44.- San Agustín y el tanga de Pinocho.
 
Desnudo quisiera estar. Desnudo por fuera y dentro. Desnudo quisera estar. Desnudo como al naciendo para seguir este amar hacia ti siempre queriendo. Y es que cuando nombro tu nombre un pedazo de cielo se me viene encima en forma de paloma azul. Cuando nombro tu nombre el horizonte lejano se me acerca tanto que puedo tocarlo, sentirlo, palparlo y hasta besarlo. Cuando nombro tu nombre te encuentro siempre tan dentro de mi que es totalmente imposible sacarte al exterior y entonces imagino tu extrema belleza, y tus frescos labios, y ese tictac de tu corazón golpeándome en las sienes levemente para decirme que me quieres. Y entonces es cuando más te amo, amor, cuando más te siento, cuando más te llevo a la vida de los sueños. Y cuando más, en fin, sé que estoy feliz... y entonces el infinito, el verdadero infinito no farsante sino real, se me convierte en una eternidad llena de tan profundos sentimientos que yo también me introduzco tan dentro de ti que ya no somos visibles ni vivibles en este mundo. Porque estamos habitando en las magias de los sentidios.  Desnudo y con sentimientos porque cuanto más intenten hacer callar nuestras voces más se lo gritarán las piedras de los caminos... hasta que les duela la conciencia... por eso no callo amor... por eso no callo y hablo en voz audible para que no sigan ocultando sus mentiras... más alto he de hablar, amor, más alto he de hablar aunque me llamen loco de amor. Y si intentan evitarlo las piedras de los caminos lo gritarán a plena luz del día y de la noche... hasta que le duela la conciencia.
 
A De2 se le hacen los dedos huéspedes cuando ve a la Tele5 desnudarse poco a poco antes de irse a dormir; pero Ca3 también bebe los vientos por ella y ya prepara su catre para ver si la Tele5 cae en sus redes. Sin embargo, la Tele5 les tiene muy tomadas las medidas a De2 y a Ca3 y no hace sino calentarles los sesos y los sexos a lo Ana Obregón pero no pasa de ahí. Y claro, De2 y Ca3 tienen que autosatisfacerse todas las noches. Mas quien no quiere sufrir sofocos por culpa de la Tele5 es 100Pies.
 
100Pies, cuando la Tele5 empieza a desnudarse, siempre se dice a sí mismo eso de pies para que os quiero, pone luego los pies en polvorosa y sale zumbando a darse una vuelta por las calles del pueblo.
 
A todo esto, quien de verdad disimula su admiración por la Tele5 es el mismísimo Gran Hermano de la Comuna, un tal Pin8 que miente más que un cosaco narrando cuentos del Volga cuando le preguntan por ella. No está dispuesto Pin8 (hábil como pocos a la hora de disimular) a reconocer su ansia de dormir con la Tele5 encendida a tope... y para no caer en las redes de las pasapalabras de la Tele5 le dice, a ella, que es un bíólogo entomólogo que está allí sólo para estudiar a los grillitos y así conocer su propia conciencia. pero la Tele5, erre que erre con su mirada crítica, está dispuesta a hacerle caer a Pin8 en su oferta de que aquí hay tomate si él lo desea.
 
- Oye, Pinocho, ¿100Pies es homosexual?
- No, Tele5, 100Pies es sólo misógino.
- !Anda ya, Pin8, 100Pies es marica!.
- Que te equivocas, Tele5, que te repito que 100Pies es sólo misógino
- Pero eso ¿qué es?. No lo entiendo...
- Pues que 100Pies es un hombre que odia a las mujeres y no quiere trato con ellas porque se siente un ser inferior ante el sexo opuesto.
 
Entonces es cuando Chiquili4 quiere introducirse en la conversación para poder sacar tajada... pero la Tele5 le para en seco...
 
- No, zascandil, mequetrefe... tú no estás todavía preparado para estas cosas.
 
De2 y Ca3 están descubriendo la táctica preparada por el Gran Hermano Pin8.
 
- El Gran Hermano sigue mintiendo más que un cosaco narrando cuentos del Volga.
- ¿Por qué hace eso?
- Poque no quiere que se le vea el plumero. Desea ligar a la Tele5 sin que nosotros nos demos cuenta.
 
