Sin serlo (Reflexiones)
Publicado en Oct 05, 2013
Platón dijo que "la obra maestra de la injusticia es parecer justo sin serlo". En lo realtivo a la justicia tengo mi propio pensamiento: "La Justicia sólo es justa cuando equivale a Liberación a través de lo que es legal y en contra de lo que es ilegal". ¿Y qué decir de la injusticia? También tengo mi propio pensamiento sobre ella: "La injusticia es la hipocresía más grande que existe entre los seres humanos". Hablamos de justicia y de injusticia muchas veces oponiéndonos a la verdad. ¿Es eso una noble manera de ser? Cuando nos oponemos a la verdad estamos perdiendo todos los derechos para ser justos.
El día 31 de marzo de 2005 después de Jesucristo, escribí una reflexión para los seres profundos. Vuelvo a insistir en ello: Estoy junto al poeta, en el hondo llamado al hermano para mirar sobre sí mismo, lejos de todo egoísmo y ambición, buscando ese ser superior que está dentro de todos los hombres y mujeres, preguntando sobre el destino a partir de lo que creemos ser con toda la grandeza del alma, unívocos y certeros dentro de esta angustia que es el presente lleno de interrogaciones y vacío. Estoy junto al poeta, con ese nudo en la garganta que aprieta los anhelos, evitando el tedio cotidiano y la lobreguez del entorno con gritos libres, de plena libertad, de amplia libertad, de ubérrima libertad que la montaña traga imponente para hacerla gigante proclama a la vez que tan pequeño susurro como el hálito de un suspiro... pero un suspiro liberador que atruene todas las conciencias y las haga volver su mirada hacia el interior de los sentidos. Estoy junto al poeta, atravesado de ecos y de agujas musicales y místicas luciérnagas alumbrando los espacios en un desliz de fugaces ilusiones; pronunciando palabras y emociones que serían fatuas si no surgiesen del alma de la especie humana y sólo se cociesen en la amargura y el llanto. Estoy junto al poeta, para cantar que en nuestras manos debe brillar el amor, la ternura y la esperanza. Un amor verdadero, una ternura real y una esperanza invariable que frenen, por fin, esta cruenta existencia y la transformen en un lugar equilibrado donde la justicia y la equidad nos haga a todos realmente hermanos. Surgimos todos de un núcleo principal que se llama familia. Surgimos todos de una especie de germen benefactor llamado conjunto. Surgimos todos de una especie de inicio llamado camino. ¿Qué le ha sucedido al mundo para que tantos seres llamados humanos se comporten como bestias en lugar de personas? 25 de octubre de 2007 después de Jesucristo. Escribo: El animal entra en el vagón de metro, observa ligeramente que nadie le observa (valga la redundancia) y con premeditación, alevosía y cobardemente creyendo que nadie le ve, lanza la tremenda coz (zapatazo brutal) a la cara de la joven de solo 16 años que viaja tranquilamente, sola y sin defensa alguna, creyendo en la paz de los seres humanos, sin darse cuenta de que ha entrado el animal. Racismo. Machismo. Xenofobia. Fascismo a lo bruto. Así hablan las bestias... y no es necesario más palabras salvo que si fuese yo Nietzsche hoy tendría argumento suficiente para escribir "Así habló Za(pato)ratrustra". 8 de marzo de 2008 después de Jesucristo. Sigo escribiendo: El hombre de 43 años de edad está junto a su esposa y una de sus hijas (tiene dos hijas y un pequeño niño de su matrimonio) junto a su domicilio de Mondragón (Guipúzoca) cuando se acerca "la bestia" y le descerraja 5 tiros en el tórax y en el cuello. El "bestia" huye como un cobarde con otro "bestia" que le espera en un coche... La pequeñita onubense de etnia gitana (de sólo 5 años de edad) está jugando y cantando alegre en la calle con sus infantiles leotardos rosas. Llega "la Bestia", la rapta y después de 50 angustiosos días para los familiares de la niña, aparece el cadáver descompuesto de ésta flotando en un pantanal cerca de los muelles de Huelva. El "bestia" permanece escondido entre la multitud de los seres humanos. Bestias. Así siguen "hablando" los bestias. ¿Qué clase de "lenguaje" debemos recuperar para hacer del mundo un lugar donde habite la sensación de la paz basada en la justicia? Sin ser justos no puede existir dicha sensación. Sin serlo no podemos crear el nuevo mundo. Para ser humanos es necesario empezar por ser humanos. Los "bestias" no pueden crear nada porque sólo conocen la destrucción. Si tuviésemos que elegir entre la justicia legal y la justicia verdadera ¿con cuál de ellas nos deberíamos quedar? Yo opino que con la justicia verdadera porque en ella habita la verdad.
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