Hut Coffee de Molina de Segura. Bebemos agua.  
 
Yo.- ¿Qué querías ser de mayor cuando eras pequeño?
 
Tú.- No llegar nunca a serlo y lo estoy consiguiendo a pesar de las envidias de quienes se hacen mayores cada vez que se levantan de sus camas. 
 
Yo.- ¿Guardas objetos de tu infancia?
 
Tú.- Sí. En el Museo de mis Recuerdos. Se encuentran en una alacena cuya llave la tiene mi hermana. A lo mejor hasta es verdad.
 
Yo.- ¿Cómo es ella?
 
Tú.- Mi hermana es mi hermana.
 
Yo.- ¿Muchos cafés con leche?
  
Tú.- No tantos como algunos dicen pero sí muchísimos más de los que algunos creen. Un café con leche siempre es una invitación para conocernos lo pague quien lo pague.
 
Yo.- ¿Has tenido que pagar tú alguna vez algún cucalibre?
 
Tú.- Por supuesto que sí. Las barras bravas son testigas de que sí. A veces algunas veces el cantor lleva razón. Sí.
 
Yo.- ¿Siempres has dicho y has hecho lo que has pensado?
 
Tú.- Más o menos. A veces más. A veces menos. Pero siempre he dicho y he hecho lo que he pensado. Todavía lo sigo haciendo y no me confieso culpable por ello porque no son pecados mortales.
 
Yo.- ¿De qué no estás ahora en condiciones de hacer?
 
Tú.- ¿Qué son las condiciones? No tengo el mal gusto de conocer a esas señoritas.
 
Yo.- ¿Qué es lo que no eres?
 
Tú.- Yo no soy, por ejemplo, un fantasma. Jamás he sido un fantasma aunque he tenido la desagradable experiencia de haber conocido a muchos de ellos. Pero no me he contagido nunca de esa enfermedad.
 
Yo.- ¿Qué cosas sueñas?
 
Tú.- Yo no sueño cosas. Yo sueño con seres humanos y si son humanas mucho mejor.
 
Yo.- ¿Has estado en Barcelona?
 
Tú.- Sí. Pero lo mismo que he estado en Tarancón. Al fin y al cabo para mí es lo mismo porque en las veces que he estado en Barcelona y en las veces que he estado en Tarancón siempre he pensado en español y siempre he hablado en español. Y lo seguiré haciendo siempre. Tengo testigos presenciales que lo han visto.
 
Yo.- ¿Y no tienes miedo a los independentistas catalanes?
 
Tú.- ¡Jajajajajá! ¡Muy bueno ese chiste! Que lástima que no sepa yo reír en catalán porque ya sería la hostia. 
  
Yo.- ¿Qué te preocupa de España?
 
Tú.- Que se acaben las españolas y las nacionalizadas españolas.
 
Yo.- ¿Qué es lo que verdaderamente te enamora de nuestro país?
 
Tú.- Las españolas y las nacionalizadas españolas.
 
Yo.- ¿Qué es lo mejor que tiene España?
 
Tú.- Las españolas y las nacionalizadas españolas.
 
Yo.- ¿Con quiénes te guastaría formar un coro de canto?
 
Tú.- Con las españolas y las nacinalizadas españolas.
 
Yo.- ¿Eres un disco rayado?
 
Tú.- Eso dicen muchos de mí. Claro que también dicen de mí que soy multimillonario. O sea que va a ser que no pero... ¿y si sí?... ¿eh?... es que no pero... ¿y si sí?... ¿Qué pasa si es que no pero resulta que es que sí? Porque resulta que en siendo que no resulta que en siendo que sí... o sea que yo ya... ya yo... yo ya... ya yo... yo ya...
 
Yo.- ¿Qué te resulta curioso?
 
Tú.- Escuchar a Serrat cantando en catalán lo de ¡Quisiera ser tan alta como la luna, como la luna, como la luna! ¡Para ver a los soldados de Cataluña, de Cataluña, de Cataluña!
 
Yo.- ¿Aprendiste algo de Serrat?
 
Tú.- ¡Jajajajajá! ¡Qué buen chiste! ¡Lástima que no sepa reírme en catalán porque eso ya sería la hostia! ¡No sigas jodiendo con la pelota, chaval! Por ejemplo.
 
Yo.- ¿Qué propuestas haces con tus canciones?
 
Tú.- Tanganear de vez en cuando. Eso de tanganear me mola un mogollón de veces. Lo digo en serio. Y es que me encantan las tanganas barriobajeras. ¿Me entiendes o te lo explico?
 
Yo.- ¿En tu discografía hay tangos?
 
Tú.- Sí. Hay tanganas. Como por ejemplo alcé un vaso pa brindar por ti y el vaso traidor se me rompió. ¡Jajajajajá, pibe, muy buena la pregunta! ¡Vos ya sabés cómo so yo y no te me chingues ahora boludo no vayas a terminar más gordo y amargado que "El Rafael del Amor"!
 
Yo.- ¿Has olvidado ya a Don Alfonso?
 
Tú.- Imposible. Don Alfonso ya es Sabio y yo todavía no.
 
Yo.- ¿Con qué artista te gustaría formar un dúo para ganar algo?
 
Tú.- Con Carmena de España; a ver si así ganamos alguno de los Festivales de la Eurovisión del Siglo XXI.
 
Yo.- ¿De qué sirve el consuelo?
 
Tú.- De tener algo fijo donde poner los pies. ¡Jajajajajá! ¡Muy buena la pregunta!
 
Yo.- ¿Cómo se llama tu perro?
 
Tú.- ¡Chispas!
 
Yo no sé si ha sido una exclamación de sorpresa o es que el perro se llama así. Terminamos la Entrevista y terminamos de bebernos el agua.