Mi Fantasma
Publicado en May 05, 2014
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                             "MI  FANTASMA"
                               


    Vivo en la Ciudad de Manizales región del Eje Cafetero de Colombia.
    Mi mujer me despertó a las 4 de la mañana para echarme la acostumbrada
    cantaleta por cualquier cosa que se le ocurriera. El día anterior le
    había informado -por costumbre-que pensaba viajar a Medellín con el
    fin de finiquitar un negocio. Medellín queda a 200 kilómetros distante
    de mi ciudad. Cuando mi mujer por fin respiró para tomar nuevo aire y,
    antes que continuara su cantaleta, me levanté y me dirigí a mi oficina.
    Prendí mi computador y encabecé esta página con el fin de escribir un
    cuento para mi página de Textale, la cual tenía un poco abandonada por
    falta de ideas.

    (Escucharle la cantaleta a mi mujer durante 44 años es algo aburridor,
    tánto, que si pudiera casarme nuevamente, lo haría con una PISTOLA,
    porque a ésta se le puede instalar silenciador Y NO A LA MUJER!Ja,Ja,Ja)
    
    
    El viaje lo pensaba emprender en horas nocturnas.
    Viajar en horas nocturnas es lo más hermoso y confortable. La vía esta
    despejada de tránsito por donde viajan enormes carro-mulas con contenedores
    de carga y otros camiones llamados camabajas, todos igual de grandes que
    taponan la via inpidiendo el paso, en la quebrada geografía montañera del
    eje cafetero.
    
    El reloj marcaba las 10 de la noche cuando emprendí el viaje.  A la salida
    de mi ciudad prendí el DVD de música y coincidencialmente sonó  "LOS LIBROS"
    Danza composición de Ricardo Nieto.

    Para qué los libros para qué Dios mio,
    si este amargo libro de la vida enseña,
    que el hombre es un pobre pedazo de leña
    que arrastra en sus ondas fugases el río,
    para qué los libros para qué  Dios mío.

    Leí muchos libros leí tanto tanto
    que al fin se cansaron de hacerlo mis ojos.
    Hoy sólo me resta un poco de llanto,
    una honda amargura, un hondo quebranto,
    Un mundo de espinas y un bosque de abrojos.

    Qué sabio ha podido mecerse en la bruma;

    Qué artista una gota formar del rocío.    

    Oh pobres poetas romped vuestra pluma;

    No veis cómo escribe sus versos la espuma;

    Ni oís cómo canta sus himnos el río.

    Debajo de un árbol medito y espero.

    Cuán poco a los hombres que pasan les digo.
    
    La vida es un viaje, yo soy un romero
    
    Cansado de todo; dormir sólo quiero
    
    El último sueño de paz y de olvido.
                 ---

    La música siguió sonando hasta llegar a las cazetas del peaje. De allí en adelante
    la carretera contínúa a la par con el gran Río Cauca. Segundo río grande y corrientoso
    de Colombia que viaja rumbo a el mar atlántico.La carretera va por la márgen izquierda
    y por el lado derecho va la bancada del ferrocarril.
    Ya llevaba como una hora de viaje, de prónto vi que entró a mi carro algo así como
    una CHAPOLA. (Mariposita blanca parecida a la flor del café) La chapolita giraba y giraba
    en torno a la luz del techo del carro. Abrí las 4 ventanillas y la mariposita salía y
    entraba constantemente por una y otra ventanilla.
    Pronto llegó a mi mente la escena del momento del entierro de mi abuelito paterno.
    (Tengo 80 años y una memoria privilegiada)  Recuerdo toda mi vida desde la edad de 2 años,
    algo así como si grabara en mi mente un video con movimiento y hasta colores y sabores.
    Cuando metieron a mi abuelito y lo encerraron en el cajón,le pregunté a mi madre que si el
    abuelito iba a jugar al escondrijo con sonotros. Mi madre se rió y dijo que sí, pero que no
    lo llamara porque se despertaba.Al abuelito no lo acompañé a los funerales pero si fuí al
    cementerio. Cuándo lo metieron a la bóveda vi que del cajón salió una chapolita, dió varias
    vueltas y desapareció.Escena que siempre recuerdo y veo en mi memoria.
    Llevaba más de 60 kilómetros de recorrido cuando me acerque a una fonda, paré el carro,
    abrí el capót y le eché un poco de agua para que no se calentara. Entré al salón restaurante
    y le pedí al viejo una taza de café con queso.
    
