El abrió sus alas al cielo
y a todos los vientos,
 A los vientos a favor
y los que estaban en contra.
 
Con su intuición la busco en el horizonte
Sintiendo su perfume a la distancia.
 
Ella... ella era el amor de toda su vida
Y también lo presentía a el,
sola en la torre de un castillo
 de un hermosa ciudad.
 
Ella sabia que el llegaría,
sola lo estaba esperando.
Algo en su corazón le decía
que el pronto llegaría.
 
Su amor eterno estaba ahí
Atravesando vientos de regreso
para llevarla por los cielos y mostrarle
todo lo que juntos, habían creado con sus almas.
 
Tan sutil, tan delicado, tan caballero...
Tan acorde a la suavidad que ella merecía…
 
El se elevó desde la distancia en la cual se encontraba
desde hacía ya tanto tiempo...
 
Elevo con suspiros, polvo de la tierra mientras se elevaba.
 
El viaje de retorno a ella comenzaba...
Guiado por las ráfagas de su perfume de mujer.
 
Cruzo tiempos ausencias y añoranzas...
Cruzo nostalgias incapaces de olvidarla
Amándola...
Volando con mayor rapidez continuamente
Aumentando sus expectativas
Imaginando el reencuentro
Sintiendo su perfume fresco a mujer…
…a mujer que le pertenecía.
 
La detectaba en el sitio exacto
en donde ella se encontraba aguardando a su llegada.
 
Y enfurecido de pasión
agito al extremo sus alas volando hacia ella.
 
Ella lo esperaba sin saber que lo esperaba
sin saber que su amor la llamaba,
sin saber que era el, aquel que desde siempre
Invisible, en sueños la elevaba
llevándola cada noche de desesperanza
a refugiarse a su castillo de cristal
para tiernamente cobijarla…
 
Desesperado de amor por los aires,
Corto nubes y ocasos.
 
Atropellado, al llegar,
casi cae encima de ella…
y aterrizo suave de milagro
Mientras ella a la ciudad observaba desde aquella torre.
 
Con una rosa roja toco suavemente su espalda
Tapó sus ojos con las alas
Para que ella tome el aire de las sierras...
Antes de besarla.
 
Ella se dejo llevar por su caballero enamorado
tan ansioso el de ella y ella tan enamorada…
 
El se contuvo,
se arrodilló para besar su mano
Bajo el manto del cielo mas estrellado de todas sus vidas
Preparado desde el inicio de todos los tiempos para ellos,
Para ese instante,
para el amor reconciliado
el amor concebido
el amor comprobado
el amor conservado y atesorado
en la dignidad aquellos que,
de sus almas humanas, generan milagros…
 
Ahí…
Arrodillado la beso en silencio
Silencio de suspiros de Caballero
y aun de rodillas....
Extendió sus alas
Poniéndose de pié
Pegado a ella.
 
Con la yema de sus dedos rozo sus labios
Cerro sus pestañas
con la rosa púrpura que conservaba en sus manos
 
y sin atreverse a cortar sus suspiros
Espero antes de besarla
Alzándola en sus brazos
Mirándola suavemente
Sonriéndole, cara a cara
 
Disfrutando el silencio del milagro
concebido por dos almas
distanciadas en la inmensidad de la vida
y reencontradas por el destino
que imponía la necesidad de que se amaran.
 
Habiéndolos motivado a buscarse
y encontrarse para sellar sus pasiones compartidas…
 
El la llevó suave en su vuelo,
sin destinos mortales
ni capaces de medir
ni mucho menos limitar…
 
y le dijo al oido:
 
-Te llevaré de regreso.
De regreso de ti misma amor.
Hacia el infinito ser que a este caballero lo enamoro
y jamás al lugar que yo pretenda o desearía…
Sino tan solo de regreso a ti misma,
al lugar que nadie jamás, debería haber osado en alejarte.
Como Caballero, porque te amo a ti
Mucho mas que a mi mismo.
 
y entre amaneceres púrpuras de los aires y lagrimas
La besó...
Aleteando bajo las estrellas.
 
La llevo a su morada,
Bajo las estrellas,
La beso tan dulcemente
que ella no pudo mas que continuar amándolo
hasta la eternidad.
 
El robo su perfume
para esparcirlo entre los Ángeles
y la perfumo con su propio aroma
cubriéndola con sus alas
para amarla.
 
Ella perfumo a su caballero
Para que nunca la olvide,
para que siempre la lleve con el en su alma,
en sus alas…
y para que recuerde en sus sueños siempre besarla…
 
El le dijo:
 
- No será necesario mas felicidad mi amor
jamás me iré de tu lado
Recordare el hoy,
pero siempre... estando a tu lado.
Respirare tu aroma
Mezclaremos nuestro sudor
Uniremos nuestros labios continuamente
Y nuestros cuerpos compartirán la esencia…
Pero siempre juntos
De cuerpos o de alma.
Porque nadie jamás me amo como tu
ni yo jamás ame a nadie como a ti.
y el tiempo es lo de menos
La eternidad no tiene apuro
Y ella selló en su alma el amor y la musa,
Con palabras sanadoras…
 
“Todos los propósitos de Dios, referidos a las causas del amor a la distancia, se rigen estrictamente a razón de que aquellos que sean candidatos factibles de llegar a ser dignos de portar el amor que añoran, aprendan a desarrollarlo y resguardarlo...”