Terror en Molina Park (Relato) -Tercera Parte-
Publicado en Nov 09, 2016
- ¡Observe esos huesos y esas cenizas! ¡Es lo que queda de Alfonso y José Luis!
- ¡No permita que nadie los toque ni los manipule! ¡Tenemos que esperar a la llegada de los expertos para que analicen todos esos restos! -Teniente Otero... son los huesos y las cenizas de esos dos pobres desgraciados... lo afirmo y lo reafirmo... - ¿Algo más, sargento Camello? - ¡Venga conmigo! ¡Tiene que ver algo espantoso! El sargento Camello guió al teniente Otero hasta el abeto de donde colgaba, de una de suis ramas, el perro ahorcado después de haber sido martirizado por algún demente. - ¿Quién ha cometido esta salvajada? - Un carnicero que, mañana por la mañana y olvidándose del perro. se transformará en muy florentino y le regalará, como villano, un crisantemo azul a su querida esposa. - Bien, sargento. Dejemos ya todo esto que forma parte de la realidad humana y vuelva a Bombay a tomar esa copa que esta necesitando. - ¡¡¡Gracias, teniente Otero!!! ¡¡¡Usted sí que sabe comprender!!! El sargento se alejó a toda velocidad... - ¡¡¡Pero no caiga en ningún error, Camello!!! - ¡¡¡No caeré en ningún error, Gran Capitán!!! Cuiando el sargento Camello entró en el bar cafetería y el teniente Otero le perdió de vista, éste se dirigió a todos los reunidos alrededor de él. ¿Alguien puede darme más datos sobre lo sucedido con los alienígenas? Todos los presentes comenzaron a hablar al mismo tiempo. Nadie podía entender nada y nadie entendía a los demás. Era la ceremonia de la confusión. - ¡¡¡Un momento!!! ¡¡¡Silencio!!! ¡¡¡Es suficiente con una sola persona que haya visto todo!!! Dolores Paz, sin soltar la mano de su hija Blanquita, se acercó al teniente Otero... - Yo lo vi todo, capitán. - De acuerdo... usted me puede servir... pero no soy capitán de momento sino que todavía soy un teniente nada más... - Yo no sé distinguir las estrellas de los rangos militares; pero para mí quien es capaz de enfrentarse a cualquier peligro con la misma serenidad y la misma fe con que se enfrenta usted, es todo un capitán y, además, de los más grandes. - Está bien. Llámeme capitán si así lo desea. - Puedo contarle todo lo sucedido con toda clase de detalles. Hasta lo del cuervo. - ¿Qué es lo del cuervo? - Algo que no le han contado todavía. Por eso digo que puedo contarle todo lo sudedido con todaclase de detalles. - ¿Cómo se llama usted? - Dolores Paz y mi hija es Blanca. - ¡Los demás pueden irse a sus casas a descansar o a pasear por otros lugares de la ciudad. Dejen que los policías y los militares trabajen tranquilamente hasta que consigamos solucionar este misterio. Durante una media hora completa, el teniente Otero dejó que Dolores Paz, sin soltar nunca la mano de su pequeña niña, hablase sin ninguna clase de interrupción. Y memorizó todos los detalles. - Ya tengo los suficientes datos e informaciones como para escribir no uno sino hastados informes completísimos y ampísimos como me ha ordenado el capitán González. ¡Gracias por su ayuda, Dolores Paz! - Capitán... puedo hablar con usted a solas... - No me llamen ni capitán ni teniente. Llameme simplemente Otero. - Puedo hablar con usted a solas, Otero? - ¿Es que todavía queda algo importante que saber de todo este asunto? - Eso es. Quiero contárselo a usted pero no quiero que los demás se enteren. - ¿Usted bebe alcohol? - ¡Ni una sola gota! - ¿Qué le parece