TRAS EL UMBRAL DEL TIEMPO
Publicado en Oct 03, 2010
Nada causa más llanto que el olvido
Cuando el destino sea escrito al verano de hacer su agosto de escasos ganas. Las flores se marchitan temerosas, Entonces, causante no es el olvido Sino el tiempo verdugo enigmático. Tras las espinas de las rosas Son las malas lenguas que brotan De aquellos joviales esperanzados. No mata la vejez sino los años. Sino la desesperación de vivir y el olvido a sí mismo en la vida Conclusión refulgida el culpable de todo con su necedad nos colman a vivir a mundos ajenos místicos.
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Miriam
Jos Luis Marrero