Sin Mirar Atrás
Publicado en Feb 02, 2010
Partí sin mirar atrás, sólo recuerdos, llevaba,
Recuerdos de algún amor, amor que se deshojaba entre el polvo del camino y el viento de la mañana. En el viaje, comprendí, lo mucho que yo dejaba. entre las frías paredes de aquélla casa cerrada. Dejaba mis ilusiones y buena parte de mi alma Sin poderla reprimir, una lágrima, brotaba, y otras más iban cayendo, sin que pudiera hacer nada. Una niña que observó, a su madre, preguntaba: ¿por qué llora la señora? ¿será porque nadie la ama? ¿Si le ofrezco mi muñeca, se aclarará su mirada? Y me la llegó a dejar sólo por verme calmada. Sonreí de la ocurrencia, entre lágrimas saladas. Ella se puso contenta, al ver que ya no lloraba Le devolví su muñeca. El camino, me esperaba
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Filiberto Oliveros
Hasta pronto querida haydée. Te despido, con una frase del extraordinario tango argentino "Pasional", cantado por mi y no por Jorge Falcón: "Estás clavada en mi como un puñal en mi carne" y otra del mismo tango: "tus manos desatan caricias que me atan a tus encantos de mujer... se que nunca más podré arrancar del pecho esta pasión". Abrazos y besos de Filiberto.
Alfonso Z P
con mi soledad". Esta despedida tuya me tiene con la mente nublada, no se me ocurre
nada original y para seguir en la onda, tomaré prestado unas estrofas de Las coplas
del amor viajero, del gran poeta venezolano Don Andrés Eloy Blanco:
"Pero te vas, sin dejar / ni una huella en el camino... /
Sombra azul que cruza el mar / la borra el azul marino...
No sé si me olvidarás / ni si es amor este miedo; /
yo solo sé que te vas, / yo solo sé que me quedo.
Y que si te quise ayer, / hoy te siento más tirana /
y si así crece el querer / ¡cómo te querré mañana!"
La verdad es que no se que hacer, llamaré a tu protector para que interceda con sus
buenos oficios, para que recorte tus alas y frene tus deseos de volar. Él ya me lo
había asomado, pero el que no toma consejos, no llega a su edad, Se del poder de
convencimiento que tiene y que cambiarás de opinión, yo quisiera tener esas facultades,
pero se que cualquier intento que haga será infructuoso y seguiré con mi corazón partío.
Pero "dejo las puertas abiertas, por si quieres regresar," tu sultán (ya me lo estoy
creyendo de verdad) espera y te pide que no tardes mucho, es que otra odalisca está,
que mejor no te cuento.
Abrazos con ansias de retorno: Al Zet Ap