El Apagn
Publicado en Aug 18, 2014
Hay apagón. Son casi las seis y media de la tarde. Mi madre duerme la siesta
y yo de repente me siento víctima del pánico. Aunque no le tengo miedo a la oscuridad esta situación de que todito el barrio este a oscuras me recuerda a alguna escena catastrofica de alguna pelicula de terror . Una vecina salió de su casa para comprobar que el apagón no era sólo en su domicilio, cuando se dio cuenta que era en toda la zona, se metió en su casa y dijo que iva a llamar a la UTE. Pero entonces yo pensé, si el telefono es electrico como se supone que vas a llamar a algún lado? NO HAY LUZ. Por otro lado en casa ni siquiera hay velas y nuestros celulares alumbran, pero alumbran poco y nada. Estamos a oscuras, literalmente. Y con estamos, me refiero a mamá y a mí, las dos solas, sin nada para hacer, sin nada para decir, ella esta cansada de escuchar todas mis teorías sobre como la luz nos ha abandonado, se fue a acostar otra vez, dejandome sola, sola para escibir como me siento en la penumbra. Ahora que lo pienso hubiera sido bueno que me pusiera a declarar luz en medio de tanta oscuridad, pero no lo hice. :P Hay personas abajo, con linternas, espero que sean de la UTE, pero si no lo son sólo puedo sentir lastima por esas personas que están tan al santo botón como para pasear en momentos de total oscuridad. Algo bueno logré sacar de toda esta situación del apagón. Puedo ver las estrellas, con claridad, eso es agradable, a decir verdad en lo que a mí respecta los apagones deberían ser oportunidades de tener un momento con tu familia, comer alguna comida rica rodeados de velas. Eso es lo que mi familia hacía cuando era chica.
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Agustina Aguirre
Guillermo Capece
Guillermo