si nos bebemos un par de zumos de naranja en El Cole? Invito yo. - Lo que usted quiera; pero no puedo dejar sola a mi Blanquita. - Que venga con nosotros. Siempre llevo caramelos en mis bolsillos. Y mientras ella y él comenzaron a caminar hacia El Cole. el teniente Otero sacó un pequeño puñado de caramelos y se los regaló a Blanquita. Al llegar a su destino y, sentados uno en frente del otro, con la niña en medio, una vez quwe fueron servidos, por un camarero elegantemente vestido, los dos zumos de naranja. se inició la charla. - ¿Está usted casada, Dolores? - Si yo le tuteo prefiero que usted me tutee a mí. Creo que es lo justo según la equidad de género. - ¿Estás casada, Dolores? - Sí y no. -¡Ostras! ¿Otro asunto misterioso esta noche? - Esto casada pero mi esposo duerme con muchas mujeres aunque nunca conmigo. - ¿Me estás diciendo que una dama tan bella como tú duerme siempre sola mientras él lo hace con brujas viejas, feas y desdentadas, y además pagando dinero? ¡¡¡Eso es ser totalmente imbécil!!! - Es que mi esposo es totalmente imbécil. - ¿Y por qué no te divorcias y buscas a otro que sea inteligente? - ¡Por miedo! ¡¡Tengo miedo, Otero!! ¡¡¡Necesitamos tu protección!!! - ¿Me puedes decir cómo se llama ese gilipollas? - Primitivo Atilano Basilisco. - ¿Dónde puedo encontrarlo? - Por Lemom pasa todas las noches porque allí se cita con un marroquí llamado Abdalá El Jalifa, que dicho sea de paso es un musulmán fundamentalista tan gilipollas como él. ¡Pero no te vayas ahora! ¡¡No nos dejes solas!! ¡¡¡Necesitamos tu protección!!! - Te juro, por la Santa Biblia cristiana, que os protegerá a ti y a tu preciosa hija. Cuenta, Dolores, cuenta porque yo os acabo de jurar por lo más sagrado que creo que os voy a proteger hasta que se acabe vuestra pesadilla para siempre. Y siempre cumplo lo que juro. - No sé por dónde empezar... - ¿Es lo que estoy pensando? -¡Exacto! ¡Me pega palizas enormes todas las noches quellega compeltamente borracho! ¡Puedo enseñarte mi cuerpo! - No es necesario. Sé que eres sincera. - ¿Cómo sabes que soy sincera? El teniente Otero se dio cuenta de que tenía que terminar de darle la tranquilidad y eviatsr que siguiese tan nerviosa. -La sinceridad siempre empieza por la s de silencio, sigue por la i de inmediatez, continúa con la n de naturalidad, pasa por la c de conocimiento, atraviesa la e de experiencia, sigue con la r de razonamiento, continúa por la i de inteligencia, después de pasar por la de d de deducción pasa por la a de autenticidad y desemboca en la D de Dios. Todo eso veo en ti. Y te puedo añadir que la sinceridad es ese momento que todos nos encontramos alguna vez en la vida y entonces sabemos la verdad de nosotros mismos. - ¡Caramba, Otero! ¡Ya sabía yo de tu valía como militar pero ahora resulta que eres también un profundo filósofo! - Resulta que me gusta dejar huella por donde paso, Dolores. Porque las huellas de nuestra personalidad son sinceras cuando se pueden grabar en las memorias ajenas y nos asignan un lugar que los demas siempre recuerdan. Son las huellas que nunca se olvidan porque jamás traicionan a nadie. - ¿Algo así como una esposa siempre fiel? - Algo así como una esposa eternamente fiel. - ¿Cómo sabes tantas cosas de las mujeres y la vida? - Escucha, Dolores. Hablemos sinceramente. Es en esas horas de nuestras sinceridades en donde nos miramos a los espejos íntimos de nuestro ser y cuando decidimos