BETY, SU AMIGA Y YO...
Publicado en Jan 18, 2010
Un día llego a la casa, oigo música que viene de ella y me causa cierta curiosidad.
Cuando abro la puerta me encuentro con que mi hermana tiene una reunión en mi apartamento con muchos amigos. Eso me molesta, pero no soy capaz de decirle que no a ella y decido que es mejor disfrutar un poco, ya es tarde y la verdad es que estoy cansado, tengo que madrugar mañana pero ya no hay nada que hacer. De pronto encuentro algo que valga la pena. Mi apartamento esta lleno con todo tipo de gente, algunos conocidos, otros no. Al entrar lo primero que me llama la atención es una mujer alta, delgada, con pelo oscuro que nunca he visto. tiene la piel muy blanca, piernas largas sensuales y bien formadas y se para como una elfa: con las caderas hacia el frente y los hombros hacia atrás; ella me mira de reojo brevemente y se ajusta el collar de la camisa; se que tengo que ir a hablarle, está con otras dos nenas, simpáticas pero palidecen a su lado. Busco a mi hermana pero no la encuentro por ningún lado y me tropiezo con su mejor amiga; me mira con cara de pena y me dice que lo siente mucho, que mi hermana enloqueció e invitó a toda esta gente pero que si lo deseo ya los saca a todos de mi apartamento. Le digo que no se preocupe y le pregunto por la Bety, se rie y me dice que es la amiga de una amiga y que todos los tipos le han caído y todos han sido prontamente rechazados. Me da un golpecito con pena en la espalda y se va. Voy a la cocina a servirme algo de tomar, como es usual mi hermana y sus amistades toman cualquier cosa, de hecho, lo más barato que encuentran. Reviso mi bar, no lo han notado todavía, así que me sirvo un Glenfiddich y cierro el bar con llave; es el único whiskey que tomo y espero por su bien que no traten de buscar nada, en el bar por supuesto. Busco un grupo de gente con que hablar, la mayoría me parecen aburridos de antemano y otros están claramente cerrados, así que me voy a hablar con otra amiga de mi hermana. Hablamos un rato de nada serio, me cae bien; después de unos pocos minutos de charla sin importancia decido ir a hablarle a Bety, la chica de la mirada sensuañ, pervrsa y tierna;, está con un grupo de personas, me mira cuando me estoy acercando pero me ignora rápidamente, va a ser difícil llamar su atención, decido hacer algo estúpido y le hablo: "Hola! Perdón, pero te gustan los caballos?" Todo el mundo voltea a mirarme. "Supongo que si, porqué?"Contesta ella. "Estás segura que no nos conocemos?" La veo voltear los ojos y rápidamente responde "No, no nos conocemos..." Rápidamente la interrumpo "Sabes, yo creo que si nos conocemos, verás cuando yo tenía como 13 años montaba a caballo y en la escuela donde lo hacía había una niña pequeña bien extraña... tenía como 8 y estaba totalmente obsesionada con los caballos, sus cuadernos eran de caballos, su morral tenía caballos, se pegaba calcomanías y se hacía dibujos de caballos, pero lo peor era que a veces le daba por correr como si estuviera galopando y hacia ruidos extraños con su boca... Estás segura que no eres ella?" Esta mujer comenzó a ponerse roja y todo el grupo nos estaba mirando. Muy molesta dijo: "No, estoy segura que no soy esa niña! Está loco!?" Miro hacia abajo con cara de decepción y le digo: "Está bien, le creo, pero déjeme terminar en el caso, muy poco probable, de que si lo sea, estoy 99.99% seguro que no lo es, pero déjeme actuar, solamente por que existe ese 0,01%" No espero que me conteste y continuo. "Verá, yo era un niño muy malo y nos burlábamos mucho de usted, usted era toda extraña y chistosa... y en los últimos meses hemos llegado a la conclusión, con mi terapeuta, que debería buscarla y pedirle perdón por todo lo que le hice, así que... me perdona?" En este punto abro mis brazos un poco, pongo mis palmas hacia arriba, ladeo la cabeza hacia la derecha e intento dar un paso hacia ella; su cara se ilumina, sonríe y me da un abrazo. "Por favor di que me perdonas!" le digo cuando me abraza (conseguí algo, al menos un abrazo). Después de este intercambio la ignoro totalmente y le hablo a las otras dos nenas, las hago reír, pasa el tiempo y sigo ignorando a la pelinegra, vuelve a mirarme con odio y ahora desconfianza pero igual la ignoro. Después de media hora espero a que ella tenga el vaso desocupado, vacío el mio y le digo que vaya y me sirva algo, se pone furiosa, sonrío y le digo que me siga entonces. La llevo a la cocina le pregunto un par de bobadas sobre gente