UN DÍA DE VENDIMIA

Isabel pasaba todos los fines de semana en el pueblo de sus padres, era la forma de descansar del bullicio de la gran ciudad. Isabel era una niña de diez años y disfrutaba del campo, el aire puro y de sus amigas de allí, podía perderse por sus calles sin ningún problema para ella era algo especial.
Pero ese fin de semana lo sería aún más, ese fin de semana iría de vendimia con su amiga Nieves. La familia de Nieves tenía una pequeña viña familiar, era el mes de septiembre y las uvas estaban listas para cortar.
La mañana empezó de madrugada y... subidas al tractor recorrieron el camino hacia la viña, hacia fresco ese que resulta agradable, que huele a amanecer, a maíz y hierba. Ya llegaban , Isabel , no veía el momento para ella era un juego de niñas...

_ Bueno niñas, ya estamos aquí hay tenéis la espuerta sentaros en la primera viña y a ¡trabajar!
Nieves e Isabel se sentaron y comenzaron a cortar la uva, era una uva de un amarillo verdoso que...daban ganas de comer. Cortaban echaban a la espuerta y cantaban mientras tanto ¡era tan divertido! de vez en cuando hablaban de sus cosas, descansaban un ratito y admiraban el paisaje, eran felices.

Entre viña y viña canción y canción, confidencias de amigas termino el día, y antes de regresar, Antonio, el padre de Nieves sentó a las niñas en una manta en el suelo y les dijo:

_Veo que lo habéis pasado bien, y han sido muchas la uvas que habéis cortado _ Si papa hemos disfrutado mucho mañana volveremos_ No hija mía mañana llega la cuadrilla, empieza la tarea y ya no será cosa de dos mocosas... je,je.je. Yo solo quería que vinierais un día para estar juntas, disfrutar de un bonito día, ya tendréis tiempo de trabajar, pero me gustaría que en adelante vierais vuestra vida como esas viñas, viñas que hay que sembrar y cuidar para que el fruto sea el mejor de todos, cuanto mejor lo hagais más fructífera será vuestra vida.
También me gustaría, que todo lo que realicéis en vuestro camino sea como esta pequeña vendimia, si, lo habéis pasado bien trabajando y... ha sido por que era vuestro lo habéis trabajado con amor y la esperanza del logro bien hecho, de esa forma habréis de vivir cuando hayáis de trabajar vivirlo, realizarlo a diario como si fuera vuestro, con la alegría y entusiasmo con que hemos cortado cada uno de estos racimos, pensando que entre dos o tres, o más, se llega mejor, en esta vida lo mejor es ayudarse y compartir las tareas, allí donde estéis, allí donde valláis, siempre, haced lo mismo que hemos hecho hoy aquí, poner en la tarea la ilusión de aquello que es tuyo, que te hace, vivir..