LA SOLEDAD DE RILKE
Publicado en Nov 25, 2009
Terminé de leer, una vez más, las hermosas cartas que Rainer Maria Rilke envía a un joven poeta y digo hermosas porque no encuentro otro calificativo para ellas. ¿Dónde radica esa hermosura a la que me refiero? Creo que definitivamente en sus palabras transparentes como el agua, sencillas como las margaritas y a la vez profundas como la vida misma. Inmediatamente, surge en mí, un deseo infinito por leer más sobre Rilke pero me tengo que resignar con “Las rosas” (un ciclo de poemas en torno a esta fragante flor) y siento por un momento un grave disgusto. Después reflexiono y me digo: “Si estuvieras solo y poseyeras en tus manos sólo esas rosas, ni un libro más, encontrarías seguramente novedades gratas en cada nueva lectura”. Y en ese momento llega hasta mí un dulce consuelo que se acrecienta por la paciencia y mansedumbre que el alma humana debe de buscar en el transcurso del vivir. Entonces, como una brisa, los consejos siempre sinceros que ofrece este gran poeta alemán a su amigo Kappus me refrescan el alma: “Las obras de arte son de una soledad infinita; nada es peor para abordarlas que la crítica”. “Sólo una cosa es necesaria. La soledad. La gran soledad interior”. “Es bueno estar solo porque la soledad es difícil”. “Somos soledad”. De hecho, creo, en lo muy particular, que la única forma que tenemos para nombrar lo innombrable es a través del silencio, pero no un silencio en cuyo interior haya sólo vacuidad –vacío-- y desesperación; al contrario, un silencio lleno de amor por todo, incluso aquello que nos parezca mísero; un silencio que nos permita escuchar la voz honda que viene de nuestro ser y que nos habla, pero para realizar este acto de atenta escucha necesitamos de humildad y... de estar solos.
Mas olviden lo anterior, amables lectores, y tomen esto como lo que es: Me dejé llevar por el placer que me ofreció la intuición al recorrer líneas rebosantes de tanta soledad, pero también de amor y... de Rainer Maria Rilke. Te invito a realizar lo mismo, a sumergirte por unos días en estas cartas, estoy casi seguro que no te arrepentirás. ( “Cartas a un joven poeta” de Rainer Maria Rilke).
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Jos Antonio
Hoy por la noche, al llegar al trabajo me puse a buscar esas cartas de las cuales hemos estado hablando y cuál va siendo mi sorpresa que no las encontré por ningún lado, por lo que no tuve más remedio que buscarlas en la Internet y las encontré en la página http://www.ciudadseva.com/text...rilke.htm. con lo cual tuve que resignarme, ya que prefiero mil veces el formato que aún hoy gozamos: el libro. Porque no hay como tenerlo en nuestras manos, sopesarlo, acariciarlo, hojearlo y ojearlo, leerlo si fuese nuevo y, sacudirlo delicadamente si no lo fuese. En fin, pero esto es otro tema de conversación.
Me parece apropiado, entonces, transcribir un fragmento de la introducción que escribiera el mismo Kappus de esas cartas ya tan famosas.
"Erá fácil comprender que yo, en aquel mismo instante, decidiera enviar mis ensayos poéticos a Rainer Maria Rilke y solicitar su dictamen. No cumplidos aún los veinte años, y hallándome apenas en el umbral de una carrera, que en mi íntimo sentir era del todo contraria a mis inclinaciones, creía que si acaso podía esperar comprensión de alguien, había de encontrarla en el autor de "Para mi propio festejo".
Y una frase más: "...ahí donde habla uno que es grande y único, deben callarse los pequeños."
Gracias por leernos.
haydee
algo que me haya conmovido ó impactado ó simplemente, interesado. Si dejo de hacerlo, seguramente voy a manifestarlo por otras vías, el dibujo, lo hago, con frecuencia, la música, otra de mis debilidades ó simplemente lo hablo. No acostumbro, quedármelo.
En cuanto a la segunda, si, soy muy autocrítica de mis engendros, intento ser imparcial, a veces no me sale. Como dice el refrán, es más fácil ver la paja, en el ojo ajeno.
Jos Antonio
¡Qué acertados comentarios escribes sobre la primera carta! Seguramente todos estarán de acuerdo contigo. "Clara, precisa, sencilla y a la vez profunda; sabia, firme en las apreciaciones, bondadosa y absolutamente sincera" son tus calificativos. Recuerdo en este momento dos comentarios de Anna, en los cuales destaca, que la vocación del escritor nace y pende de la necesidad misma por escribir, y que el mejor crítico de lo escrito es el propio autor. Por tal motivo, Rilke nos invita por medio de las palabras dirigidas al joven Kappus, ¿qué hay en nosotros de esa necesidad? y ¿si somos aotocríticos con nuestras producciones literarias?
