En mi una llama se ha apagado, la llama de la pasión y el amor ya está casi terminado, mi alma perdida vaga por los campos de sus besos sin respuesta, una mirada hipócrita hacia la realidad imaginando que todo será como antes… claro que no, no puede ser como antes, quien sería ese abrazo que te tape por la noche y te haga sonreír cada día?  cada principio tiene su belleza, su mayor apogeo lleno de risas y delicias, pero pasa el tiempo y las hojas se van secando en este frío otoño suavizante, porque cuando estaba mal llegaron esas canas negras que con su corpulencia y antigüedad vino a dar a mi mundo una nueva sonrisa sincera, que con su atención y sus palabras, más allá de las que dice, con solo sus miradas sus actos y sus tonterías puede llenarte de vida la misma vida nuevamente, la vida que con otro a había de acabar…
Pero que hacer si ese antiguo casco negro me abraza y llegase a besar? ese beso de tierra, hielo y fuego pudiese llenar, el vacío eterno de mi pecho sentirse tibio después de aquella helada…
Yo ya tengo mi helecho pero mi hogar no me hace tan feliz como la libertad, ya no me hace sentir pasión, ya no me hace sentir emoción, solo quiero escapar de mi realidad y caer en el mundo de fantasía, aún así esta es la vida mía, pero yo soy fiel a mis principios y a la manera de pensar, caer en ese cuerpo sería algo que lamentar… 
Esta confusion me está matando, esta confusión me está alertando, pero a la vez es algo pasajero y otras veces infinito…