Ca3 se enfurece. Ca3 sigue esperando llevarse a su catre a la Tele5.
 
- Pero ¿cómo vas a ligar con la Tele5 si tu catre es tan estrecho que sólo cabe una persona dentro de él?.
 
Mientras tanto la Tele5 sigue tratando "a lo Ana Obregón" con el hipócrita Pin8.
 
- Mira Pin8, yo no me creo que tús seas ni biólogo ni entomólogo sino más bien enólogo.
- A mí no me gusta el vino, Tele5.
- Pues tu roja nariz, que se agranda cada vez que mientes, me demuestra que vienes todas las noches muy cargadito desde la bodeguilla.
 
Aparece de nuevo Chiquili4
 
- Esto parecen ya escenas de matrimonio. ¿Boda a la vista? 
- Te repito, zascandil, mequetrefe, que tú no estás preparado para estas cosas.
- Por mí no te cortes el fluido Tele5, hazte a la idea de que yo soy Bea.
- !Anda, vete a dar una vuelta con 100Pies!
 
Pero 100Pies ya está muy lejos de allí, perdido entre la dulce clara luna y buscando hormigas blancas para ir a decirle a Pin8 que el verdadero entomólogo de la Comuna es él y no el falso Gran Hermano.
 
- !La culpa de todo la tiene esa lagarta desvergonzada de la Tele5! -chilla a todo quien la quiere oir la más puritana del pueblo, la Viuda de 3Illo que, eso sí, siempre está aleccionada por el cura párroco Ron0 quien, aparte de gustarle el ron y llevar el corte de pelo al cero oculta a todas sus vetustas feligresas que sus ojos se vuelven miel cuando ve a la Tele5 pasear todas las tardes con su minifalda roja (la pollera colorá cantan los parrioquianos) por la alameda de los olivos verdes...
 
Y así están las cosas en la Comuna de Pin8. Este, el Gran hermano farsario, enamorado perdidamente de la Tele5 pero haciéndose el duro y el impasible pasando por biólogo entomólogo estudiante de grillitos... mientras De2 (que se le hacen los dedos huéspedes cuando ve desnudarse a la Tele5 antes de ir a dormir) y Ca3 (que se le hace la boca agua cuando la ve hacer lo mismo) buscan la manera de meterla mano (en el caso de De2) o llevársela al catre (en caso de Ca3). Por su lado, 100Pies sigue huyendo de la Tele5 porque la odia y teme su mirada crítica o que tenga una noche de suerte con ella. Y Chiquili4 siempre intentando meter baza en las conversaciones entre la Tele5 y Pin8 para ver si puede mojar...
 
- !La culpa la tiene esa lagarta desvergonzada de la Tele5 por venirse a vivir con 5 hippys sin ninguna clase de principios morales! -sigue chillando a todo el que la quiere oir la Viuda de 3Illo siempre aleccionada por el cura párroco Ron0 que gusta del ron y del pelo rapado al cero...
 
En los últimos días han cambiado mucho las cosas en la Comuna del Gran Hermano Pin8. Así, por ejemplo, tenemos que, en primer lugar, De2 y Ca3, cansados ya de ser juguetes en manos de los caprichos eróticos de la pérfida Tele5 abandonaron la comuna y ahora descansan plácidamente en sus respectivos hogares familiares, consolándose con tragos de cerveza ligth mientras Ana Rosa (novia de ambos a la vez) les va preparando el programa respectivo a cada uno de ellos.
 
En segundo lugar, 100Pies, una vez abandonada la Gran Casa por parte de De2 y Ca3 y perdida la abrumadora tensión que estos ejercían sobre su estado de ánimo se ha animado demasiado y ha comenzado, abandonando su anterior misoginia, a tener relaciones sexuales con la Tele5 comenzando a vivir así una historia en común.
 
- Está pasando... está pasando... - no hace más que repetirse continuamente el desesperado Pin8 a quien se le ha ido la mano en eso de su postura de tipo duro (que ya no se lleva debieron haberle advertido antes) con la Tele5 y ésta, a quien le entusiasman las experiencias originales, se está divirtiendo de lo lindo con sus relaciones amorosas con el ex misógino 100Pies.
 