    Hacía un rato venía observando que por la bancada del ferrocarril viajaba un tren de pasajeros.

    El viejito me sirvió el café y me preguntó para dónde me dirigía tan tarde la noche y sólo.
     Pues no tan sólo señor, veo que el tren de pasajeros viaja a la par conmigo.
    El tren? No creo señor, está disvariando.Hace más de 40 años que levantaron los rieles después
    de la tragedia, no lo recuerda?

    No sabía qué contestar, ¿será que la chapolita es mi abuelito que me acompaña?
    Estoy viendo visiones? Será el espíritu de mi abuelito?

    El viejito me despertó y me dijo:
    No recuerda que un derrumbe se llevó la bancada del ferrocarril, taponó el río, se represó
    hasta devolverse,arrastró carros,casas, personas, luego rompió la represa y hasta hoy nunca se
    ha sabido sobre el número de muertos. En las noches oscuras se ve viajar carros y personas
    como si fueran almas en pena. No le cuento más porque lo asusto.-Me dijo el viejito.
    Sí señor, es cierto. Hace rato me acompaña mi abuelito.
    Su abuelito? y dónde está?
    Murió en el año 1944 señor.-le contesté.
    Tenga cuidado, dicen que por Chirapotó caen derrumbes de rocas.-medijo y se entró a la
    trastienda.
    Continué el viaje, aún faltan 120 kilómetros para llegar a Medellín.
    Cuando llegaba al sitio de Chirapotó, tres carros hacían cola porque de la montaña caían
    piedras.Paré mi carro, bajé a mirar cómo estaba el paso y vi que los carros continuaron.
    Ya me subía al mío, cuando el estruendo de una gran roca que caía me alertó. Creí que la
    roca caería al río y no fué así.Me acerqué a mi carro para continuar, apagué luces y al
    instante vi que la roca estaba iluminada, salían grandes y continuos destellos de una luz
    verde.Me acerqué y en mitad de la roca vi una gran Esmeralda de muchos kilates toda iluminada.
    Traté de  cogerla y la piedra verde desaparecía.
    No supe qué hacer, le recé la oración a las Änimas y un padrenuestro por costumbre y, continué
    el viaje. A Medellín llegué después de la media noche; después de ver y presentir la presencia
    de los "Caminantes en la noche" libro escrito por mi amigo Jorge Escobar,  que me dejó crispado
    y nervioso sin poder conciliar mis sueños y, mi abuelito en mi mente.
    
    CHUMBIMBON-
    Manizales, Mayo 5 014
    


     
    
        

    
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Foto del autor Héctor Restrepo Martínez
Textos Publicados: 62
Miembro desde: Aug 10, 2010
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Descripción

viajar, fantsmas

Palabras Clave: fantasma. miedos

Categoría: Cuentos & Historias

Subcategoría: Terror & Misterio


Creditos: Héctor Restrepo martínez

Derechos de Autor: Héctor Restrepo Martínez


Comentarios (4)add comment
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**Leticia Salazar Alba**

AMIGO MÍO, TU LITERATURA ESTÁ LLENA DE FIGURAS, PARECE QUE E CADA EVENTO QUE RELATAS LO PINTARAS Y NOS TRANSPORTAS A TU TIERRA AL MOMENTO MISMO DE LO SUCEDIDO ME GUSTA LEERTE UN ABRAZO LETY
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May 15, 2014
 

Verano Brisas

Te ubicas bien dentro del estilo sencillo y costumbrista, propio de la Zona Cafetera, apreciado Héctor. Recibe mi cordial saludo.
Responder
May 13, 2014
 

pedro reyes

Hola amigos, los invito a leer
Responder
October 28, 2014

Héctor Restrepo Martínez

Hola amigos, los invito a leer Mi Fantasma. Me agradaría recibir su apoyo. Hector
Responder
May 07, 2014
 

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