BAJO EL MANTO DEMOCRÁTICO
Publicado en Sep 13, 2009
BAJO EL MANTO DEMOCRÁTICO
Reprochan mis amigos las críticas que hago a la oscura realidad que padecemos, y me interrogan descaradamente: -Y tú, que vives bajo el manto democrático, ¿qué haces a diario para conservarlo?... A sus reclamos e interrogaciones respondo imperturbable: -Nada tangible. Pero al dejar de hacer lo que otros hacen sin que importen la ética y el tino, vivo seguro de mi contribución: No patrocino ejércitos privados, no robo, no miento, no asesino, no practico la desaparición forzada ni garantizo inmunidad a los bandidos, no extradito a los que deben responder por las masacres de pueblos indefensos, no propicio los crímenes de Estado ni engaño jóvenes con "falsos positivos" para aumentar los "muertos en combate", no uso motosierras contra los campesinos ni hornos crematorios para su incineración, no violento la Ley aunque atropelle al más desprotegido y menos ducho, no irrespeto las normas internacionales, no hipoteco el buen nombre del país, no bombardeo ni ametrallo a los vecinos. No torturo ni disparo por la espalda mientras insulto atadas a las víctimas, no siembro minas antipersonales ni secuestro ciudadanos por dinero, no pretendo mutilar la Carta Magna, no compro votos ni le tiendo trampas a quienes denuncian mis barrabasadas, no violento los demás poderes públicos ni soy de nepotismos ni de injurias, no manipulo encuestas, no me vendo, jamás descalifico a mis opositores ni los estigmatizo como santo y seña para abrirles camino a los verdugos. No pretendo perpetuarme en el poder, no soy un doblegado lacayo del imperio ni tampoco un troglodita enceguecido por el Sol del dominio y la soberbia, desapruebo la impunidad y la injusticia practicadas por burócratas vasallos, no envilezco la conciencia ciudadana ofreciendo recompensa a los soplones, no hago alarde de mi credo religioso ni ostento fantasmagóricas virtudes, no ajusto a mis deseos los principios ni enmudezco ante las atrocidades cometidas por mis colaboradores, no soy un altanero ni un bocón con aquellos que tengo a mi servicio. Detesto las armas, la guerra y el cinismo, jamás prometo lo que no pienso cumplir o estoy incapacitado para hacerlo, nunca espío a mis supuestos enemigos, no soy sordo ni ciego ante la corruptela, no desprecio a los artistas ni a los sabios y tengo en alta estima a los científicos, no juro en vano buscando canonjías, no me asocio con carteles de la droga ni cultivo amistades con mafiosos, no busco la riqueza en mala forma ni entrego notarías por favores, no me siento un mesías, mucho menos un monarca totalmente irremplazable, no sesgo noticieros ni compro periodistas, no descarto que otros tengan la razón ni sostengo que todos mis contrarios no sean más que peligrosos terroristas... La lista es tan extensa que no sigo y prefiero regresar a las preguntas: ¿No les parece, amigos, que si yo no incursiono en tales campos estoy contribuyendo abiertamente al despliegue del manto democrático?
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inocencio rex
hacen falta mas espadas, la poesia tambien es fe (y viceversa).
miguel cabeza
Aparte, el texto es precioso.
norma aristeguy
En mi país están los ciegos, que se ponen una venda y pretenden tapar la boca de quién les dice lo que ve, precisamente, con esa nefasta preguntita: ¿Y tú qué haces, para mejorar lo que dices que está ocurriendo?
Mira cuántas razones me has dado!!!!! Yo sólo atinaba a decir trabajo y lucho cada día de mi vida por una sociedad mejor, en las escuelas, es cuanto sé hacer, porque está muy poco reconocida la labor del escritor, sólo que seas un"best seller" o estés de moda.
Y también están los otros, los que han sido cómplices de aberraciones y hoy enarbolan las banderas de víctimas, cobijándose y escondiéndose en el trabajo real de los peones, de los obreros, como si les importaran.
Por lo tanto es posible que al abrir mi boca algunos comprndan y callen, pero la mayoría de las veces te rodeas de enemigos. O lo que es peor, te ponen estampillas, de las que siempre me sacudí, para poder tener la mirada limpia, objetiva.
Es genial tu poema, con tu permiso y tu nombre me gustaria bajarlo, para que algunas de mis compañeras lo trabajen en el secundario, con los adolescentes, las profes de Letras, yo doy otra materia y aunque puedo hablarles de tí y de tu poema, no podría darle el buen destino del estudio.
Siempre y cuando tú me lo permitas.
Espero tu permiso.
Y aunque no necesitas de mis felicitaciones, lo hago igual, cuánto me ayuda a aprender y a comprender que no estoy tan equivocada.
Un saludo muy grande poeta.
rocio nava