Vainilla
Publicado en Jul 11, 2014
Ella, era de esas chicas que cuando yo las veía, se me pasaba el mundo por delante, mi corazón latía a mil por hora, los vellos de mi cuerpo se levantaban y se me ponía la piel de gallina, si mirada destellante, su cabello fugaz y su aroma a vainilla me volvían , completamente loco…..
La chica sin nombre, como yo la llamaba, pasaba todos los días al lado mío, yo, estaba en el último grado de mi educación media. Y ella, al parecer en 3 tercero…. Siéndoles sinceros mis queridos lectores. Yo era un verdadero degenerado… un animal…. E sido durante 4 años de mi vida un amante de las mujeres, del placer y de la vida bohemia, a mis padres les da igual…a sí que me di a la vida loca….Siempre, me percataba de cómo lucían las chicas antes de ponchármelas, siempre, busque chicas fáciles para pasar la noche, he tenido en toda mi adolescencia tantas mujeres en mi cama y a mis pies que de verdad ya no lo recuerdo mucho… es que también, siendo un poco modesto. Yo no soy nada de feo de hecho , pensándolo bien, soy bien parecido , tampoco soy pesado ni antipático y tengo un buen físico aparte tengo algo que a la mayoría de las hembras vuelve loca en mi liceo, soy alto 1.80 exacto de estatura ; aparte soy bien inteligente y culto… y como dice mi abuelo, soy todo un Casanova En resumen; la palabra que mejor me calza era la de mujeriego…la de un mujeriego cualquiera… Mi relato comienza señores en los pasillos de mi liceo… esa chica. Siempre se paseaba en frente de mi sala…. Yo, siempre la veía pasar y desde que la vi pasar por primera vez. Fue cuando de verdad, quede prendado por ella, todavía recuerdo como fue ese día…. Estaba yo con unos patanes de mi curso, cuando de repente, ella pasó. En sus manos, llevaba un libro, ni idea de cuál era, yo solo sé que cuando paso, fue como ver pasar a un ángel. Su cabello era corto y brillante; tenía sus ojos pequeños y saltones, pero con un brillo que jamás había visto en la mirada de otra persona… su piel era algo así, como media amarillenta. Sus labios no eran tan finos, pero tampoco tan gruesos… se veía que usaba algún brillo labial; y era alta, más alta que muchas de las niñas pigmeas de 1,58 de estatura que rondaban en mi liceo… yo creo que ella debe medir 1,69 o algo así… vestía el uniforme correctamente su falda, no estaba tan corta , a ella por lo menos no se le veía el alma al momento de pasar caminando; sus zapatos estaban lustrados y como debía ser ella usaba el chaleco y no el poleron de buzo como muchas otras, su corbata, también estaba en el lugar correcto…. Cuando paso. Los idiotas con quienes estaban la miraron y dijeron “ella es tan rara… nunca habla…. Pero, no está nada de mal yo me la tiraría si ella se dejara”… Pero yo solo me dedique a pensar…. “ella, es hermosa”…. Ahora, siéndoles sinceros mis queridos lectores, si yo pudiera contarles cómo fue que llegue a sentir eso por ella, como fue que desde ese día, siempre la buscaba con la mirada en todos los lugares de mi liceo y como es que cada vez que ella pasaba al lado de mi persona, sentía que el corazón me latía a mil por hora …. Pues. Simplemente, no lo sé… la definición que tiene lo que yo siento, es “amor a primera vista” … yo no sabía si llamarlo así, no me gustaba mucho es definición. Solo sabía... Que cada vez que ella pasaba al lado mío, sentía que todo sonreía. Sentía sin saber nada de ella que la debía respetar, que la tenía que cuidar… y nunca, se me paso por la cabeza la idea de follarmela, sin más preámbulos ocuparla para tener una noche de pasión y sexo salvaje no estaba entre mis alternativas…. A ella…. a ella, sin saber sus gustos, sin saber sus creencias, sin saber cómo pensaba, y más aún! Sin saber su nombre, yo estaba loco por ella…. Pero, de verdad siempre me preguntaba Porque yo sentía, esta extraña atracción por ella, esta obsesión que me hacia querer verla, este desenfrenado instinto de ir y abrazarla, sentarme a hablar con ella a escucharla, a escuchar su voz a escuchar sus historias a verla sonreír, siempre he pensado, que su sonrisa, debe ser de las más bellas…. Yo, puedo asegurar que ella, es la segunda mujer a la que nunca he pensado en tirármela, la primera, es sin duda la pollo… mi mejor amiga… mi amiga de la infancia, con la que crecí y viví gran parte de mi niñez jugando en la calle a la pelota y comiendo sus infinidades de pasteles de barro que ella cocinaba para mí. Ella, siempre ha estado conmigo y yo con ella ; el tema, es que la pollo, sabía lo que yo sentía por la chica vainilla como yo lo llamaba por el olor que ella emanaba … y ella me decía…. Que quizá de verdad yo me había enamorado de ella a primera vista. Quizá me decía la pollo, ella tenía algo que no todas tenían… ella me decía, que podía averiguar el nombre de la chica. Por lo menos, para que yo la buscara en las redes sociales y poder