MUTUA FASCINACIN
Publicado en Nov 08, 2009
Ensartados por el centro
de un goce ambivalente, los gemidos van creciendo entregándonos intensamente. En la oscura habitación, oscilan nuestros cuerpos unidos y por convicción o por desgano, arrojamos los temores al abismo. Asumimos la victoria rotunda de la mutua fascinación adquirida, sobreviene en las almas un temblor y a plenitud nos mecemos haciéndonos el amor. Ante la inminencia del orgasmo cerramos los ojos sin avisarnos, entre bromas y sonrisas, como si en esa gran explosión se nos fuera toda la vida.
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gabriel falconi
muy bueno
Jorge Dossi
doris melo