Que haces, Oh Gran Señora, vestida con esos ropajes tan extraños?
es que acaso olvidasteis de donde has venido y cual era tu misión en estas lejanas tierras?
Te veo confundida, Maestra de Maestras, tu cabello ha crecido y ya no brilla como antaño solía...
Ahora hablas de Paradigmas, de Ciencia y Tecnologías Sobrehumanas,
que según tus escritos, salvarán al mas escéptico...¿o al más creyente?
Cubristeis el mundo con un suave velo color plata, por el que se trasluce un halo de luz cegadora, que al parecer viene desde más arriba...donde el Sol quema con sus rayos amenazantes...
Separasteis en bandos a los Hombres, que en tu antiguo nombre luchan cual bestias enfurecidas,
ardientes de dolores pasajeros, expectantes por la llegada de un muerto resucitado en su cuerpo denso, equivocados, cegados...
¿Segura que es usted Gran Dama?, Os noto un poco diferente...cabizbaja, esconde la mirada y murmura en idiomas desconocidos para mi...¿Ocurrió algo en ese viaje donde iba a enfrentar a su enemiga? Puedo ayudar a sanar sus heridas...Perdón, no era mi intencion molestarla...solo queria ayudar...

Yo servía a la Verdad desde tiempos inmemoriales...mas un día oscuro, la tierra se cubrió de un manto de ilusiones, y mi Ama volvió con una extraña sonrisa en los labios...sarcástica, malévola...
En un principio pensé que celebraba su victoria; de aquella batalla que libraba con su adversaria: La Mentira...pero más tarde advertí como todo en el mundo cambiaba...Los que negaban de ella ahora la adoraban como un dios mas, y los que como yo, conociamos los reales Misterios de la Vida y la Muerte, comenzabamos a dudar...
Fue entonces cuando descubrí, que las incrustaciones de brillantes en sus nuevos ropajes, correspondian a los espejos ilusorios de ella, la Imponente Embustera, quien habia robado la identidad de mi Señora Celestial, y que hoy Gobernaba nuestra tierra, con su voz áspera y su aullido mortal...
Así entonces me dirigí en búsqueda de mi Maestra y la encontré cansada, triste, derrotada...
Con un Pacto que cumplir hasta la proxima Era de Oro...por haber perdido en una trampa injusta que le tendía su rival...
Los papeles cambiaron, oí decirle...Desde hoy, en parabolas hablaré a los humanos, quienes deformaran sus Ideales por las sensaciones del Cuerpo y cubrirán sus cabezas de riquezas y gusanos...Pocos entenderán mi atemporal sabiduría, seré doctrina de locos y genios de pocos adeptos, transformaran mis lecciones morales en tonterías pasadas de moda, y degeneraran el cielo hasta derribar al Sol...
Mas, un día, un lejano día, oh humilde y fiel servidor...un día la Era de Oro volverá a reinar, y las cenizas de la Mentira y su velo, caerán como la lluvia apocalíptica, que ellos desean poder mirar...y en ese instante...todo cambiará. Solo debemos sentarnos, y esperar...