A todo ello, Chiquili4 sigue intentando intervenir en conversaciones ajenas (ahora en la de la Tele5 y 100Pies) por ver si cae alguna tajada.
 
- 100Pies... ¿es verdad que tenías miedo a las mujeres?
- No, Tele5. Exactamente no. Es que estaba bloqueado por De2 y Ca3. Era mucha presión su presencia entre nosotros.
- Pues yo estoy completamente desinhibido desde siempre, compañeros. Soy un espíritu abierto a cualquier experiencia - interviene Chiquili4
 
Ahora ya la Tele5 no insulta a Chiquili4 ni le desprecia. Ve en él otra potencial aventura para el futuro.
 
- Podríamos hacer un trío, Tele5
- Espera, Chiquili4. No vayas tan deprisa. De momento tres es una multitud. Pero espera. Aún tienes que aprender algo más. Es mejor que te enteres con los informativos matinales y quizás obtengas, pronto, una noche de suerte - le explica la Tele5.
 
Y, por último, de manera inesperada, ha entrado el lunnis pasado un nuevo miembro a formar parte de la Comuna. Es La2, una interesante feminista con aspecto de culta que ha cogido por banda a Pin8 y le ha soltado el siguiente sermón.
 
"¡Aquí hay trabajo Pin8! La aventura del saber te llevará a paraísos cercanos que tú ni te puedes imaginar ahora. Así que alegra esa cara y come caminos Pin8... come caminos hasta saber y ganar. Grandes documentales sobre humedades naturales te harán llorar de placer y te serán de más provecho que esta compañía de dos hombres y medio. Vive la vía de la ley y el orden y, a dos metros bajo tierra, entierra tu decepción... porque yo puedo ser el resumen de tu jornada, Soy la calle nueva para ti".
 
Pero Pin8, de momento, no ha logrado digerir su terrible derrota y La2 le agobia demasiado; así que todas las noches se olvida de lo biólogo entomólogo y se hace enólogo para tomar docenas de caldos en la bodeguilla con el zapatero del pueblo, mientras la Viuda de 3Illo (sentada siempre en su cómodo tresillo de su cómoda vivienda para observar y criticar la belleza de la Tele5 y la inteligencia de La2) rajoya que te rajoya (como dicen por aquí los parroquianos en vez de raja que te raja) contra ambas, Pin8 y el zapatero... pero aleccionada ahora sólo por sí misma y su trasnochada y patriotera manera de ver las cosas para ocultar la envidia que le despiertan (belleza e inteligencia) las dos mujeres de la Comuna. Y digo aleccionada por sí mismo ya que el cura párroco Ron0 ha sido trasladado por las autoridades eclesiásticas (recomendado por su santidad papal) a otro pueblo muy lejano de allí pues ya eran muy fuertes los rumores de que además de que le gustaba el ron y el pelo al cero era ciertamente pederasta y estaba persiguiendo al ex misógino 100Pies cuando el joven se perdía antes por las noches entre las calles del pueblo.
 
Bonito humor tele y vidente -si además sabemos que Pin8 anda siempre en tanga- para hacer una fina crítica hacia los falsos encantamientos. Campanilla no cree en los cuentos. La princesa está triste. Y, con todo ello, la tanga de Pin8 da mucho en qué pensar porque tiene mucho contenido más o menos superfluo.
 