de la fiesta, le pregunto que está tomando y se lo sirvo, cuando me pregunta que voy a tomar yo le respondo "nada de la cocina" y la llevo hacia mi bar, me sirvo otro escoces y cierro el bar, la llevo a un sitio un poco más privado, le hago un par de preguntas personales y le doy un beso, me lo responde, la beso lentamente por unos 10 segundos, me separo de ella y le digo que fue muy agradable conocerla y que voy a charlar con unas personas que conozco de antes, me doy media vuelta y me voy. Para este momento mi hermana ya ha llegado y me ha estado mirando de lejos y evadiendo, sabe que su idea no fue muy brillante; me le acerco y hablamos un poco, estoy entre molesto y divertido con ella, le pregunto por la pelinegra, me da la misma respuesta: amiga de una amiga, nunca la ha visto y no sabe nada. Ya es bastante tarde y decido irme a dormir, le digo a mi hermana que arregle cuando acaben, le hecho una mirada a la pelinegra, me está mirando, sonrío y le hago con la mano derecha algunos gestos para despedirme, me doy la vuelta y entro a mi cuarto, cierro la puerta sin asegurarla. Pasan 5 minutos y alguien golpea, estoy en ropa interior pero abro de todas formas (seguro es mi hermana), resulta ser la pelinegra, me da un poco de pena pero es mi casa así que decido preguntarle qué cree que está haciendo pero me empuja dentro del cuarto y cierra la puerta. "Me ha estado tratando por horas como si yo fuera nadie, eso no me pasa a mi, imbécil!", le respondo con "Qué es esto!? Quién se cree que es metiéndose así a mi cuarto?" Me empuja encima de la cama, me salta encima y empieza a besarme el cuello y la cara. La empujo, se cae de la cama y me río. Me pregunta con voz herida "Qué le pasa?, ¿no me ha estado tratando de llamar atención toda la noche?" Le respondo que no, pero que ella no está tan buena como cree y que no quiero gastar mi tiempo de sueño en alguien que probablemente no aguantará más de media hora. "Así que mejor me convence de que me va a entretener por más de una hora o déjeme dormir". Mi pequeño perdedor de la conciencia está gritándome como loco, haciéndome notar que soy un estúpido pero yo solamente la miro, botada en el suelo, está increíble y tiene un escote bestial, realmente la deseo. Se para, se arregla la ropa, me mira con rabia, me grita "Imbécil!". Yo la miro, espero 5 segundos y le respondo "puede que si, pero al menos cuando era chico no galopaba y relinchaba como una yegua y tampoco estoy tan loco para meterme al cuarto de un desconocido y lanzándome encima... venga, siéntese" Esto la molesta aun mas, si las miradas pudieran matar estaría bien muerto, pero igual se sienta. "Empecemos de nuevo" digo, me le acerco lentamente, y como no se quita la beso, me devuelve el beso unos instantes. Después, me hecho hacia atrás y le digo "ve, eso es mejor" me hecho más hacia atrás y empiezo a alejarme, me pregunta para donde voy, le digo que ya le dije que no pienso desperdiciar mi tiempo y que voy a llamar a una amiga para que nos acompañe y que si resulta ser algo divertido tal vez se repita. Pensaba yo que esa había sido la tapa, me iba a mandar a freír espárragos y a matar con ellos, igual tomo mi celular y empiezo a buscar un número, me pregunta si hablo en serio, me volteo, la miro y le pregunto si le parece que estoy bromeando, hago una pausa y le digo que no se preocupe, que mi amiga se demora al menos una hora en venir y que eso es tiempo más que suficiente para que me encargue de ella. Se para, me mira aun peor y se va, dando un portazo. El negro del purgatorio me va a romper, pero no importa, es una historia chistosa. Me lavo los dientes, me desnudo totalmente y me meto en la cama, estoy un poco excitado y decido fantasear un poco con la pelinegra cuando de pronto abren la puerta, alguien entra y la cierran nuevamente, estoy seguro que entraron dos personas pero está oscuro y no las alcance a ver, me siento rápidamente pero no antes que cierren la puerta "Qué es esto? Quién está ahí?" pregunto con autoridad, me responde una voz familiar "Veamos si eres capaz de hacer todo lo que dices", es la voz de la pelinegra, mis ojos ya la distinguen a ella y a otra mujer. Bety se sube a mi cama y gatea hacia mi, acerca su cara a la mia "veamos si realmente eres capaz de satisfacer a dos mujeres calientes, pero falla y nos aseguramos que nunca más te acuestes con nadie" Me besa, la otra hembra se sube a la cama y se une al beso, las agarro a cada una del pelo y halo hacia atrás, pregunto "y qué pasa si las satisfago y ustedes no me dejan bien agotado y ya piden que pare por que no resisten más?" las dos se ríen con lujuria. "Encarguémonos primero de ti" le digo a Bety, a la otra le digo "excitemosla mucho", ambos la besamos por todos lados, la desvestimos lentamente, la tocamos suavemente, rápidamente me doy cuenta que estas dos ya se conocen, pienso tomar provecho de eso, seguro la otra nena me va a ayudar bastante. Cuando llego a sus calzones estos están empapados y su olor es ácido y muy fuerte, un olor sexual que me impulsa a perder el control, me gusta. Me detengo y le digo a la "ahora demosle algo de atención a tu amiga", hacemos lo mismo con ella, besos y caricias por todos lados, la desnudamos lentamente hasta que solo tiene ropa interior, su olor es más dulce. Voy a mi gabinete y saco aceite, lo pongo sobre mis manos y sobre las tetas de la amiga mientras que la pelinegra la besa por todos lados, las dos me están agarrando todo lo que pueden y me están masajeando la verga, que esta dura y ancha, las dejo hacer todo lo que quieran con las manos, no es fácil hacerme venir así. Ya las tengo gimiendo y moviéndose desesperadas, así que es tiempo para darle el masaje a las tetas de la pelinegra, "tu turno" digo; la amiga me agarra y empieza a besarme y a cogerme, no me deja jugar con las tetas de Bety, la agarro por el cuello, firme pero suavemente "no seas celosa, ella tiene derecho a estar tan caliente como tu, mejor ayúdame", la suelto y en poco tiempo los tres estamos respirando fuertemente y cogiéndonos por todos lados, gimiendo y temblando con cada caricia. Les quito los panties y le digo a la otra que se acueste encima de la pelinegra boca abajo y empiezo a comerle el coño a las dos, las maniobro para que los clítoris queden muy cerca y pueda lamerlos al mismo tiempo y que se toquen si ellas se mueven; voy de una a la otro, follandolas con mi lengua, chupando, lamiendo, saben distinto pero muy bien. La amiga se viene y siento que tiembla cada vez que la lamo, así que me dedico más a la pelinegra, pero no puedo evitar lamer a las dos, finalmente se viene, suavemente pero lo hace. Esto está muy bueno, ahora las pongo una al lado de la otra, ambas boca arriba y las miro un rato, dejo que descansen un poco, solo las miro. Beso a cada una y las miro, después de un par de minutos me paro al lado de la cama, le tomo las piernas a la pelinegra, la halo hacia mi y comienzo a frotar mi verga sobre su coño, cuando siento que está caliente y húmeda se la clavo hasta el fondo, lo más que pueda y la saco y meto un par de veces "te gusta?... no vas a tener más hasta que le comas el coño a tu amiga y la hagas venir", a la otra le digo que se siente en la cara de la pelinegra y se deje comer. Le ayudo a ponerse encima y hago que me de la espalda y la halo hacia mi, con mi mano derecha juego con sus tetas y con la izquierda evito que la pelinegra se mueva mucho, de vez en cuando la clavo y otras veces dejo que mi verga descanse encima de su coño, mantengo esto hasta que la amiga se viene, en ese momento monto a la pelinegra salvajemente, como si fuera un semental, y la hago venir muy duro; me contengo y no me vengo, tengo que follarme a la otra. La tomo y la pongo boca abajo deforma que pueda verle el culo, lo tiene muy rico, lo miro bien y lo agarro fuerte, esta posición me hace venir muy rápido y estoy muy cachondo para poder controlarme mucho. A la pelinegra parece gustarle ver como follo a su amiga en cuatro, le lanzo un desafío: "no creo que logres venirte otra vez, mírate, estás agotada y mira a tu amiga, escasamente se puede mover". Ella sonríe, se levanta, me coje las bolas por detrás y me dice que la haga venir duro, las está apretando suavemente y se siente muy bien, logra marcar el paso de mis embestidas, me dice que ni se me ocurra venirme o me exprime las bolas hasta que me duela, tiene buenas habilidades para negociar. De alguna manera logro aguantar y la hago venirse, grita como desesperada, su coño que se contrae mucho alrededor de mi verga y la pelinegra cogiéndome las huevas es casi demasiado. Paro, casi no puedo mantenerlo, afortunadamente la pelinegra me suelta y cae al lado de su amiga. No creo que quieran que las toque más pero la pelinegra le da la vuelta a la amiga y pone su cabeza junto a la de ella "ya puedes venirte, encima nuestro, donde quieras... y vente mucho, queremos mucho sémen sobre nosotras."
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Veneno