qué es lo mejor y qué es lo peor que tiene la vida. A lo mejor, y es un pensamiento mío, ¿será que la vida no empieza nunca ni termina nunca en donde muchos falsamente creen sino que no posee limtiaciones conocidas? Cuando estamos limitados por culpa de los vicios estamos viviendo solamente soledades mortales pero no verdaderas existencias eternas. Con todo esto te quiero decir que estamos viviendo cuando amanecemos de nuevo, Soledad Paz, cuando nacemos de nuevo dejando la soledad en el olvido y quedándonos con la paz de nuestros espíritus. ¿Me estás comprendiendo? - Amanecer y nacer de nuevo? ¡Nadie puede hacer eso! - ¿Sabes lo que es amar de verdad? -Supongo que sí... - Pues amanecer de nuevo es salir de ese espacio de la nada para introducirse en un espacio de todo. ¿Me estás comprendiendo ahora? En cuanto a los hombres de verdad siempre se mantienen siendo hombres de verdad. No son apariencias como tanto abunda hoy en día. ¿Es cierto o me estoy equivocando? - Es cierto que sí... que los hombres de verdad se mantienen siempre como hombres de verdad... - Pues entonces debes saber que los seres humanos son siempre más humanos cuando se llenan de silencio y liberación, porque se mantienen como Dios manda y usan el lenguaje de la verdadera sinceridad cuando dialogan en nuestro entorno propio y personal. Silencio cuando queremos escuchar los pálpitos ajenos. De tal manera que muchas meditaciones nos sumergen en el infinito de los sueños encendidos en nuestros espíritus humanos en nombre de Dios. Conversamos con nosotros mismso hasta envolvernos con la presencia de los sentimientos. Con la sinceridad y la liberación por banderas, compartiendo con los demás los espacios en donde crecemos como hombres y mujeres sencillamente sanos y sanas. - ¡¡No he escuchado nunca jamás tanta inteligencia en un solo filósofo de los muchos que he estudiado!! - Dejemos entonces la filosofía y háblame de él. ¿Dónde y cómo lo conociste? - Lo conocí en un guateque de amistades. Él había acabado de sufrir un desengaño amoroso. Supe que ya bebía y se drogaba muchas veces para intentar olvidar... pero me casé con él... - Lo hacéis muchas mujeres y nunca lo he podido comprender... - Me daba pena... - ¿Y las mujeres no sabéis que la pena no es el amor? La pena es un momento instantáneo, pero el amor es un sentimiento continuo. Si yo me hubiera tenido que casar con todas las mujeres que me han dado pena a estas alturas de mi vida, y a pesar de mi juventud, ya sería un completo polígamo con más de doscientas esposas. - Este hombre me gusta, mamá. - ¡Pero Blanquita! ¡Perdónala, Otero! ¡Sólo es una niña! - No te preocupes por eso. Lo entiendo. - ¿Tú eres casado? - Espero serlo algún siglo de estos. - ¿Y cuándo vas a decidirlo? - Cuando quiera la única novia que he tenido y tengo en la vida. - ¿Estás bromeando? - No sé lo que diréis las mujeres guapas... pero es cierto... - ¿Cómo se llama la afortunada? - Ester. - ¿Como la que sale en la Santa Biblia cristiana? - ¡Exacto! Y ahora, además de pegarte palizas, dime qué hace el bestia de tu esposo. - ¡Tengo miedo! - ¿Por qué tienes miedo? - Porque me amenaza con matar a mi propia hija si cuento lo que hace... - He jurado protegerte a ti y a ella y os voy a proteger hasta el final. - Primitivo no es el padre de Blanquita. - Entonces se trata de un padrastro... - Eso es. ¡Un padrastro que odia a mi pequeña bebé! - ¿Puedo saber