Es tan fácil
dejarse llevar
pero  duele tanto,
el recordar
que solo tenemos
una sola vida
y que es tan
maravillosa
importar el sufrimiento,
el abandono,
las caricias
de algún hombre
 cosa que olvidé
hace tantos años,
he luchado
pero no por mis sueños,
ya los he olvidado
he luchado
por lo que queda
de mi vida
 por quedarme
 a pesar
de dolores,
angustias,
temores,
esperanzas,
tengo cinco amores
legítimos y puros
tres pequeños
que son trozos
 de mi lastimado
corazón
y dos amores
que parí con dolor
pero con mucho amor,
la música, bendita medicina
que calma mis nervios,
que me adormece
que me remonta
a mi juventud,
que parece fue ayer
pero que se ha perdido
 a través del tiempo
que se ha ido
irremediablemente
en éste momento
solo dormida
me encuentro bien
se adormece
el ruido de mi oído
la angustia
del próximo tratamiento
de radioterapia,
tantas cosas tan difíciles
pero la música las disminuye
los seres humanos
nos aferramos
a la vida con uñas y dientes,
no nos queremos
dejar llevar
todo tiene un límite
no sé cuando
llegará el mío
e irremediablemente
lo tendré que hacer
sería tan fácil
si solo durmiéramos
sin agonía, en realidad
a veces no sé
lo que digo
seguiré escuchando
a mis amados Bee Gees
pero sobretodo
me seguiré encomendado
a Dios el supremo
Arquitecto de la Vida