Pero resulta que hoy me he levantado pensante y me he propuesto indagar lo que un día se preguntó el mismo Michael Ende en la presentación de su obra titulada "La historia interminable". "Me gustaría saber qué pasa realmente en un libro cuando está cerrado" se preguntaba el célebre novelista. ¿Qué pasa en un libro cerrado?. Muchos dirán que no pasa nada más que un silencio sepulcral... pues no... no es cierto... Dentro de un libro cerrado hay una gran multitud de letras impresas sobre el papel. Hay dentro de un libro cerrado toda una gran historia narrada por alguien que un día la escribió para la posteridad. Sólo es necesario tomar el libro cerrado y abrirlo y leer. Leer. Ese es el misterio del libro cerrado. Que hay que abrirlo y leerlo. Lo abrimos. Leemos. Y nos encontramos un gran número de personajes que no conocemos todavía pero que vamos descubriendo a través de sus aventuras, de sus hazañas, de sus vivencias. Claro que hay que abrir el libro y leerlo para hacernos conocedores de esos múltiples personajes... pero ya en el libro cerrado están presentes y latiendo. Michael Ende tiene razón. El lenguaje posee el fantástico poder de abarcar y comunicar la realidad con una facilidad pasmosa. Todo lo abarcamos y todo lo podemos expresar mediante la palabra. Con este simple ejercicio de abrir un libro y leerlo vemos lo que existe (Sevilla por ejemplo), vemos lo que no existe (Pinocho por ejemplo), vemos lo que existió (Troya por ejemplo) y vemos lo que puede existir (el próximo verano por ejemplo). Yo abro un libro y leo. Tú abres un libro y lees. Él o ella abre un libro y lee. Y todos nosotros juntos abrimos un libro y leemos y nos hacemos un poco más sabios. Bueno, pues todo eso ya está en el libro cerrado. Así que vamos a abrirlo y a conocer lo que existe en forma de Sevilla, a conocer lo que no existe en forma de Pinocho, a conocer lo que existió en forma de Troya y a conocer lo que puede existir en forma de próximo verano. Por ejemplo. 
 
San Agustín de Hipona tenía hipo de vez en cuando. Y es que resulta que no conoción nunca jamás ni las "realitys shows" televisivos ni a Pincoho en tanga. Por eso llegó a decir un día en que acertó plenamente en la diana:^" 
Hoy me he levantado pensante y me he propuesto indagar lo que un día se preguntó el mismo Michael Ende en la presentación de su obra titulada "La historia interminable". "Me gustaría saber qué pasa realmente en un libro cuando está cerrado" se preguntaba el célebre novelista. ¿Qué pasa en un libro cerrado?. Muchos dirán que no pasa nada más que un silencio sepulcral... pues no... no es cierto...

Dentro de un libro cerrado hay una gran multitud de letras impresas sobre el papel. Hay dentro de un libro cerrado toda una gran historia narrada por alguien que un día la escribió para la posteridad. Sólo es necesario tomar el libro cerrado y abrirlo y leer. Leer. Ese es el misterio del libro cerrado. Que hay que abrirlo y leerlo.

Lo abrimos. Leemos. Y nos encontramos un gran número de personajes que no conocemos todavía pero que vamos descubriendo a través de sus aventuras, de sus hazañas, de sus vivencias. Claro que hay que abrir el libro y leerlo para hacernos conocedores de esos múltiples personajes... pero ya en el libro cerrado están presentes y latiendo.

Michael Ende tiene razón. El lenguaje posee el fantástico poder de abarcar y comunicar la realidad con una facilidad pasmosa. Todo lo abarcamos y todo lo podemos expresar mediante la palabra. Con este simple ejercicio de abrir un libro y leerlo vemos lo que existe (Sevilla por ejemplo), vemos lo que no existe (Pinocho por ejemplo), vemos lo que existió (Troya por ejemplo) y vemos lo que puede existir (el próximo verano por ejemplo).

Yo abro un libro y leo. Tú abres un libro y lees. Él o ella abre un libro y lee. Y todos nosotros juntos abrimos un libro y leemos y nos hacemos un poco más sabios. Bueno, pues todo eso ya está en el libro cerrado. Así que vamos a abrirlo y a conocer lo que existe en forma de Sevilla, a conocer lo que no existe en forma de Pinocho, a conocer lo que existió en forma de Troya y a conocer lo que puede existir en forma de próximo verano. Por ejemplo.  
 
 
Hoy me he levantado pensante y me he propuesto indagar lo que un día se preguntó el mismo Michael Ende en la presentación de su obra titulada "La historia interminable". "Me gustaría saber qué pasa realmente en un libro cuando está cerrado" se preguntaba el célebre novelista. ¿Qué pasa en un libro cerrado?. Muchos dirán que no pasa nada más que un silencio sepulcral... pues no... no es cierto...