quién es el padre de esta criatura? - Un italiano llamado Giuseppe Orneto. - ¿Fue el sueño de una noche de verano como escribió William Shakespeare? - Yo le amaba de verdad. - ¿Y por qué no está contigo? - Fui tonta. No me decidí irme a vivir con él. - ¿Dónde vive? - En Venecia. - ¿Y preferiste quedarte aquí para casarte con ese mierda de Primitivo? - Ahora sé que fue una equivocación fatal. - Yo también me equivoco algunas veces pero no hasta ese extremo. ¿Qué está pasando en el mundo actual? ¿Cómo puede ser que triunfen con las mujeres esos tiparracos como el tal Primitivo Atilano Basilisco que estoy seguro de que no tiene ni terminados los estudios de primaria? - ¿Es verdad que nos vas a proteger? - ¡Te juro por la Santa Biblia cristiana que no volverás a verle la cara nunca más ni en este mundo ni en el otro! Dolores Paz quedó convencida de que el teniente Oritz estaba diciendo la verdad y se sintió protegida y, al sentirse protegida, se lo contó. - ¡Él es el que, junto con el marroquí Abdalá "El Jofaina", ahorcan a los animales después dehaberlos martirizado! - ¿El carnicero que, por las mañanas, se vuelve de repente muy florentino? - ¡Él es el que me regala, todas las mañanas, crisantemo azul y por las noches me pelga unas palizas brutales! - ¿De verdad que es carnicero? - Sí. Trabaja como empleado en una carnicería. - Entonces estamos ante un caso de doble personalidad productos de los efectos del alcohol y las drogas. Algo así como El Doctor Jekyll y Míster Hyde con algo de Jack El Destripador. - Da miedo pensarlo... pero es verdad... - ¿Quieres otro zumos de naranaja? - ¿Puede ser una taza de tila? Todavía estoy bastante nerviosa. - Puede ser. El teniente Otero pidió la taza de tila y los dos volvieron a guardar silencio hasta que el elegante camarero sirvió lo pedido y se alejó. - ¿Y ahora qué va a ser de mí, Otero? - Espera un momento. Tengo que hacer una llamada urgente. El teniente Otero sacó su móvil del bolsillo derecho de su chaqueta del uniforme militar y marcó el número del móvil del capitán González. - ¿Quién es el besugo que me molesta cuando voy a comenzar a cenar? - ¡Yo soy el besugo capitán González y, hablando de besugos, ¿qué tal su merluza? - Pero... ¿cómo diantres sabes que estoy con una merluza?... - No soy un adivino, capitán, sino simplemento una intuición creada gracias a una ilación de ideas. Cuando usted está muy nervios ante un caso difícil solucionar le da por comer pescado y, al llamarme a mí besugo, pues he pensado que usted tenía cogida una merluza. - ¡¡¡Jajajajaja!!! ¡¡¡Ostras!!! ¿Es que tienes algo urgente que comunicarme? - ¡¡¡Atrapen esta misma noche a un tal Primitivo Atilano Basilisco, conocido en el mundo del hampa como "El Carnicero" y a un marroquí llamado Abdalá y conocido en el mundo del hampa como "El Jofaina"!!! - ¿Tienes algo contra ellos? - ¡Tengo tantas cosas contra ellos que son para que se pasen todo el resto de sus asquerosas vidas en la cárcel hasta que se mueran podridos dentro de ella! - ¿Cadena perpetua? - Sí. Cadena perpetua pero de las de verdad. No debemos dejar que salgan de la cárcel nunca jamás en sus miserables vidas y cuando digo nunca jamás he dicho nunca jamás. ¿Me está entendiendo? - ¡Sí! ¡Vamos a tener que peinar toda la ciudad para poder encontrarlos! - ¡Pues peinen usted a todos los que haya que peinar a ver si se quedan guapos de verdad pero a esos dos tiparracos hay que