Estoy en las vísperas de participar en la carrera de fondo "Últimas Noticias" de Quito y meencuentro pasando dos días en Babahoyo. Me encuentro en forma y no quiero perderla, así quese me ocurre la idea de llevar a cabo cumplir corriendo por un circuito improvisado por toda laciudad y por sus afueras. Mi referencia, para no despistarme, es el mismo río de Babahoyo.
 
Es necesario tomar nota, como conocimiento cultural, que Babahoyo es la capital de la provinciaecuatoriana de Los Ríos. Situada junto al río Babahoyo, es un centro comercial agrícola; sobretodo en lo referente al cacao, el arroz, el café y el azúcar (tal como tengo escrito en mi novelahistórica "Morir por ti Siempre") y, además, es centro de industrias derivadas de la agricultura,elaboración de alcohol y perfumes. Hay por aquí minas de azufre, oro y plata. También esnecesario saber que su puerto fluvial le comunica con Guayaquil. En cuanto al río Babahoyo,pertenece a las provincias de Los Ríos y Guayas, toma su nombre de la ciudad de Babahoyo y,después de unos 200 kilómetros de recorrido, se une con el río Daule para formar el Guayas.Como curiosidad se le conoce también con el nombre de Bodegas.
 
La sesión de "footing" la he llevado a cabo con vistas a mi participación en la "Últimas Noticias"de Quito y, además, para abrir el apetito antes de almorzar. Por aquí una de las cosas másapetitosas para comer es el pescado y, efectivamente, después de todo el recorrido (varioskilómetros a muy buen ritmo y sin bajar la resistencia en ningún momento) me han servido unaespecie de pargo.
 
El pargo es un pez osteíctio de la familia de los espáridos ("Sparus pagrus"), semejante al pagel,de unos 25 centímetros de longitud y de color plateado. Su carne es muy apreciada en todoEcuador. Tengo que añadir que pagel es un sinónimo de breca (palabra que deriva del latín"perca" a través de una forma mozárabe), que es un perciforme que alcanza los 60 centímetrosde longitud, de cuerpo alto y comprimido y perfil cefálico incinado que, además, tiene el dorso decolor asalmonado, debilitándose hacia los flancos, y plateado en el vientre; habitando en losfondos rocosos y arenosos, costeros del Mediterráneo y Atlántico oriental, que se alimenta deinvertebrados bentónicos y que también es de carne muy apreciada.
 
Hace una temperatura veraniega este día en Babahoyo, con bastante humedad en el aire por la presencia del río. Paso por varios puentes de madera. He corrido tres veces la prueba "Últimas Noticias" de Quito, pero no recuerdo si este entrenamiento en Babahoyo lo llevo a cabo antes de mi primera, mi segunda o mi tercera participación (las tres en años consecutivos y siempre llegando a la meta como peudo comprobar con los tres diplomas que me entregaron). Lo que sí recuerdo es que visto con una camiseta de atleta, sin mangas como las del baloncesto, una pantaloneta corta y ajustada y unas zapatillas del tipo tenis. La ropa se me pega ligeramente al cuerpo por causa de la humedad atmosférica, pero estoy fresco y mantengo el ritmo más bien alto y sin ninguna dificultad respiratoria ni cansancio muscular. Mi corazón funciona perfectalmente e igual sucede con mis limpios pulmones. Cuando corro ya por dentro de las calles de Babahoyo voy buscando referencias con mi vista para no perderme a la hora de llegar a la puerta de la vivienda de mis familiares ecuatorianos.
 
Sigo con la cultura. Los peces osteíctios son una clase de vertebrados gnatóstomos, de esqueleto interno continuo y cartilaginoso en las formas primitivas y osificado en las más evolucionadas; con mandíbulas y cinturas complicadas por la adición de huesos dérmicos; radios en las aletas con elementos unificados, a menudo ramificados (lepidotricos), y un opérculo óseo que recubre los arcos branquiales. Proceden de formas del devónico, aunque su evolución fue mayor durante el mesozoico. Comprenden la mayoría de los peces actuales.
 
Ahora bien, la familia de los espáridos (a la que pertenece el pargo que me han servido como almuerzo) proviene del latín "Sparus" y el gariego "eidos" Esta familia de osteíctios son de cuerpo alargado, alto, algo comprimido y de constitución robusta, cubierto de escamas cicloideas o levemente ctenoides; los dientes de hallan sobre las mandíbulas y nunca sobre el paladar. Es frecuente ver en ellos el hermafroditismo y abundan en las cercanías de las costas, en aguas poco profundas. Muchas de sus especies (parecidos a los pargos) como el dentón, la dorada y el besugo son, igualmente, muy apreciados por su carne.
 
Como el "footing" de preparación atlética me ha abierto el apetito, me como gustosamente el pargo, acompañado de arroz y un poco de ají, más un buen banano ecuatoriano. Después de comer, salgo a darme una vuelta por la ciudad de Babahoyo. Un día verdaderamente completo.