Carta a mi DOLOR
Publicado en Apr 05, 2010
En ese momento parecía algo indescifrable, estaba petrificada con un sin fin de emociones congeladas, durmiendo en el inconsciente de algún ciego, descansando en los ojos de un espejismo. Lastimame lo suficiente como para aguantar, gobierna mis sentidos. Mandato de algún callejon, mi propio hielo quema cada centímetro de mis fronteras. No me pidas una razón, no me pidas lo que no te puedo dar. Me declaro culpable soy victima de mi propia realidad, soy responsable de ser la realidad de mi propia victima. No me pidas una respuesta, no tengo respuestas, solo mentiras. No juzgues mi silencio es la unica carcel que me libera. Volviendo hacia algún circuito cerrado en mi vida, mi consecuencia quedo revelada a un demente pasaporte hacia otra dimensión. MATAME el síndrome del masoquista, LOS RETRATOS DISTORSIONADOS EN LA MEMORIA DE MIS DISTURBIOS.
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Roberto Langella de Reyes Pea
Ligia
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