Porque nadie sabe explicarlo y cuando lo explican nadie se atreve a abordar ciertos temas. Y no me refiero al acto sexual en sí, que ya está muy traído y llevado. Me refiero al comportamiento sexual de nosotros, seres humanos que nunca hemos dejado de ser una contradicción de la naturaleza.
La verdad es que he leído sobre sexo y muchas preguntas quedan sin contestarse.
Lo primero que me pregunto es por qué no hay educación sexual. Algunos se ríen ante la idea de que sea práctico, pero es que en realidad debería serlo. De cualquier forma se hace, aunque sea prohibido o a escondidas, pero todo maldito órgano reproductor debería tener su oportunidad de aprender a experimentar un orgasmo.
Lo segundo, es que por más que digan que lo natural del sexo es la reproducción, a través del tiempo y de la historia, se ha manifestado de múltiples maneras y con varias funciones. En conclusión, el sexo es un lenguaje para el ser humano, manifiesta varias facetas de su vida y emociones.
Una persona que nunca ejerce su sexualidad de manera genital, debería analizar a fondo por qué y a qué está renunciando. Sería imposible vivir sin sexualidad, y quien lo haga está claramente en un estado anormal.
¿Por qué el sexo siempre se ha mantenido en esa especie de misterio o secreto? ¿Por qué algunas cosas las aprendemos a ocultas o de manera informal?
Será porque al abrir esa compuerta nos encontraremos con cuestiones difíciles de explicar.
 Y es que veremos que la sexualidad no es sólo el acto heterosexual en la recámara matrimonial (no analizaremos aquí implicaciones sociales como infidelidad, si es unión libre, bigamia, etc., eso ya está muy gastado).
Pero nos encontraremos con relaciones sadomasoquistas, donde la sangre realmente corre. Nos encontraremos con la polémica y nunca totalmente desmadejada homosexualidad, nos encontraremos con el incesto, o  la tan condenada pederastía. Podemos llegar al mundo extraño de los necrófilos y los que gustan de los animales. O podemos bajar hacia el fetichismo, el asesino serial que viola y luego mata, el que se come al que se tiró, etc.
Podemos ver entonces que la sexualidad en los seres humanos no está limitada a la reproducción, muchos de sus comportamientos van orientados a necesidades de tipo psicológico o emocional.
¿Qué necesito expresar? ¿Qué necesito recibir? ¿Qué necesito trascender cuando tengo sexo? ¿A quién elijo y por qué? ¿Realmente me expreso o estoy terriblemente limitado?
¿Realmente mis prácticas sexuales son efectivas o me causan dificultades en los diferentes aspectos de mi vida?
¿Por qué tengo que buscar mucho y no tengo respuestas respecto a mis necesidades sexuales?
¿Quién está detrás de todo esto?
¿A quién no le conviene que comprenda de forma cabal qué rayos sucede con la sexualidad humana?