Curso escolar 2000-2001 después de Jesucristo. Soy profesor de Historia de Literatura en el Colegio El Sauce de la ciudad de Tumbaco en las afueras de Quito (Ecuador). Estoy anunciando a mis alumnos y alumnas que voy a enseñarles y explicarles lo que son las corrientes vanguardistas de la Literatura del Siglo XX porque estamos en clase de Literatura Universal. Antes de escribir lo que sucedió a continuación es necesario saber que la inmensa mayoría (por no decir todos) de mis alumnos y alumnas del Colegio Sauce son "hijos de papá" y "niñas pijas", que al año que viene van a ingresar en la Universidad y que están totalmente seguros de que en el futuro van a tener un cargo laboral asegurado gracias a los dineros de sus millonarios papá y millonarias mamás de Ecuador. Por supuesto que la Dirección del Colegio El Sauce sabe de sobra que no tienen ni idea de nada de los que se les enseña en este colegio pero que no importa porque hay que calificarles a todos ellos y a todas ellas con una nota de 20 sobre 20 (la máxima del pensum escolar ecuatoriano) y para ello obligan a todos los profesores y a todas las profesoras a que les pongan en la cartilla de notas un 20 sepan algo o no sepan absolutamente nada de las materias que están estudiando (y eso de que están estudiando es solamente un decir porque en verdad que no estudian nada y no les importa cuando se ven cosas como que el único caso de alumno que ha tenido que repetir Curso -Luis Jijón y hay muchisímos y muchísimas que son igual de chulos que Luis Jijón- no sólo no ha sido castigado por su padre ni por su madre sino que le han regalado una moto de lujo del último modelo del mercado). Ver para creer pero creánlo porque fue verdad.
 
El caso es que voy a comenzar a explicar un tema de Literatura Universal porque da la casualidad de que estoy impartiendo la enseñanza de Literatura Universal y el tema está incluido en el Programa Escolar de Literatura Universal. Antes de que comience con mi clase magistral uno de los más chulos del Colegio El Sauce (que como ya se habrán dado cuenta es privado y exclusivo para "hijos de papá" y "niñas pijas"), de cuyo apellido prefiero no acordarme porque todos ellos son parecidos, pide la palabra y me dice lo siguiente, en voz alta quizás para quedar como un héroe delante de las chavalas porque cree que así va a ligar con todas ellas cuando bien visto es más feo que un mono catarrino con catarro y tiene menos personalidad que una pulga en medio del desierto de Atacama.
 
- ¡Profesor, ¿por qué nos tiene que explicar las literaturas vanguardistas del siglo XX y no nos explica, por ejemplo, la vida de los cangrejos?
 
Ante el silencio de toda la clase yo aplico una frase de mi propia cosecha que dice así: "hoy guardo silencio para aprender pero mañana voy a hablar para contar lo que hoy he aprendido". Así que me dispongo a dar la clase magistral y le contesto con lo siguiente.
 
- Sólo eres un niñato imberbe de 18 años de edad pero cuando madures y consigas ser un hombre (si es que lo consigues alguna vez) te haré yo también a ti una pregunta tan interesante como crees que es la tuya y ahora voy a impartir el conocimiento de las literaturas vanguardistas de la Literatura del Siglo XX porque da la casualidad de que soy profesor de Literatura Unviersal; así que si no estás de acuerdo puedes salir del aula e ir a la Dirección del Colegio para decirles que yo estoy explicando las literaturas vanguardistas de la Literatura del Siglo XX en la asignatura de Literatura Universal en lugar de explicar la vida de los cangrejos. ¿Me has comprendido bien o tienes otra pregunta que hacerme?
 
El imberbe de 18 años de edad se quedó completamente con la boca abierta por unos segundos y sin saber qué responderme, después la cerró del todo cuando se dio cuenta de que había hecho el ridículo más espantoso delante de todas las chavalas del aula y no se atrevió a salir del aula para hacer lo que yo le había propuesto que hiciera para que demostrara que era lo suficientemente hombre como para hacerlo. Guardó silencio absoluto mientras yo estuve impartiendo una de mis clases magistrales.
 
Han pasado los años y supongo que ya será un hombre maduro (lo cual hasta se puede incluso seguir dudando) y le voy a hacer la pregunta que tengo preparada desde aquel Curso Escolar 2000-2001.
 
- Estimado hombrecito "hijo de papá" y tal vez gerente de alguna de las empresas de tu millonario padre o tu millonaria madre sin tener ni puñetera idea de lo que es ser de verdad un gerente: con el mismo derecho (que ampara la Democracia) con que tú me preguntaste, en la clase de Literatura Universal, que por qué os expliqué lo que son las literaturas vanguardistas del siglo XX en lugar de explicarlos la vida de los cangrejos, yo te hago a ti, ahora que ya quizás lo puedas comprender porque quizás ya hayas conseguido ser un hombre aunque queden todavía dudas razonables, te voy a preguntar lo siguiente: ¿por qué en lugar de perder el tiempo en el Colegio Sauce no te dio por ganar el tiempo cuidando cabras en el monte?. Y para que razones lo suficiente, si es que has aprendido a razonar con lógica para no volver a hacer el ridículo ante las mujeres, ¿tú crees que los niños pobres que no tienen más posibilidad que ir a estudiar a colegios públicos porque sus padres y sus madres no tienen suficiente dinero para ponerlos a estudiar en colegios como El Sauce, poseen la misma libertad que tú para hacer preguntas tan gilipollescas como las tuyas o crees que si las hacen, además de ser castigados, son expulsados del colegio?
 
Supongo que quizás se haya puesto rojo de vergüenza cuando alguien le diga lo que le he contestado ahora que ha pasado el tiempo y podemos hablar de hombre a hombre si es que él ha logrado ser ya un hombre. Y es que hay cuestiones, para entendernos todos bien, que son sí porque sí o son no porque no sin ninguna posibilidad de duda. 
 
Nota.- Cierto "cabroncete" antiespañol (de cabeza calavérica) que, autoproclamándose profesor de Historia, se pasaba todo el curso diciendo a los alumnos y alumnas que los españoles que habían descubierto América se cagaban de miedo ante los ingleses cuando la Historia verdadera dice todo lo contrario, no daba por supuesto ninguna clase de Historia en la asignatura que se llamaba precisamente Historia sino que "atiborraba" las mentes de los alumnos y alumnas (como le escuché yo más de una vez sin que él se diera cuenta) con ideologías políticas revolucionarias porque en lugar de explicar la Historia (ya que era Historia lo que pedía el pensum de estudios y no Política que quedaba reservada para quienes eligieran esta carrera universitaria) les "empollaba" en ideologías políticas; por eso ninguno de sus alumnos y sus alumnas sabía nada de Carlomagno y los carolingios, no sabían nada de la Guerra de los 100 Años ni sabían nada -por citar sólo tres ejemplos de los miles de ejemplos que sí son de Historia- de las culturas precolombinas. Lo único que sabían era de ideologías políticas revolucionarias aun estando solamente en la edad de los adolescentes. El "cabroncete" antiespañol que se hacía pasar por profesor de Historia era, en verdad, todo un cabrón alienando a los alumnos y alumnas de edades adolescentes con ideologías políticas en lugar de explicarles los temas de Historia; lo cual es todavía mucho más vergonzoso.