MI PERRO CALLEJERO.
Publicado en Oct 20, 2009
Era nuestro perro.
Lo dejaron en el garaje de casa. Lo criamos con mamadera Mis hijos lo llamaron Churrinche. Era callejero por derecho propio Como la canción de Cortés… No había reja que lo detuviera Ni pared, ni alambres ni nada que pusiéramos Para que no escapara… Al otro día, encontrábamos sus huellas marcadas La pared arañada Las plantas quebradas… Se subía a un macetero y saltaba a la calle.. Temprano, esperaba en la puerta. Sucio, hambriento y feliz… Pasaba y nos lamía las manos Se acostaba a nuestros pies Como pidiendo perdón. Era el terror de los gatos del lugar, Y era el amigo fiel de los vecinos Acompañaba a Juan, el carnicero de la esquina Y a su señora, al regresar a su casa Todos los mediodías A mis hijos los cuidaba como si fuera Un guardaespaldas, fiel y aguerrido ¡Ojo con aquél que quisiera molestarlos! Se paraba frente a ellos Erizaba el lomo y mostraba sus dientes afilados… A mí me seguía cada vez que hacía las compras. Se quedaba en la puerta del supermercado Y me esperaba el tiempo que fuera necesario. A la noche, cuando se escapaba Era el jefe de los perros callejeros Todos los seguían a él. Conocía el barrio mejor que nadie Y todos lo conocían a él La abuela de mis hijos vivía a una cuadra de mi casa. Cuando se aproximaban las cinco de la tarde Recorría el camino hacia su casa Esperaba a que saliera, Y caminaba a su lado, como cuidándola Era un canto a la vida verlos llegar Juntos, la anciana y él, mi perro fiel… Cuando mi suegra falleció El estaba en el garaje de mi casa, y se puso a aullar Era un grito desgarrador, doloroso… Luego se fue a la puerta de la casita Y allí se quedó, toda la tarde Como esperándola…o llorándola, nunca lo sabremos. A los 15 años de vida, enfermó de viejo Apenas caminaba, pero aún así, escapaba… Una mañana encontramos manchas de sangre en la pared Sus uñas no tenían filo, y se raspaba la piel Se lastimaba, y aún así, salía a hacer su recorrida Hasta que ya no pudo caminar… Las vitaminas no hacían efecto Estaba muy flaco, casi no comía… Nos miraba con sus ojitos cansados, Como despidiéndose…. Una tarde, me acerco a él, lo acaricio, Y se levanta, se para y camina…como puede Casi arrastrándose… Da unos pasos… y cae muerto. Así murió mi perro, como vivió, Caminando incansable las calles de su barrio. Lo enterramos en el jardín de la casa. Y estoy segura que todas las noches Sigilosamente Cruza la reja y salta a la calle Con su pelaje al viento Ladrándole a la luna y corriendo con los Ángeles.
Página 1 / 1
|
Zoraida
Mara Ester Rinaldi
Besotes y un abrazo gigante...
Tu amiga del alma...
María Ester.
Mara Ester Rinaldi
Te quiero mucho...
Tu amiga eterna.
Mara Ester Rinaldi
me alegro mucho que te gustara, siempre lo recordaremos, fué un perro muy especial...
Cariños...María Ester.
JUAN CARLOS
Besos y un abrazo que quita el aire ¡¡¡¡¡
Te quiere mucho....Tu amigo del alma..
Juan Carlos...
Jesus Eduardo Lopez Ortega
Lissette Alejandra
el perrito callejero. I like it