Por Mario Alexis González (22 de junio de 2016)
 
Esperanza Galván lleva 12 meses y 29 días privada de su libertad por el delito de cohecho. El 24 de noviembre del 2015, el Tribunal Penal de la Corte Nacional la declaró culpable y la sentenció a 3 años de prisión. Sin embargo, en abril de este año la Sala Penal de la Corte de Justicia (CNJ) aceptó a trámite los recursos de apelación y esa sentencia no ha podido ser ejecutada. Por eso Esperanza Galván sigue figurando como legisladora y ha cobrado durante este tiempo su salario mensual de 5.009 dólares, correspondiente a la partida presupuestaria 510105.540. Así consta en la página web de la Asamblea Nacional.
 
Esperanza Galván se ha excusado de las sesiones del Pleno y de la Comisión de Desarrollo Económico. Hasta mayo fue reemplazada por su alterno Pablo De La Torre. Pero él no pudo seguir supliéndola ya que fue designado Coordinador del MIES en Esmeraldas. El 7 de junio la Secretaría General de la Asamblea convocó a Nancis Bazurto, quien según los registros del Consejo Nacional Electoral (CNE) debía tomar las labores de alterna, por un orden sucesivo en la lista de los más votados en Esmeraldas. Desde ese día, Nancis Bazurto ha asistido a 4 sesiones del Pleno y 2 de la Comisión. Por cada asistencia recibe 166 dólares más 120 dólares por un bono de transporte. Es decir, recibió un total de 1.716 dólares. Nancis Bazurto prefiere no emitir juicios de valor sobre el pago que recibe. "Justo o no, es lo que está estipulado. Se está tratando de que hayan cambios en la Ley Orgánica Legislativa", dijo ayer en una entrevista con este Diario.
 
Santiago Guarderas, abogado constitucionalista y socialcristiano, explica que no hay una razón legal para que Esperanza Galván siga cobrando su sueldo. Menciona que su condición de asambleísta la puede conservar siempre y cuando goce de una licencia sin remuneración, que según el artículo 112 de la Ley de la Función Legislativa debe ser otorgada por el Pleno del organismo. Caso contrario "debería ser destituida por abandono del cargo". Él agrega que mientras no haya sentencia ejecutoria no hay lugar a suspensión de derechos y no puede ser sustituida totalmente por su alterna. Ayer, las redes sociales fueron el escenario de varias críticas para la bancada legislativa de Alianza País, la Asamblea y Esperanza Galván por el pago de su sueldo. Se comparó con el caso de la opositora Magali Orellana. La legisladora de Pachakutik fue sancionada por el Consejo de Administración Legislativa (CAL) a 30 día de suspensión sin paga por "protagonizar incidentes violentos en las sesiones del pleno, y maltratar de palabra o de obra a los asambleístas o funcionarios de la Asamblea Nacional".