Dia 6 de octubre del año 2015 después de Jesucristo. Siguen nuestras experiencias en los Estados Unidos de Norteamérica. Esta tarde nos ha tocado vivir una aventura inesperada; algo que estaba fuera de nuestros planteamientos previos. ¿Servir para ser servidos o ser servidos para un servicio? Mi vida está tan repleta de acontecimientos variados que ya es ley consuetudinaria para mis experiencias vitales. Y hablando de ley nos hemos topado con la ley. Al parecer, un policia estatal estaba jugando a los numeros aleatorios y nos ha tocado el premio a nosotros. El premio consistió en pagar una multa de 146 dolares. Lo aleatorio del asunto no deja de ser gracioso... excepto para Jimmy que, sin quererlo, tras celebrarse el sorteo donde hemos salido afortunados, tuvo que sacar de su billetera la plata correspondiente al premio mayor del día. Me parece que no le ha hecho mucha gracia el chiste.
 
Todo ha ocurrido por llevar a Bella (la gatita presumida) al salón de belleza para gatos, gatas y descendientes de gatos y gatas. Me parece que hay que pagar otros 600 dólares más y este chiste tampoco le ha gustado mucho a Jimmy que, tras enterarse del nuevo premio, se ha ido a jugar, con sus amigos, a la bolera. Todo esto parece incluso un bolero pero resulta que es cierto aunque se cante o no se cante.
 
Por cierto, de Gimi sigo sin tener ninguna clase de noticia, pero es que, en realidad y a decir verdades, quien quiere tener noticias es él sobre mí. Lo tiene muy duro porque ni tan siquiera sabe dónde se encuentra la Bahia Tortuga. Y hablando de costas, a costa de los cotilleos familiares, Gimi sigue sin saber que yo aprendí muy bien aprendido que "Amor sin barreras" es una película de 1961, dirigida por Robert Wise y Jermoe Robbins, con guión adaptado de Ernest Lehman (sobre un libreto escrito por los dos directores), y protagonizada, en sus papeles más estelares, por Natalie Wodd y Richard Bymer. Lo que tampoco sabe Gimi muy bien es que es una sorprendente cuestión real que un hombre y una mujer, con culturas bien diferentes pero con mucha cultura, pueden mantener un romance inolvidable que les lleve hasta el altar hasta más allá de la muerte. 
 
Dicha y afirmada tal cosa, vuelvo a la 95 Sur. Lo del policia no es ninguna broma y menos broma es lo de la gatita presumida; o sea, que quiero decir que los ratones andan sueltos y al acecho; lo cual hace que tengamos que seguir poniendo trampas para continuar cazándolos como a conejos desprevenidos. Con razón mi padre era un excelente y sensacional cazador de conejos silvestres y con razón he aprendido yo bastante de mi padre a la hora de hacerles caer en sus propias trampas. En otras palabra, que no estoy en este hermoso país de ojeo sino de paseo, que son dos cosas muy distintas y bien conocidas por los verdes donjuanes de pacotilla que se las dan de machos invencibles. Etcétera, etcétera y etcétera. 
 
Cierro hoy mi Diario recordando una vieja canción de mi infancia: Al salir de San Antonio,
al salir de la ciudad, hallarás un viejo fuerte en sus ruinas nada más. No verás ningún valiente, ni verás ninguna cruz pero tú tal vez escuches una voz en el azul. Es la historia de unos hombres que lucharon con valor y en el Álamo murieron por la patria y el honor. En el año 36 de mil ochocientos, un valiente coronel quiso el fuerte defender y tambien David Crocket, añadió su fusil y un monton de tejanos, a luchar, a vencer o a morir. Ellos eran nada mas 189 y supieron combatir contra 25.000. Vencedor fue Santana, general de valor,
que al entrar en el fuerte, uno a uno la vida quitó". Pero no quiero recordar nada triste y cambio de canción. Me pongo a cantar de manera positiva y a lo The Platters: "Sólo tú, puedes hacer que este mundo se vea bien; sólo tú puedes hacer la oscuridad brillante; sólo tú y tú solamente puedes emocionarme como lo haces y llenar mi corazón con amor solamente por ti. Sólo tú puedes hacer este cambio en mí ya que es verdad que tú eres mi destino. Cuando tomas mi mano comprendo la magia que haces; eres mi sueño hecho realidad, mi única amante. Sólo tú puedes hacer este cambio en mí ya que es verdad que tú eres mi destino. Cuando tomas mi mano comprendo la magia que haces. Eres mi sueño hecho realidad. Mi única amante. Sólo tú. Me estoy refiriendo a mi Princesa y, tomando su mano, nos vamos los dos a la orilla del mar. 
 
Cierro mi Diario pero ya veréis cómo dentro de muy poco tiempo (y no suelo equivocarme cuando anuncio este tipo de cosas) los editores nos endilgan otro tocho enorme y absurdo de la aventuras de Harry Potter y de heptalogía pasa a ser octología por lo menos. Esperemos que me esté equivocando... pero lo dudo porque el negocio es el negocio y por eso pasa lo que pasa en el mundo de las Letras y del Cine. Hasta otro día en que me sienta inspirado para escribir de nuevo en mi amado Diario.