atrapàrlos esta misma noche! - ¡De acuerdo! ¡Peinaremos a todos los que veamos que tienen que ser peinado para que se queden guapos! Pero... ¿tienes tú por casualidad alguna pista que nos puedas dar para saber por dónde tenemos que empezar a peinar?... - Sí. Comiencen por Lemom, que es donde todas las noches se citan esta pareja de maricones antes de salir en busca de prostitutas con quienes tener relaciones que ellos llaman sexuales a pesar de lo maricones que son antes de salir de cacería de animales inofensivos a quienes martiriza mientras se descojonan de risa como producto del alcohol y de las drogas y a los que ahorca o a veces los queman vivos, incluyendo a algún ser humano que otro de vez en cuando. ¿Qué le parece el cuadro? - ¡¡¡Ostras!!! Parece como si me estuvieras detallando "El jardín de las delicias" de El Bosco... - Debe ser lo más parecido... - ¡¡¡Eso es muy fuerte!!! - ¡Le he jurado por la Santa Biblia cristiana, en la que firmemente creo por encima de cualquier otro libro, a una bella dama que voy a protegerla a ella y a su pequeña bebé! ¡¡No las decepcione usted, capitán González!! - ¡¡¡Ahora mismo salimos todos para Lemom!!! Ambos cortaron la comunicación... - Si Dios quiere este asunto ya está a punto de solucionarse, Dolores. - ¿Y dónde vamos a ir ahora nosotras dos? - Espera otro momento. Tengo que hacer otra llamada urgente. El teniente Otero marcó ahora el número del móvil de su novia Ester. - ¡Hola, sinvergüenza! ¿Puedo saber por qué no has cumplido con tu promesa de invitarme a cenar esta nocje para festejar el primer cumpleaños de "Toby"? ¡Menudo disgusto tiene él! - ¡No he dejado de pensar durante todo el día en "Toby" y no he dejado de pensar durante todo el día en tí, Princesa; pero me ha surgido un problema urgente y lo estoy todavía solucionando! - ¿Has ligado con alguna sueca? - No. Eso sólo lo consigue un filósofo equinoccial, siempre con mucha hambre por cierto, llamado Agustín Hipo "El Roñero". ¿Recuerdas a Agustín Hipo "El Roñero"? Era muchísimo más feo que yo pero liga suecas a puñados y si parar de tirárselas ni un solo segundo. ¿Tú crees que sufre de algua obsesión enfermiza o es que ha visto muchas películas de triple equis y se cree que esa es su realidad? - ¡¡¡Jajajajaja!!! ¿Te refieres al que se conformaba con las que los demás no queríais? - ¡¡¡Jajajajaja!!! ¡Sí, Ester! ¡Yo nunca he tenido tanta suerte con las españolas como él con las suecas pero es que para ligar con focas prefiero irme a la Antártida! - ¡¡¡Jajajajaja!!! - No te rías tanto, Ester, a ver si se va a enterar y nos va a llama "gameloides" que me parece que es una de esas palabras que él se inventa diciendo que son geniales. Recuerda que "El Roñero" es muy flamenco con las mujeres que suspiran por sus pensamientos y le adoran aunque tengan tan mal gusto. Yo no soy como él, que aprovecha todo lo que los demás desparovechan porque no les gustan a nadie, y por eso a lo mejos me quedo sin mojar nada toda mi vida y me tengo que meter a fraiñe cartujano pero espero que tú no me dejes por no ser tan sabio como "El Roñero" que tiene un diploma de una tal Academia Salomón para Maestros Masones con cuyas dos primeras sílabasse forman la palabra Mama que quiere decir, quizás, que tienene el Complejo de Édipo y pro eso ligan con viejas de las edades de sus madres para desahogar dichos complejos. - ¡¡¡Jajajajaja!!! Tú no necesitas ser muy flamenco