-  Dispara, ¡Dispara conchetumadre! – le gritó, y el arma se hundió mas en su mejilla izquierda.
- ¡Me cagaste la vida, culiao! – le gritó ella amablemente, escupiendo cada palabra, literalmente.
Desnudo, desarmado y sin haber podido concluir el acto sexual, ella se le había ido encima sacando esa 38 de no sé donde, dándole en la cabeza y tumbándolo de guata, para luego montársele a la espalda e increparlo duramente por varios minutos. A esa altura, la calentura del sexo se había ido que rato.
- ¿qué te he hecho, hueona, si ni te conozco? – le dijo él tratando de ganar tiempo, porque de haber querido la hubiera reducido en cuando le puso el cañón en su cara.
- ¡¿Qué no te acordái?! – le gritó hundiendo mas el cañón en su cara. Pensar que hacia minutos su misma cara tan linda le estaba mostrando cómo gozaba con él desnudos en la cama. – ¿¡no te acordái, maricón!?
- no te conozco, puta de mierda, ¿por qué crees que te elegí a vos, por fina, maraca?
Ella respondió con un golpe en su cabeza de nuevo.
- conchetumadre, ahora me las vas a pagas…
Ella levantó la pistola, apuntando ese peso enorme del calibre, entonces él actuó. En dos movimientos le quitó el arma y le dio un puñetazo de esos que te dejan en el suelo, que fue mucho para una mujer, ella cayó al piso medio inconsciente y él agarró el revólver levantándose de la cama, desnudo, sangrando de la cabeza y apuntándole.
- me acabo de acordar, conchetumadre… - le dijo él sonriendo malévolamente, al verla en el suelo desnuda. - ¿Cómo no me voy a acordar, desgraciá de mierda?
La agarró del pelo, la tumbó en la cama y le amarró las manos, aprovechando que aun estaba ella medio atontada del golpe. Una vez lista, le dio otro combo en la cara y la violó salvajemente, para luego levantarse, darse una ducha y vestirse tranquilamente.
Luego la soltó, la besó en la boca y le dejó los billetes al lado.
- para la otra avísame si vas a sacar una pistola. – le dijo él, ella sonrió también complacida agarrando los billetes.
- y tu avísame que me vas a golpear en serio…
- no sería divertido…
Él salió de la habitación mientras ella se aprontaba a ducharse y esperar a su próximo cliente.