Laguna que invita a la sed
Inagotable de mis sinos
Ninguno de ellos dañinos
Al besar tu boca sin red.
Los tiempos ya han der ser
Infinitos torbellinos
Nacidos en los molinos
Al compás de nuestro crecer.
Lo otro sólo es tal vez
Incógnitas del Destino
Nunca borracho de vino
Andando siempre al revés.
Laureados con la hiel
Incrédulos sibilinos
No serán esos mis signos
Al buscar tu amor de miel.
Los ojos con los que ves
Incitan lo que termino
Nacido en mi camino
Amante fiel y cortés.