conversar!.. Yo le decía, que no, que prefería hablar con ella. Directamente, a la antigua, antes que hacerlo por una pantalla…. La pollo me decía que yo era tonto, pero que, quizá las cosas con la chica podrían funcionar bien si yo lo intentaba… Y nunca lo entendí porque yo sentía esto por ella, porque se había formado ese amor a primera vista … si, en esos momentos de soledad, cuando me sentaba a pensar a mirar el cielo o como algunos lo dicen a “filosofar”, la verdad, era que nunca llegaba a una respuesta clara, nunca llegue a una conclusión concreta, siempre temía, que tal vez ella, tenía a alguien puede ser , como estaba las cosas en nuestra sociedad, ella era mamá a tan corta edad o aún pero, cavia la posibilidad de que fuera lesbiana, era algo que de verdad me aterraba. Simplemente yo no sabía que me pasaba…. Desde que la empecé a ver caminar. Por los pasillos, sentía la necesidad de serle fiel, sin saber nada de ella, de serle fiel a mi pensamiento por ella. A mi ilusión a mi sueño a la niña de la vainilla…. Sentía que no la podía engañar… deje de salir a fiestas, deje de tener relaciones por una sola noche…. En resumen, había dejado mi bohemia y desenfrenada vida, por algo, una ilusión, por una persona de la cual nunca había escuchado su nombre, pero que estaba en mis sueños cada noche y en mi mente todos los días de la semana…. Pero, una de las cosas que más me aterraban y me remordían era que ella se defraudara cuando supiera de mis historias lujuriosas; de mi pasado como lo llamo yo ahora en mi presente.. Temía que se alejara porque pensara que yo le iba a hacer daño! …Me asustaba también que los miles de rumores que conllevaba mi nombre llegaran a sus oídos…. Esos rumores siempre iban y venían por el viento …y todos, sabían algo de mi pasado, quizá ella ya supiera de mi y no me haya prestado atención por dichos conventillos que se formaban cuando yo pasaba…. Aun así, me tomaba una cerveza en mi casa. Y me fumaba unos cigarros en mi cuarto, ese placer aun no lo había alejado de mi vida mientras, escuchaba a Salieri, llegue a la conclusión, de porque me atraía tanto esa chica… o mejor dicho, aun no lo sabía, pero había llegado a una conclusión, bastante decente… No sabía muy bien que era, pero, podría a ver sido, su olor, su esencia su persona, su caminar el brillo de sus ojos lo que más me impresionaba. Su caminar monótono, como si arrastrara los pies, esa esencia misteriosa que ella emanaba, pero, cada vez que la veía desde que la vi pasar por primera vez, siento como una especie de relajo… como cuando te fumas un pito y terminas en las nubes. Algo así me sentí la primera vez que la mire… era una sensación extraño la verdad, ella, tenía algo que hacía que se me moviera el piso, quizá era la química como alguna vez me dijo la pollo… pero, cada vez que se cruzaba en mi camino, yo tenía la necesidad de correr a donde ella.. Y hablarle…. Pero nunca lo hice…. Cada día durante casi un año yo la miraba siempre iba con audífonos, se notaban eran negros. Ni idea de que música escuchaba… era algo que siempre me preguntaba… no sé si escuchaba ese infierno musical del reggaetón o podría hacer que el rock… o tal vez, seguía la moda pasajera de los coreanos… en todo caso siempre descartaba la primera opción.. Algo me decía que ella no era de ese tipo de chicas…. También siempre en su cabello llevaba algún tipo de adorno…. Cada vez que ella llegaba sentía que el tiempo pasaba lentamente…. Todo en cámara lenta, así la podía mirar mejor!.... siempre me fijaba en cada detalle de ella, habían días, en que sus labios lucían de un tono anaranjado y otros días estaba rosáceos … siempre usaba aros, un día estaba con el pelo tomado, y me percaté de que en sus orejas habían dos perforaciones mas; algunos días, ella tenía más ojeras que otros, como si siempre se durmiera tarde…. A veces pasaba con una chica un poco mas bajita que ella, la cual lucia el pelo largo y usaba anteojos… ella, era lo de menos, pero mi veela como también la llamaba yo, irradiaba un aire de superioridad en todo sentido… Y así, paso el tiempo…. La vi con casacas por la lluvia, el pelo mojado. La vi con el buzo del colegio… usaba el pantalón recto. Y zapatillas de lona negras. También un día, la vi llevando una viola en su estuche… al parecer ella también era músico Hasta que llego septiembre y con toda la parafernalia del 18. La divise a lo lejos, llevando un traje de china floreado, se veía hermosa…. Debo admitir que ahora ultimo se había unido otro miedo a la lista de miedos que yo tenía mentalmente El nuevo temor que se infundo en mi era que si las cosas seguían así, yo me iría del liceo sin saber su nombre o peor, sin haber hablado con ella ya, había perdido las esperanzas de que algún día ella me hablara; yo fantaseaba con miles de formas en las cuales nos pudiéramos hablar…. Yo, no le hablaba porque de verdad me había vuelto un cobarde desde que la veía pasar. Creo que una vez intente hablarle…. Fue a los dos meses de verla… en esa época, yo no sabía porque me atraía tanto…. Y cuando le fui a hablar. Me quede congelado y con el brazo estirado…. Me sentí tan mal…. Que me fui corriendo al baño. Por suerte, ella no había notado nada. Sus audífonos milagrosos impidieron una de mis peores humillaciones…. Hasta que…. ¡Un día! Cuando ya había perdido toda esperanza de escucharla hablar, faltaba exactamente un mes y medio para que yo saliera de clases.