Filosóficas
Publicado en Jul 26, 2009
FILOSOFICAS:
1- Hubo un tiempo en que pensé que saber mucho era sinónimo de tener mucho dinero, fama y admiración. En aquel tiempo atesoré: libros, saberes; llené mis alforjas intelectuales. Algunas de tales cosas sabidas no podré confrontarlas con nadie y sin embargo las se, para mí y eso basta. 2- Hubo un tiempo en que pensé que ser laborioso, responsable, eficaz, competente; merecía respeto y consideración. Trabajé con ahínco, gané siempre mi pan con el sudor de mi frente, fui noble en mis tareas y procuré por todos los medios dignificar mi vida con el trabajo. Así trabajé, hice trabajar a quienes me dependían y así aún trabajo, con la misma emoción y entusiasmo del primer día. 3- Hubo un tiempo en que pensé como decía Tagore que "el servicio era alegría" y serví con amor, manos y corazón llenos, compartí mi pan, mi techo, ayudé, gestioné ayuda a favor de otros, pensando que sería correspondido. 4- Hubo un tiempo en que pensé que los sueños serían realidad y albergué utopías. "No se puede amar la libertad y tener esclavos"; me sumé al civismo y abracé una causa que creía y creo justa. Levanté una bandera, la hice flamear con pasión, me hice discriminar y perseguir por ella, pensando que era un verdadero republicano y demócrata. 5- Hubo un tiempo en que creía en la religión, pero como a la iglesia vamos todos: justos y pecadores. Por eso ahora solo creo en Dios, voy a la iglesia por él y para él. 6- Hubo un tiempo el único no defraudado aún en que creí y creo que la familia es el mejor refugio del hombre honrado y el viaje más hermoso es el que lleva de vuelta a casa, después de los tropiezos, las alegría y los sinsabores, de esta nuestra peregrina vida terrenal Pero... 1- Por estudiar y saber mucho me llamaron pedante, orgulloso, ególatra, fantasioso, presumido entre otras descalificaciones. 2- Por trabajar con denuedo: loco, chupamedias, acomodaticio. 3- Por servir: sonzo, bonachón, explotable. "Pedile, no sabe decir no". Sin corresponder las acciones buenas ni con el gesto, ni con las acciones. 4- Mi bandera, la vendieron, la regalaron, la prestaron y no me avisaron, tarde descubrí que los partidos políticos son "la pasión de muchos, para que algunos se enriquezcan", sin embargo sigo albergando sueños y utopías. 5- En la iglesia no me hablaron de Dios, me hablaron de otras cosas, de cruzadas y cruzados terrenales. Y como se sientan juntos las chismosas, con la hipocresía, el adulterio, los ladrones y los mendaces, a pesar de ellos todos son bendecidos, ya no creo en la iglesia, pero si creo en Dios. CONCLUSIÓN: Sabiamente decía San Agustín que "veo con asombro como el público se mofa de los virtuosos y aplaude a los fatuos y necios" y si un Santo lo dijo, que puedo decir yo. Solo que: A pesar de todo seguiré estudiando, creyendo que con ello podré ganar dinero; trabajando todos los días como si fuera el primero, rica heredad que dejo a mis hijos. Encenderé pasión por el servicio sin esperar nada a cambio, iré a la iglesia con las renovadas esperanzas de recrearme en Jesús y los hermanos que realmente lo hacen, a los otros algún día el látigo los echará, levantaré utopías: bibliotecas, educación, convivencia, progreso, desarrollo y mi castillo más fuerte seguirá siendo mi familia. No importan lo que digan, porque sobre todo vivir y pensar así, es mi vida y así soy feliz.
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Diego Lujn Sartori
La vida es así y por eso somos poetas... O sino seríamos financistas, abogados, contadores.
Orgullosamente somos poetas.
Saludos
Diego
haydee
La fidelidad a nuestros principios sin importar si con ello conseguimos ó no, lo que nos hemos propuesto.
Lo terrenal es efímero. Tener ó no tener, sólo una circunstancia.
Pero siempre es mejor tener!
SAlUDOS
Diego Lujn Sartori
trato de aferrarme a esos principios "aunque vengan degollando".
Saludos
Diego
Jos Antonio
Le felicito por su texto, el cual es una "Declaración de principios", estoy seguro que le da luz a todo lo que escribe, a todo lo que hace y piensa...
Un fuerte abrazo
Diego Lujn Sartori
Diego
angelita
Diego Lujn Sartori
Sin lugar a dudas es para mí una bendición haberte conocido. Tu simpatía, empatía, glamur (si la foto no miente) y tus palabras, destilas cariño. Gracias, verdaderamente, Gracias.
Diego
Diego Lujn Sartori
Gracias. Estar en este sitio y compartiendo con ustedes es parte de la utopía universal, escrita con tinta de la vida cotidiana.
Gracias.
Diego
Diego Lujn Sartori
Pensé que nunca me leerías, veo que tienes una intensa actividad y tu página es muy visitada. Gracias por acercarte.
Diego
Diego Lujn Sartori
Gracias por tus comentarios.
Diego