tenía prisionero.   Te amaré por siempre nunca lo olvides mi niña linda, te amo y nunca te voy a olvidar, la niña de mis ojos siempre la voy a recordar, adiós, pero no para siempre, por que yo se que nos vamos a volver a ver una vez más en la eternidad.   En ese momento Mitsuko penso que todo había terminado para ella, sintío su corazón despedazado, el mundo se le había venido abajo, pero debido a lo que había dicho su amado de que tenía que seguir adelante aun sin él, aunque tenía un dolor inmenso en su corazón y alma, tendría fuerzas para seguir adelante solo con los recuerdos valiosos de aquel amor que había partido de este mundo, su esencia que permanecía en ella después de esa maravillosa noche que jamás olvidaría.   Al día siguiente con el dolor de su alma lo miro por ultima vez, acarició y beso tiernamente por ultima vez sus frios labios, Su cuerpo fue sepultado en el ''Parque del recuerdo'', después del entierro de su amor, ya todos se habían marchado, ella decidió quedarse un momento más y dijo una lindas palabras; -Amor mío, el ángel de la muerte  te ha llevado de mi lado y de esta tierra, no se como superar que tu ya no estás en este mundo , parece como si esto fuera solo una pesadilla, de la que quisiera despertar ahora mismo , pero es la cruda realidad te has ido, solo se que te amé mas que a nada en este mundo, eras mi vida, pero tú ya no estas y siento mi corazón destrozado, pero aun así seguiré adelante es una promesa que te hago y que cumpliré y espero que nos volvamos a encontrar en la eternidad, ahora solo se que mientras tanto tu siempre estaras en mi corazón siempre...por toda la eternidad...te amo, mi niño hermoso...y siempre...siempre... te amaré, nunca te olvidaré adiós al niño de mis ojos... Después que Mitsuko le dijo todas estas palabras se retiro del cementerio y se fue a su casa a descansar.   Lo que ella no sabía es que producto de esa noche donde se entrego por amor, un ser indefenso y hermoso crecía en su vientre , era el hijo del ser que amo y seguirá amando por el resto de la eternidad  a ese amor que siempre se quedara en su corazón.