Un Ángel que ha escapado del cielo
Llego a mi puerta con sutil delicadeza,
le abrí gozoso y al prendarme su belleza
mi soledad de mis ojos libro el velo.
.
Prendado de ella insistí hacerla pasar
estaba allí a mi lado sin poder tocarla,
sin darme la oportunidad de amarla
Creía soñar con miedo a despertar.
No soñaba, era verdad, ella existía
hermosa dulce como fresa en miel,
sentía en mis manos el contacto con su piel
Pero ella sutilmente se imponía.
Que me ha dado que estoy ilusionado
yo que juraba no volverme a enamorar,
y sin ser cupido mi bello Ángel me ha flechado
henchido de gozo de alegría deseo gritar.
Gritar por que logré hacerla pasar
pasar al interior de mi alma solitaria,
espero nos amemos con pasión,
nunca mi vida me vayas a olvidar,
si llegaste a mi puerta fue a quedarte
Y a tu cielo nunca pretendas regresar.
Luis Varela Luzardo