Yo nos soy creyente,
pero en este presente,
me gustaría tener la fe,
para creer que hay vida
después de la muerte.
Yo no soy creyente,
pero daría todas mis razones
por una sola fe en el cielo,
donde las almas descansen
después de este infierno.
Yo no soy creyente,
pero creería en un cielo
donde Ella descanse,
rodeada de paz y de ángeles,
Yo no soy creyente,
pero daría hasta mi vida
para que ese cielo exista,
un cielo donde Ella sienta,
donde la brisa la acaricie,
y no me importaría y sería feliz,
si un ángel impresionado por su hermosura,
la seduzca haciéndola sentir dichosa y bella...
yo no soy creyente, pero....
como me gustaría serlo.