… me dirigí con la pollo a la biblioteca a entregar unos textos de ingles… íbamos hablando tan tranquilamente de video juegos y de música que yo, no me di cuenta quien mas estaba en la biblioteca… al momento de acercarnos al mostrador, me percate, de que mi misteriosa musa estaba entregando un libro a la bibliotecaria…. Cuando me di cuenta de que era ella, me congele , me tiritaron las piernas me sudo la frente y mis mente quedo en blanco. Yo estaba al lado de ella, estaba de pie al lado de ella mirándola desde arriba escuchándola hablar. Viendo más de cerca sus movimientos. Ella, le decía a la encargada que iba a echar una ojeada a los libros que estuvieran. A mano, quería leer algo antes de salir de clases y no sabía que otra cosa leer. Había leído la mayoría de los libros que ya estaba acá. Su voz era suave pero arrastrada, hablaba con mucha calma y sonreía … se dio media vuelta y fue a los estantes. Yo la seguí con la mirada… mientras la pollo entregaba los libros… yo pensaba que me podía acercar a recomendarle algún libro ya que ella no sabía que leer. ¡Esta era mi oportunidad!.. ¡No debía desaprovecharla! Tenía que acercarme a ella a hablarle. Si no lo hacía ahora, ¡no lo aria nunca! …. Sentí como un golpe de adrenalina Se apoderaba de mi y como la electricidad corría por mi mente… la pollo ya había terminado de entregar los libros fue ahí, cuando moví las piernas. Rígidamente y camine hacia ella... La mire ella estaba sin los audífonos y la música se reproducía a un volumen alto, estaba escuchando a Led Zepelín sin duda, Me alegre, por lo menos teníamos gustos musicales similares. Ella miraba un estante de literatura española … arriba a la altura de mis brazos estaba un libro de de Gabriel miro …. Se lo podía recomendar , era de la generación del 14 cavia la posibilidad de que a ella le llegara a interesar, tirite, pero, me di el tiempo me calme y antes de perder mi oportunidad le dije ….” Este libro es bueno! Es de Gabriel Miro. Por si te interesa la generación del 14”…. yo la verdad, no sé de donde saque la fuerza para hablarle, su olor a vainilla, se hacía más intenso con cada movimiento de ella. Le ofrecí el libro con mis manos temblorosas... Mire sus manos, también eran algo amarillentas, al parecer no se cortaba las uñas, sus dedos eran delgados y finos a demás llevaba un anillo de oro que tenía una pequeña gema verde…. Ella me miro y me sonrió. “gracias, la verdad, no sabía qué cosa leer.” Dijo ella sonriéndome… su sonrisa era hermosa. En los dientes de arriba tenía un colmillo montando, aun así, ella se veía hermosa pues para mí siempre lo era. La mire más detenidamente a la cara y me fije que en su nariz y parte de sus mejillas habían muchas pecas pero eran tan claras que se mimetizaban con su amarillenta piel. Seguía sonando su música en los audífonos. La canción me sonaba familiar, aun así, no reconocía al grupo. Se me habían acabado los temas de conversación, me entro miedo. Mientras ella echaba una ojeada al libro. Le pregunte. “ ¿qué escuchas?” … ella sin alzar la mirada me respondió en un tono de voz alegre. “estoy escuchando a the doors” yo, solo me dedicaba a mirarla... Ella era tan hermosa. Desde el punto en que la viera. A sí que le dije “ ¿que música te gusta escuchar?” … ella volvió a sonreír y me miro a los ojos, sentí como una especie de orgasmo cuando me miro…. Fue una sensación mas similar pero no tan potente... ella respondió “ me gusto mucho el new wave y la música de los 80… y el rock chileno” ….. La verdad ¡ella escucha la misma música que yo! … me sentí bastante pleno en ese momento…. Estuvimos como 10 minutos hablando de libros y de música. Me sentía en el cielo escuchándola, estaba tan cerca de ella, sinceramente ella era lo que siempre soñé. Me gusto su voz era un sueño para mi…. Hasta, que de repente recordé algo. Me acorde, de que no había preguntado su nombre sí que con más confianza alegría y optimismo la mire de nuevo y pregunte. “Oye y…. ¿Cuál es tu nombre?” Ella miro para otro lado y me volvió a mirar a mí. Vi de verdad como todo se movía cámara lenta, mientras sus labios emitían una palabra. “Valentina”… Si hasta su nombre era hermoso… Y es aquí cuando acabo de dar el primer paso, a mi felicidad….
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