BJS es tan fanático seguidor y consumidor de las "varillas" que ha conseguido alcanzar el récord mundial en el oficio de coleccionarlas. Tan asombrosa hazaña ha pasado a ocupar el primer puesto en el "Libro Guinnes de los Récords". Desde su más tierna juventud, BJS ha ido tanto de "varillas" que se ha quedado como una varilla. ¿Quién despeja esta paradoja? Pues no. No es una paradoja. Es una especie de metáfora de la existencia. De "varilla" en "varilla" BJS ha demostrado lo que todos sabemos pero que él cree que no sabemos. El oficio de "varillero" es tan antiguo como las veletas. Y es que es necesario ser muy "veleta" para batir el récord de las "varillas" a niveles mundiales incluyendo otros planetas del universo de las bajas pasiones. Por eso BJS canta mientas le da a los tomates.
 
He aquí la letra de su continua cantinela: ¡"Varillas varillas verdes" pero qué viejas que son! ¡"Varillas varillas verdes" que despiertan mi pasión! ¡"Varillas varillas verdes" pero qué viejas que son! ¡A pesar de ser tan feas a pesar de ser tan feas tengo yo gran colección! ¿A cuánto asciende la colección de "varillas" del famoso BJS? El número de "varillas" que ha coleccionado para su cotidiano uso es como el "pi" de las circunferencias, O sea que se desconoce su exactitud porque es infinito y se pierde en las noches de los tiempos. Noches. Precisamente es por las noches la mejor ocasión  de ir coleccionando "varillas" tras "varillas" quizás por aquello tan famoso de "cuando salga la luna cuando salga voy a verte
no te quiero ver a oscuras ni sin luz para quererte".
 
Es sorprendente no saber ligar y, sin embargo, haber conseguido la gran hazaña de batir el récord de poseer "varillas" en el "currículo" personal. ¿Qué clase de persona es un  "varillero"? No es cuestión de amores como los ignorantes creen sino cuestión  de gastarse todo el salario mensual con ellas. Porque las "varillas" no son gratis y cuestan dinero. Haber alcanzado la obtención ostentosa de tantas "varillas" en la vida sentimental no es cuestión de amor (como siguen pensando los ignorantes) sino de amar el arte de coleccionarlas para luego "fardar" ante los amigos (cosa muy diferente y hasta opuesta al amor) y es que si de "varillas" hablamos, ¿quién no las ha visto en las tomateras del mundo entero? ¡Aquí hay tomate! ¡Vaya que sí que aquí hay tomate!   
 
Una condición necesaria para alcanzar el grado supremo de "gran varillero" es ser un paleto total; o sea, ser un paleto completo sin duda alguna. Ser tan paleto como para ignorar lo que las personas inteligentes sabemos de sobra: que cuàntas más "varillas" colecciones más paleto eres y más seco te quedas. ¿O no es verdad que la ignorancia es un pecado y coleccionar "varillas" nunca te calma la sed? Sepan ustedes que, según Alejandro Fernández, "¡Hoy tengo ganas de ti, hoy tengo ganas de ti!". Lo cual viene a confirmar, una vez más que, además de ser pecado, con las "varillas" siempre te quedas tan hambriento como si no hubieses gozado nada y, además, el sueldo mensual ha volado del todo por ir. sin descanso alguno, coleccionándolas noches tras noches. Y aquí me viene a la memoria, pensando en las "varillas", aquello tan famoso de "poco a poco hila la vieja el copo". 
 
Es por eso por lo que BJS es un "chollo" para las viejas. Un verdadero "chollo" mientras sigue coleccionando "varillas" a la marcha del "salto del tigre" que todos sabemos lo que es. En otras palabras, que se cree que es todo un Sandokan jugando al camaleón mientras los demás nos quedamos asombrados de que sea tan león en la cama. El asunto va de "varillas". El asunto va de "maravillas" tras "maravillas" coleccionando miles de maravillosas "varillas". Un Errol Flynn a la hora de soñar con el cine y las artistas del cine. Claro que a veces soñar cuesta bastante dinero y, además, te estafan metiéndote una "varilla" en lugar de una "star" de Hollywood que es lo que BJS cree que son las "varillas" que ha coleccionado. ¿Cuestión de "pringados"? Pues sí. También tiene mucho que ver con la cuestión de ser un "pringado" y salir tan "pringado" de estas aventuras que ni el mismísimo "Pantera Negra" lo puede superar.
 
Memorizo lo que nunca he llegado a olvidar: "¡Yo he picado muy alto y qué pocas "varillas" vas a coger tú!". Me entra de nuevo la risa. He conocido a tantas que me entra de nuevo la risa. Eso de picar me suena a "Las Pedroñeras". Levanto la cabeza para mirar a la cantera y comprendo que ha debido picar bastante subido a los riscos para otear cómo ligamos quienes ligamos de verdad aunque sea en mitad de una carretera. Raniero y Renzo son dos amigos que han viajado juntos durante años, viviendo aventuras, luchando en duelos y seduciendo mujeres. Raniero es el hijo de un Duque, y el veterano Renzo es un Don Juan. Estoy pensando, ¡vaya por Dios!, en Gina Lollobrigida. Espadas cruzadas y una sola cosa por pensar: "Sempre me han caído mucho mejor los pequeños perdedores que los grandes héroes villanos".