para conquistar a una mujer que tenga buen criterio como yo. Y si me entero algna vez que tienes tan mal gusto como ese tal "Roñero". te quedas soltero para toda tu vida. - Ya... pero resulta que también he aprendido bastante del flamenco gracias a Maolete... - Pero si Manolete murió mucho antes de que tú nacieras... - No confundamos la velocidad con elm tocino. Yo me estoy refiriendo a Manolo de Alfonso XII que luego se piró para Vélez Málaga porque con las madrileñas fracasó por completo. - ¡Deja ya de contarme historias que yo sé que son ciertas pero ahora no me interesan conocerlas con tantos detallñes. ¡Eres genial para contar cuentos de bandoleros con trabucos! ¿Cuál es el verdadero problema de esta noche? - ¡Princesa! Estoy hablandon con una mujer que sufre de violencia de género! ¡El bestia de su marido que se gasta todo el sueldo de carnicero en alcohol, drogas y prostitutas, la pega palizas casi toda las noches porque odia a la niña que no es hija suya y amenaza con matar a la niña si cuenta lo que scucede; pero ella ha sido valiente y lo ha contado, Yo he prometido protegerla hasta que metan al cabrón de su esposo en la cárcel para toda su vda; pero ahora necesita vivir en alguna casa donde no sea descubierta hasta que hayamos resuelto el problema. ¿Puedes dejar que ella y su pequeña bebé vivan contigo por un poco tiempo hasta que lo resolvamos? - ¡Ya sabes que en cuestiones de defender a las mujeres que sufren violencia de género pueden siempre contar conmigo! ¡Precisamente tengo ahora dos habitaciones completamente libres! Dile que pueden venir a vivir conmigo por el tiempo que sea necesario. - ¿Sabes que te quiero? - ¿Sabes que yo te amo a ti? - ¿Entonces es que sí? - Yate lo he dicho antes, dile que vengan y a ti te doy las gracias por todo lo que estás haciendo. Los dos cortaron la comunicación al mismo tiempo. - ¡Vámonos a casa, Dolores! - ¿Eso quiere decir que tu Ester ha aceptado que vivamos con ella? - Sin problemas. Además, Blanquita podrá pasarlo bomba jugando con "Toby". - ¿Cómo es "Toby"? - ¡El perrito más bohemio que te puedes imaginar! De repene sonó el móvil del teniente Otero. - ¡Hola, capitán González! ¿En qué lío me quiere meter ahora? - ¡¡¡Otero!!! ¡¡¡No estoy para bromas!!! ¡¡¡Acabamos de atrapar al Basilisco y al marroquí Jofaina!!! - Ya decía mi abuela que todo lo que vuela termina en la cazuela. - ¡¡¡Jajajajaja!!! ¡Tengo que darte las gracias por tu excelente ayuda! ¡Gracias a ti los hemos podido atrapar este misma noche porque, en efecto, estaban citados en Lemom! ¿Cómo quieres que te recompense? - ¿Recuerda lo de Bora Bora, capitán González? - ¡¡No admito ninguna clase de chantajes, pero por esta vez voy a hacer una excepción porque tú te lo mereces!! ¡¡Tienes completamente gratis los dos billetes para Bora Bora pero tiene que ser para el mes que viene!! ¡¡Con todos los gastos pagados por una sola semana!! ¡¡Y te recuerdo que es sólo por una sola semana!! - ¡Gracias, capitán Gonzáles! ¡Eso suponen un total de 420 horas de diversión contínua para Ester y para mi! - ¡Pero solamente una semana, Otero! ¡No lo olvides porque no quiero que se me desequilibre el presupuesto! - ¡Es usted igual que mi padre! ¡Muy generoso pero muy disciplinado! ¡De seguir así así puede usted llegar a ser incluso un general de división! ¡Gracias por tan bello gesto dingo de que se publique en "El Caso"... perdone... es la