Dentro de un libro cerrado hay una gran multitud de letras impresas sobre el papel. Hay dentro de un libro cerrado toda una gran historia narrada por alguien que un día la escribió para la posteridad. Sólo es necesario tomar el libro cerrado y abrirlo y leer. Leer. Ese es el misterio del libro cerrado. Que hay que abrirlo y leerlo.

Lo abrimos. Leemos. Y nos encontramos un gran número de personajes que no conocemos todavía pero que vamos descubriendo a través de sus aventuras, de sus hazañas, de sus vivencias. Claro que hay que abrir el libro y leerlo para hacernos conocedores de esos múltiples personajes... pero ya en el libro cerrado están presentes y latiendo.

Michael Ende tiene razón. El lenguaje posee el fantástico poder de abarcar y comunicar la realidad con una facilidad pasmosa. Todo lo abarcamos y todo lo podemos expresar mediante la palabra. Con este simple ejercicio de abrir un libro y leerlo vemos lo que existe (Sevilla por ejemplo), vemos lo que no existe (Pinocho por ejemplo), vemos lo que existió (Troya por ejemplo) y vemos lo que puede existir (el próximo verano por ejemplo).

Yo abro un libro y leo. Tú abres un libro y lees. Él o ella abre un libro y lee. Y todos nosotros juntos abrimos un libro y leemos y nos hacemos un poco más sabios. Bueno, pues todo eso ya está en el libro cerrado. Así que vamos a abrirlo y a conocer lo que existe en forma de Sevilla, a conocer lo que no existe en forma de Pinocho, a conocer lo que existió en forma de Troya y a conocer lo que puede existir en forma de próximo verano. Por ejemplo.
 
Hoy me he levantado pensante y me he propuesto indagar lo que un día se preguntó el mismo Michael Ende en la presentación de su obra titulada "La historia interminable". "Me gustaría saber qué pasa realmente en un libro cuando está cerrado" se preguntaba el célebre novelista. ¿Qué pasa en un libro cerrado?. Muchos dirán que no pasa nada más que un silencio sepulcral... pues no... no es cierto...

Dentro de un libro cerrado hay una gran multitud de letras impresas sobre el papel. Hay dentro de un libro cerrado toda una gran historia narrada por alguien que un día la escribió para la posteridad. Sólo es necesario tomar el libro cerrado y abrirlo y leer. Leer. Ese es el misterio del libro cerrado. Que hay que abrirlo y leerlo.

Lo abrimos. Leemos. Y nos encontramos un gran número de personajes que no conocemos todavía pero que vamos descubriendo a través de sus aventuras, de sus hazañas, de sus vivencias. Claro que hay que abrir el libro y leerlo para hacernos conocedores de esos múltiples personajes... pero ya en el libro cerrado están presentes y latiendo.

Michael Ende tiene razón. El lenguaje posee el fantástico poder de abarcar y comunicar la realidad con una facilidad pasmosa. Todo lo abarcamos y todo lo podemos expresar mediante la palabra. Con este simple ejercicio de abrir un libro y leerlo vemos lo que existe (Sevilla por ejemplo), vemos lo que no existe (Pinocho por ejemplo), vemos lo que existió (Troya por ejemplo) y vemos lo que puede existir (el próximo verano por ejemplo).

Yo abro un libro y leo. Tú abres un libro y lees. Él o ella abre un libro y lee. Y todos nosotros juntos abrimos un libro y leemos y nos hacemos un poco más sabios. Bueno, pues todo eso ya está en el libro cerrado. Así que vamos a abrirlo y a conocer lo que existe en forma de Sevilla, a conocer lo que no existe en forma de Pinocho, a conocer lo que existió en forma de Troya y a conocer lo que puede existir en forma de próximo verano. Por ejemplo.
 
San Agustín de Hipona un día que tupo hipo, porque resulta que era hipocondríaco, dijo una gran verdad ya que no conoció nunca ningún "reality show" de tele viva ni tampoco a Pinocho y mucho menos a Pinocho en tanga. Fue lo siguiente: ¡Ay de mí que ni siquiera sé lo que no sé! No era necesario que supiera mucho más de lo que sabía.