Dame un poco de tu gracia
sintoniza con mis ganas
obedece a mi deseo, anda
probarte lento, degustarte
ven tan suave que te quiero 

Regalo del universo
envuelto en campo selecto, adornado con espinas
-resplandor azul y verde- eres corona de agave
que anuncia sobre la tierra el fruto de nuestra madre 

Maravilloso tequila, concesión de Dioses
punto de ebullición: dios y hombre
eres magia que reanima 
fiesta de cielo y suelo, quien te prueba cobra vida
 
Te deslizas por mi vaso, casi ámbar o dorado
sabor a tierra y madera, encuentro de enamorados
 
Sin hacer menos al joven
su mismo color sugiere -dignamente blanco-
ocasión especial para tomarlo
 
Y en barrica custodiado en el extremo contrario
inevitable un añejo encerrado en roble
paciencia de tiempo largo que tiene su propio encanto
 
Sugiero probar derecho un sabroso reposado
seductor y discreto que se dipone contento
a entregarnos sus caricias
dejarse llevar de un beso
al gusto y sana medida...