Ante esto cada uno de nosotros tendría su respuesta. La mía, en cuanto a la primera pregunta me resulta al menos necesaria, escribo por entretenimiento, por gusto aunque en ciertas circunstancias he sentido en extremo esa necesidad de volcar en el papel todo lo que mi alma experimenta, pero si dejo de escribir no pasa seguramente nada. Por ende, la escritura es un complemento muy importante en mi vida, más no vital. En cuanto a la segunda pregunta, muchas veces he caído cuando reviso lo que escribo, encuentro tantos defectos que me pregunto ¿cómo he escrito eso? Tal vez me salva una que otra frase afortunada y con ello, de alguna manera me siento redimido.
Amigos míos, ¿qué nos dicen de su experiencia de vida con la palabra escrita?
haydee
Su prosa, en esta carta, clara y precisa, es un compendio de sencillez y sabiduría. Revela la profundidad del conocimiento de las personas. Sus recomendaciones tan obvias y certeras, no dejan instersticios por donde pueda colarse una duda. La firmeza de sus apreciaciones, la bondad y sabiduría de sus consejos y la absoluta sinceridad que, a través de su palabra, ni resulta cruel, ni abruma.
Te agradezco, infinitamente, el placer que, gracias a tu oportuna convocatoria, hoy, he podido experimentar.
Por supuesto, seguiré leyendo y puedes contar conmigo para el foro.
Anna Feuerberg
Un abrazo grande : )
Jos Antonio
Agradecido yo estoy por tus apreciaciones y motivarnos, con el contenido de la carta primera, a recrearnos nuevamente en sus páginas.
Abrazo de oso.
Anna Feuerberg
Celebro profundamente tu inspiración para escribir este artículo. "Cartas a un Joven Poeta" es un libro que todo artista debe leer, es tan hermoso, profundo y sublime. Me parece super especial que un escritor de la talla de Rilke ofrezca accesibilidad a un estudiante...Es algo inconcebible en la actualidad. Recuerdo especialmente, en el primer capítulo, cuando Rilke le dice a Kappus que no busque criticas, que el mejor crítico de su trabajo es él mismo. Le dice que se pregunte a sí mismo si podría vivir sin escribir y si su respuesta era afirmativa entonces no era escritor. Que escriba incansablemente porque sus primeros trabajos escritos no serán satisfactorios y deberá trabajar mucho. Observe minuciosamente con amor todo cuanto acontece en la naturaleza. Y por supuesto, la soledad, la gran soledad que contiene al poeta, pero esa soledad de la creatividad donde se gestan las obras de arte.
No conozco la vida del poeta, pero lo siento una persona extremadamente sensible y vulnerable.
Gracias por presentarnos los poemas "Las Rosas", será una gran alegría leerlos. Y gracias a Carol que nos extiende sus elegías y sonetos.
Muy bello y sensible artículo Jose Antonio,
Un abrazo,
Annita
Jos Antonio
¡Qué comentario tan más hermoso el tuyo! y no es para menos, ante la fuerza misteriosa del autor que nos asiste.
También comprendo tu reducción a la misma sombra de rilke como la fuerza misteriosa que evita que retornes las elegías y los sonetos de tan grande poeta. Yo haría lo mismo.
Por otra parte, cuánta razón te habita al comulgar con rilke sobre la compasión que tiene el flamígero ángel ante nuestra pobre condición humana; y que haya en su arrepentimiento el consuelo de vernos temblar como la hojas en tiempo de otoño ante tanta belleza que nos circunda.
Con el corazón, gracias, amiga mía.
Carol Love
"¿Quién me escucharía
entre las cohortes de ángeles, si grito?
Y aún cuando en su propio corazón, de súbito,
me tomara alguno,
me aniquilaría su ser más pujante.
Pues, de lo terrible
lo bello no es más que ese grado
que aún soportamos. Y si lo admiramos
es porque en su calma desdeña destruirnos.
Terrible es todo ángel. Por eso me callo
y de mis oscuros sollozos el clamor ahogo.
¿Ay! ¿De quién podemos valernos?
.... "
.. la belleza suspendida de estas palabras, la emoción contenida de este encuentro es uno de esos ángeles... no es cierto amigo..? "..un ángel que en su calma desdeña destruirnos", como él dice.. pero nos deja temblando de gozo... Esta edición que tengo es de Biblioteca Básica Universal, del '80 -era de mi mejor amigo, imaginate que no pude devolverlo más...- y tiene además de las elegías, los sonetos a Orfeo.
Bueno amigo, un abrazo fuerte