La conjura del Apollo (Novela) Captulo 4
Publicado en Mar 11, 2015
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- Es muy bonito este parque, Malcom...
 
- Sí. El Central Park es el parque más bonito que tenemos en Nueva York. Si todos nosotros lo viésemos de esta manera quizás el mito de nuestro barrio se convertiría en una realidad. Dejaría de ser un problema para ser una solución.
 
- ¿Eres cristiano, Malcom?
 
- ¿Por qué no?
 
- ¿Pero lo eres o no lo eres?
 
- Cuando digo por qué no estoy afirmando lo que soy, Hope. Es una manera muy nostálgica de contestar a lo gallego.  
 
- ¿Sigues recordando a Desiré?
 
- Desiré fue sólo un deseo nada más, Hope. Ahora sé que un deseo no tiene nada que ver con un amor verdadero.
 
- ¿Por qué eres tan diferente a los demás, Malcom?
 
- Posiblemente no sea tan diferente a los demás sino que los demás creen que soy diferente. Decía Aristóteles que hay la misma diferencia entre un sabio y un ignorante que entre un hombre vivo y un cadáver. ¿Qué opináis vosotras?
 
- Todas nosotras estamos con Jones.
 
- Por un momento creí que tú también eras diferente.
 
- Lo siento, Malcom.
 
- ¿Por qué? ¿Tú crees que tus sentimientos son importantes para mí?
 
- Si no lo fueran no tendría sentido alguno ni habría ningún motivo para que me hayas citado esta tarde.
 
- ¿De verdad crees que te he citado por eso?
 
- Lo leo en tus ojos.
 
- ¡Vaya por Dios! ¿De verdad tú sabes leer en los ojos de los hombres?
 
- Hay miradas que no pueden esconder la verdad.
 
- Entonces te estás engañando a ti misma.
 
- ¿Por preferir ser una seguidora de Jones?
 
- Por preferir ser una necia estés o no estés con Jones.
 
- Yo a eso lo llamo celos.
 
- Pues yo no. Yo a eso lo llamo lástima.
 
- ¡Ya! Se me estaba olvidando que eres cristiano.
 
- Aunque no lo fuera me seguirías dando lástima; sobre todo porque no sabes lo que es la liberación.
 
- ¿Y qué es la liberación?
 
- Un día me contaron que un joven universitario, blanco para más señas, habló sobre la liberación. Dijo textualmente lo siguiente: ¿Somos expresiones de nuestras expresividades propias? ¿Sólo siendo así podemos hacer que los demás nos reconozcan cuando estamos presentes en los pensamientos ajenos? Solamente hay dos respuestas posibles: o nos valoramos o nos invalidan. Y es totalmente razonable que para que nos den validez a través de los pensamientos ajenos es necesario tener validez dentro de nosotros mismos. A eso yo lo llamo Liberación.
 
- Debe ser un filósofo y yo de los filósofos paso totalmente porque son muy aburridos.
 
- Pues te equivocas. No es un filósofo ni estudia Filosofía. Sólo es un hombre que sabe comunicar lo que de verdad siente.
 
- ¿Otro cristiano tal vez?
 
- Quizás sea otro cristiano tal vez; pero puedes comprobarlo por ti misma si es que tienes deseos de conocerle.
 
- ¿Es que me lo vas a presentar un día de estos?
 
- No, pero se ha anunciado por todo el barrio que mañana tendrá el suficiente valor como para venir a hablar en público al Marcus Garvey Park, en el corazón de nuestro Harlem.
 
- ¿Tan valiente es?
 
- Mucho más que eso. Se dice que es mucho más valiente de lo que la gente cree. ¿Te interesa o no te interesa?
 
- Si está bueno de verdad puede interesarme.
 
- Está mejor de lo que tú puedas imaginarte. Y eso que es un intelectual.
 
- Pues debe ser un loco si se atreve a venir.
 
- Me estaba refiriendo, precisamente, a que está mucho mejor de la cabeza de lo que tú puedas creer. En cuanto a lo otro ya hay muchas chicas que desearían estar con él en la cama.
 
- Quiero comprobarlo por mí misma.
 
- Eso es más imposible que pedir que Jones tenga un poco de inteligencia. A Jones es muy fácil llevárselo a la cama pero que se te quite de la cabeza eso de creer que ese joven universitario es como Jones.
 
- ¿No le gustamos las mujeres de muy buen ver?
 
- Pregúntale eso a su novia a ver que te dice ella.
 
- Pues ya que es tan interesante me interesa verlo.
 
- Pero no sueñes demasiado con él, Hope, después de haberle escuchado. No le interesa para nada coger varillas sueltas.
 
- Ya me explicarás que quiere decir eso.
 
- Que no pasa hambre.
 
- Tengo hambre, Malcom...
 
- Pídele a Jones que te invite. Verás que pronto te hartas de tanto llenar tu estómago; porque hay que tener mucho estómago para comer con Jones. Come la sopa con las dos manos sin usar, para nada, la cuchara. Pero si te interesan los primates...
 
- ¿De verdad que no son celos?
 
- No. De verdad que sólo es indiferencia.
 
- ¿Cuándo has dicho que viene ese joven a dirigirnos la palabra en el Marcus Garvey Park?
 
- Mañana por la mañana. Te advierto que estudia en la Universidad Columbia y quizás eso sea demasiado para ti. ¿Te atreves o no te atreves a conocerle?
 
- Me atrevo.
 
- Pues quizás te sirva el conocerle para abrir bien tu cerebro y para saber cómo soy yo y lo que yo siento de verdad.
 
- ¿Y si al final resulta que me decepcionas?
 
- No me preocupa decepcionarte o no decepcionarte. Yo soy yo. He decidido que yo soy siempre yo y no mis circunstancias. Lo que me preocupa es que no aprendas a pensar. 
 
- ¿Y tú crees que ese joven universitario blanco me va a enseñar algo para aprender a pensar?
 
- Posiblemente sí; aunque ya sería bastante que te enseñara a razonar.
 
- No creo que sea mejor que Jones.
 
- Por lo que me han contado de él, se siente tan liberado que no le preocupa ser mejor que nadie. Y eso es lo que le hace ser el mejor de todos sin que él lo quiera.
 
- ¡Joder! ¡Cada vez estoy más interesada en conocerle!
 
- ¿Entonces quedamos tú y yo juntos para acudir a escucharle al Marcus Garvey Park de nuestro querido Harlem? 
 
- ¿A qué hora?
 
- Exactamente a las 9 de la mañana.
 
- Quedamos.
 
- Es muy bonito este Central Park de Nueva York... 
 
- ¿De verdad que no recuerdas para nada a Desiré?
 
- De verdad que sólo recuerdo que tengo futuro.
 
- Adiós, Malcom. Mañana comprobaré si eso es verdad o sólo una ilusión.
 
- ¿Ilusión has dicho? En la Literatura Universal hubo un poeta español llamado Ramón de Campoamor que dijo algo sobre eso. ¿Quieres saberlo?
 
- Ardo en deseos de saberlo.
 
- Pues no te quemes mucho si te digo que aquel poeta escribió esto: No rechaces tus sueños. ¿Sin la ilusión el mundo que sería? 
 
- Hasta mañana, Malcom.
 
- Hasta mañana, Hope. 
 
 
 
  
 
 
 
 
 
 
 
 
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Foto del autor Jos Orero De Julin
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Descripción

Novela

Palabras Clave: Literatura Prosa Novela Relatos Narrativa.

Categoría: Cuentos & Historias

Subcategoría: Relatos



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