Estaba en la parada de autobus como cada dia para ir a el colegio, me veia algo nervioso tal vez algunas personas creean que sea por el estudio o algo asi pero enrealidad estaba nervioso por lo que me hiba a suceder, desde hace ya unos dias unos compañeros de mi salon de clases me estan molestando aunque ya se esta acabando mi paciencia. No paso mucho tiempo para que ellos llegaran, Gerardo se acerco a mi y me dijo -Buenos dias marica ¿como amaneciste hoy?- yo solo lo mire con una furia extrema -!te e preguntado algo hijo de puta¡- me grito y me dio un golpe en la cara mientras los demas cabrones se reian de mi, sabia que todo este abuso se acabaria en ese mismo momento asi que tome un lapiz de mi mochila lo mas rapido posible y apuñale a Gerardo en el estomago su cara se volvio palida y sus pupilas cada vez se exaltaban mas y mas, yo no queria detenerme era algo que me hacia sentir tan bien -!¿Te gusta cabron?¡- le pregunte mientras mas encajaba el lapiz Ulises me empujo haciendo que soltara el lapiz -!¿Que carajo estas haciendo?¡- me pregunto Ulises gritando y asustado yo solo me rei de una forma muy psicotica todos me miraban con cara rara y temor asi que saque el lapiz de el estomago de Gerardo mientras el solo gritaba de dolor, Ulises no se pudo defender solo vio mi mano con el lapiz enterrandose en se cuello mientras hacia una sorisa rapidamente me abalanze sobre Sebastian encajando el lapiz en su pecho y golpeando su cara, me quede parado por unos segundos y mire a Edgar -Sigues tu- le dije con una voz tranquila el no podia hablar estaba congelado del miedo y en un abrir y cerrar de ojos el ya estaba tirado en el suelo con mi lapiz clavado en su frente, yo me puse de rodillas y empece a reirme mirando sus cuerpos sin vida en ese mismo momento sabia que habia perdido la cordura. Ahora aqui me tienen en este lugar frio y sin compañia aun recuerdo como mate a mis compañeros y la verdad me siento muy bien por haberlo echo y ademas ellos se lo buscaron.