Habíamos llegado al lugar indicado…
En privado…
Con todo el tiempo necesario para amarnos…
 
Y si bien ese primer encuentro de cuerpos,
Por ambos había sido muy deseado…
 
Calculado en palabras profundas y sensuales…
Ambientado entre sueños con velas y flores…
Practicando caricias y miradas en la soledad de las almas…
Durante mucha espera excitada…
 
Todo fue diferente…
Al llegar al sitio surgido para amarnos…
 
Callamos…
Pero sin dejar de mirarnos…
Profundamente…
 
Comenzamos despiadados en miradas…
Con los ojos empañados de excitación y emoción…
 
Nos aproximamos lentamente de frente…
A pocos centímetros de distancia nos detuvimos…
 
Cerramos los ojos ambos…
Unimos las palmas de nuestras manos…
Muy suavemente, muy apenas nos rozamos…
 
Dimos el tiempo a que se una el desborde de la ansiedad…
Mientras tan solo uníamos el calor de la palma de nuestras manos…
Traspiramos por las yemas…
Las huellas de nuestras palmas se hicieron ríos precipitados…
 
Y antes de ahogarnos…
Nos besamos íntegros…
 
Saboreamos nuestros labios…
Hasta que perdimos el gusto de los sabores…
Hasta desgastarnos…
Creo que… también sangramos…
 
No podíamos frenar…
Aunque necesitábamos descontrolarnos físicamente…
No podíamos dejar de besarnos…
 
Y lo logramos enfurecidos de pasión delicada…
Nos desnudamos…
Cada cual desnudaba al otro… apresurados…
Olvidando que hubiese sido más practico y veloz,
Desnudarse cada cual a si mismo…
 
Todo comenzó a desordenarse…
Su ropa intima y la mía…
Mis pantalones y si pollera…
Su blusa y mi camisa…
Sus botas y mis zapatos…
 
Enrede de pie…
Sus piernas en mi cintura…
Hasta elevarme del piso cargándola…
 
Haciendo pie el la tierra y llegando a las nubes continuamente…
Con el ritmo exacto de nuestras delicadas ambiciones sexuales…
 
Y tocamos el cielo… y no pudimos parar…
Y continuamos…
La alcé como a una novia sin ropa…
Y suavemente la recosté en la cama…
 
Ella recordó su feminidad y timidez…
Recordó estar íntegramente expuesta…
Y buscaba mi boca como un refugio…
Para vencer la timidez de mi mirada…
 
Pero la bese integra y volvimos a unirnos…
Y a elevarnos…
Como guerreros sin piedad… brillando de poder…
 
Y luego de llorar nos reímos mucho…
Y luego de algunos minutos volvimos a ponernos de pie…
Y todo volvió a comenzar…
Hasta llegar el amanecer…