emoción... quise decir en "El Mundo"... - ¡Deja ya de darme coba! Tienes el viaje para el mes que viene pero esta misma noche, antes de que llegue el alba, te recuerdo que sobre mi mesa escritorio tiene que estar un informe amplísimo y con toda clase de detalles sobre lo sucedido en Molina Park! El capitán González cortó la comunicación y Dolores intentó ya levantarse de su silla. - ¡Espera un momento, Dolores! ¡Tengo que hacer otra llamada urgente! - ¿Es que todas tus llamadas son urgentes, Otero? - Va a ser que sí. Todas mis llamadas son urgentes. ¿Quién te lo ha contado? - Yo misma me lo estoy suponiendo. Un hombre con tanta personalidad sólo puede recibir y enviar llamadas urgentes. ¿Es eso lo que llamna el feedback? El teniente Otero volvió a sonreír mientras volvía a marcar el número del móvil de su novia Ester. - ¿A quién tengo que dar ahora acogida, Otero? - ¡Princesa! ¡Olvídate por un momento de las acogidas! ¡Acabo de conseguir un viaje gratis a Bora Bora, para dos personas y por una semana entera! ¿Quieres ser tú mi compañera? - ¿Estás más loco que nunca? ¿Te has parado a pensar en lo que cuesta un billete de avión para Bora Bora? - ¡También me regalan los dos billetes y además de ida y vuelta! - ¿A quién has engañado ahora? - Al capitán González... esto... no no no... es que me ha dado un premio... - ¿El capitán González te ha dado un premio a ti? - A pesar de lo duro que es el capitán González también tiene un buen corazón y sí... efectivamente... me acaba de regalar ese viaje a Bora Bora por haber soluciona un problema más raro que un perro verde... así que prepara ya las maletas porque nos vamos para Bora Bora el mes que viene... pero... a cambio de eso tienes que ayudarme a redactar un amplísimo y completísimo informe, con toda clase de detalles, que tengo que dejar en la mesa escritorio de González antes de que llegue el alba. ¿Me vas a ayudar? - ¡Sí! ¡De acuerdo! ¡Te voy a ayudar en la redacción! ¡Esta noche, mientras estemos cenando los cuatro, me cuentas todo! - ¡¡Okey, Princesa!! Una vez cortada de nuevo la comunciación entre los dos, Otero volvió a la charla con Dolores. - ¿Nos vamos ya? - ¿Es que han atrapado al carnicero? - ¡Hemos atrapado al carnicero y hemos atrapado al marroquí. - ¿Eso quiere decir que han caído el Basilisco y el Jofaina. - ¡Eso es! ¡Me estoy refiriendo a que dejes de tener miedo porque nunca jamás les verás las caras ni en este mundo ni en el otro! Resonaron, en ese momento, dos espeluznantes aullidos. - ¡¡¡Auuuuuuuuuu!!! ¡¡¡Auuuuuuuuuu!!! - ¡¡¡No!!! ¡¡¡Otra vez no, Dios mío!!! - ¿Qué te ocurre ahora, Dolores? - ¡¡¡Son "Dix" y "Pix"!!! ¡¡¡Otra vez nos atacan los extraterrestres!!! - ¿Quieres decir los alienígenas? - ¡¡¡Otero!!! ¡¡¡Otra vez nos atacan los alienígenas!!! - Te equivocas, Dolores. Estos son aullidos diferentes. Solamente son dos lobos esteparios. - ¡¡Son "Dix" y "Pix"" y estamos perdidos!!! - Cálmate ya, Dolores. Te repito y te afirmo que esto son aullidos diferentes. Son el lobo Amerok y su pareja la loba Kaila. Reconzoco muy bien su lenguaje. - ¿Cómo puedes saber eso, Otero? - Porque hace algunos años tuve la ocasión de vivir con ellos por una larga temporada. - ¿Me juras que no son "Dix" y "Pix"? - ¡Te juro que son Amerok y Kaila! - ¿Enntonces por qué lanzan esos aullidos tan atroces? - Porque se están enamorando. FIN
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Jos Orero De Julin