Se parece a una mentira este suburbio que delata
su poesía hacinado entre las torres debutantes,
simientes de los golpes que el poder del oro verde
desparrama en su conquista.
Aqui juegan esos chicos que preocupan a estudiosos.
Aqui sangran esas madres su inocencia y sus abortos.
No hay veredas que limiten con la farsa, ni almohadones
que descansen un futuro a la deriva que no sabe de pausas.
En el barrio han florecido dagas que se ofrecen tentadoras
a las manos temblorosas, erupción de la ansiedad que
sepulta dolorosa su ambición de asesinar esa historia miserable,
esa lápida que nombra con descaro los rincones donde Dios
ha vomitado el hastío de millones.
Se parece a una mentira este suburbio que dormita despojado
de sus sueños, indefenso, acorralado y subversivo,
no termina de entregar su compasión a la fiesta de las joyas
y caudales que lastiman su dolor inmerecido.
 
Jorge Dossi - 1990