Mi apreciado amigo y Maestro:

No se si estarás finito,
pero bien flaco, si estás,
¿será qué no te alimentan más?
¿o será que comes poquito?
y estás como un pajarito
canturriando sin respiro,
viendo a la vecina aquella
que te hace ver la estrella
de la mañana, y en el giro
te deja abstracto, del tiro.

Bienvenido, es como el regreso del guerrero, o como tú dices:
no aguantas dos pedidas. Pero el que nace pa' poeta, hasta en
las olas escribe, o como diría Andica: el que nace pa' barrigón,
ni que lo fajen chiquito.
Felicitaciones y estrellas, por el poema... y por el retorno.
Saludos cordiales: Alfonso.

Estimado, qué bueno volver a leerte!
Tus reflexiones, además de profundidad, tienen humor y una visión para nada autocomplaciente. Respecto de los procesos de los que hablás, no están escritos en ningún lado, y si hay jóvenes (palabra resbaladiza, si las hay) queriendo ocupar el lugar de un poeta mayor, sólo porque han tachado menos almanaques, que esperen y demuestren su sabiduría. Porque el lugar del poeta es ese: no es sólo el vigor, la sorpresa y la transgresión; hace falta el poeta sabio, no sólo por sus consejos, sino porque hace falta su obra. Y me consta que este poeta que tenemos enfrente no sólo es sabio por lo que acumula, sino porque todavía sabe aprender.
Y a esos poetas quiero seguir leyendo.
Un abrazo desde el sur montevideano.

Que lúcido Filiberto. El paso del tiempo a todos nos toca, y en difirente edades nos roza como espinas del rosal. A los catorce no queria crecer, queria seguir siendo niña, a los 19 quería tener 14, a los 20 la vida se me paso volando con tanta independencia, a los 30 me acorde que tenia que ser mama, a los 40 disfrute la adolescencia perdida, a los 50 tengo que definir si soy señora o señorita, no lo se,tengo 49 aun. Pero me doy cuenta la gran prueba de humildad es asumir el paso del tiempo con dignidad y alegría (no se si soy tan humilde).
Tu hermosa disyuntiva lo abstracto con lo finito. Y es lo que se es con lo que se representa. Una dicotomia que a veces es mental ajeno. Lo sentimental. lo sensorial que no muere ni envejece, con el "deber" al papel que se tiene que representar.
La gracia del poeta o el artista que su arte es independiente del tiempo.
Un abrazo calido desde la incipiente primavera del sur.

Paradójicamente.... mientras pasa más el tiempo, más joven es tu poética... jajjaja... en otras cosas se envejece, quizás, no lo sé... pero en las letras te vas haciendo cada vez más joven, más lúcidamente joven. Excelente, como siempre, estimado poeta. Saludos cordiales y ha sido un placer leerlo.