Por ella soy un niño perdido en el bosque de las noches sin sueño. Por ella soy marinero sin brújula en los mares revueltos de la pasión. Por ella soy un pequeño gorrión errante. Por ella pierdo la conciencia y me hundo me hundo me hundo en el mundo de las inquietudes. Por ella tengo cosida con versos la voz en las cuerdas de mi guitarra y pinto poemas en las nubes blancas. Por ella abro los ojos todos los días y me levanto y parto hacia las batallas para volver al atardecer lleno de sangre, sudor y lágrimas. Por ella he perdido mi nombre y no recuerdo mi patria ni mi origen ni mi futuro. Por ella muero día tras día, a cada instante, por sentir sus labios posados en mi corazón. Por ella, simplemente por ella, soy un ser existente. !Divina mujer!.