Hay muchas frases populares que encierran, dentro de sí, grandes sabidurías y que yo aprendí desde mi más tierna infancia. Repasemos una brevísima relación de algunas de ellas. En primer lugar recuerdo la que dice "en todos lados cuecen habas": significa que hay problemas o disgustos en todas partes y circunstancias, es muy usada y existe una adición muy empleada, citada por Cervantes (en todas casas cuecen habas; y en la mía, a calderadas, de "El Quijote") Se emplea esta adición (y en la mía a calderadas) para señalar que en nuestro ámbito los problemas son aún mayores. En segundo lugar me viene a la memoria "de todo hay en la viña del señor": Se emplea para indicar que, en este mundo, hay personas de cualquier condición y naturaleza y de uso actual. Una tercera frase que, en este sentido me viene a la memoria es "no hay dos sin tres":  en realidad aquí se expresa el punto uno y el tres, ya que deja sobreentendido que el dos es la reacción de la causa, de la que necesariamente surge el efecto. Digamos entonces que ninguna manifestación existe si no hay en ella una trinidad, o mejor dicho, si no es la resultante de su dualidad generadora... entonces donde hay dos, surge el tres sin demoras. 
 
Con todo esto dado por sobreentendido y bien comprendido, la pregunta que me vengo haciendo desde hace un par de días es ¿qué sucede con Míster X, Santiago y Pepe en el Hogar de Molina de Segura, en Murcia de España? Efectivamente son tres y desde que soy socio activo de dicho Hogar siempre me he preguntado por qué resulta que se sientan en una esquina, lo más lejos posible de todos los demás, incluídas también las mujeres, para hablar solamente entre ellos y nunca son invitados por ninguno de los muchos jugadores del dominó. Siempre tuve esta interrogativa sin poderla resolver hasta el día de hoy en que una persona, con quien me une una gran amistad firme y verdadera, me lo ha dado a conocer. 
 
En primer lugar, Míster X (del cual no sé ni cómo se llama) es porque desde hace mucho tiempo siempre ha tenido problemas con los demás porque le da por insultar a los demás y ya ha sido esxpulsado del Hogar en tres o cuatro ocaisones siendo reincidente. Últimamente no le veo casi nunca dentro del local y puede ser por dos causas: o bien ya le han hecho saber que nadie de los numerosos socios y las numerosas socias desean tener conversación con una persona tan mal educada y procura no acudir ya más veces (salvo raras ocasiones) al Hogar o es que está de vacaciones.
 
Santiago es un caso aparte. Por causas ajenas a la voluntad de cualquier otro socio del Hogar y porque se buscó la ruina él solito por culpa del alcoholismo, ya que tuvo muchos altercados mientras conducía autobuses de viajeros hasta que le pillaron los guardias de tráfico y le retiraron el carné por conducir borracho (lo cual hizo que le expulsaran del puesto de trabajo y perdiese a su familia puesto que hasta su mujer se separó de él) no hace más que meterse con todo el mundo, hablar sandeces y estupideces de alguno de los socios, murmurar continuamente por lo bajo pero diciendo palabrotas y muchas otras acciones de enfrentamientos verbales con muchos socios del Hogar, éstos han decidido no dirigirle la palabra y no invitarle tampoco a las partidas de cartas o dominó.
 
Y en tercer lugar hay que citar a Pepe. A este hay que echarle de comer aparte. Es uno de esos "señoritos chuletas" que siempre hay en todos los pueblos o ciudades pequeñas como Molina de Segura. De los que le gusta gastarle bromas a los demás pero que jamás le gasten una bromita, aunque sea ligera, a él; porque, en ese caso, se pone a la defensiva y a decir en voz alta que no está dispuesto a que nadie le insulte cuando es él el que insulta, con su desleal e innoble comportamiento a los demás. Es de los que, por tener un mezquino puñado de monedas en su bolsillo, se cree el amo del mundo y atropella sin piedad a los que no tienen ni un euro para tomarse el café, el café con leche o el carajillo. Este "chuleta" que es, además, paleto (porque de cultura es como un cero a la izquierda) no hace más que cachondearse de los más pobres y los más humildes. Es el verdadero "intelectual" (aunque de intelectual lo es menos que el burro de mi tío Benito) que dirige la orquesta de estos tres capullos del Hogar. Así que nadie le quiere saludar o si alguien lo hace es por pura educación pero todos se niegan a jugar al dominó o a las cartas con él. 
 
Ya tengo todas las dudas despejadas. Ya sé por qué se arrejuntan los tres en la mesa de la esquina más alejada de la puerta del Hogar y por qué los demás los rechazan a la hora de tener juegos o conversaciones de ellos: un bronca, un alcohólico y un chuleta que llegan hasta el punto no sólo de ser cansinos con sus "bromas" sino que son aburridos, mala gente, y que hablan y murmuran de todos los demás sin tener ni dos dedos de frente en cuanto a sus inteligencias. Así que con respecto a estos tres capullos he tomado la decisión más inteligente que se me ocurre: ver, oír y callar y no tener ninguna conversación con ninguno de ellos. Me parece que es lo más acertado en estos tres casos de personas que no saben convivir con los demás y que luego seguro que le echan la culpa a Dios por lo que ellos hacen y lo que ellos se han ganado (elr echazo de todos los demás) por su propia voluntad y sabiendo muy bien lo que hacen. Así que no interpreto nada más, no hago ninguna crítica sobres sus personas, y paso olímpicamente de los tres porque es mejor no tener amistad con quienes no saben lo que es ser amigos de verdad.