INTRODUCCION
El presente documento no pretende ser un estudio académico respecto a la historia de Casa de Luz ICM, ni pretende ser una referencia bibliográfica para los eruditos.
Tan sólo es un anecdotario de hechos que han tenido lugar en los trece años de vida de la Iglesia, haciendo referencia a datos publicados en distintos medios para hacer una analogía de acontecimientos que sirvieron para darle forma.
"También es Nuestro Dios" escrita por el Reverendo Troy Perry, su autobiografía publicada en el portal electrónico de La Fraternidad Universal de Iglesias de la Comunidad Metropolitana,  "Would You Go Out Without Knowin? A Faith Journey" del Reverendo David Pettitt, experiencias compartidas por algunos de los miembros fundadores de la Iglesia y experiencias propias también, han servido para su elaboración.
En los capítulos que comprende este documento, se pretende analizar este anecdotario desde diversos ángulos: el espiritual religioso, principalmente,  su ecumenismo, su espíritu democrático y social, así como generador de liderazgo y empoderamiento en distintos ámbitos, es la forma en que se ha estructurado.
Una Iglesia en marcha, con una misión y una visión clara, con estructura propia y eminentemente transformadora y con retos por delante, es lo que se pretende remarcar en este documento.
  
13 AÑOS DE SER FAMILIA
Hace trece años, precisamente la noche del 9 de enero de 1998, el Reverendo David James Pettitt celebró el primer servicio religioso de la que ahora es conocida como Casa de Luz, ICM.
Para ese servicio se congregaron un grupo de personas que nunca hubieran pensado que este propósito llegara a fructificar en este hermoso proyecto que aún sigue en marcha y continúa una trayectoria dinámica y esperanzadora.
El lugar no era de lo más apropiado, el departamento del Colectivo Nancy Cárdenas, que en esa época era dirigido por Abel Quiroga en los condominios Constitución, se ofreció para tal fin, tal como muchos años atrás, El Reverendo Troy Perry llevara a cabo el primer servicio religioso de nuestra iglesia, en un departamento de la ciudad de los Ángeles, en Huntington Park, California el 6 de octubre de 1968.
David Pettitt, al igual que Troy Perry, habían recibido el llamado de Dios para plantar una iglesia incluyente bajo circunstancias similares, en lugares distintos y épocas diferentes.
Nace así Casa de Luz, ICM como una filial de la Fraternidad Universal de Iglesias de la Comunidad Metropolitana, en la ciudad de Monterrey, con el llamado y la visión de David Pettitt, un extranjero en un país extraño para él, con una cultura diferente e incluso, un idioma diferente, el cual no dominaba.
Su llamado le llevó a dejar atrás todos sus bienes y comodidades que solía tener en su lugar de origen en la ciudad de Houston de los Estados Unidos y empieza un peregrinaje por México, para tratar de empaparse  de la cultura y comprender un nuevo idioma. El Reverendo Jorge Sosa, q.e.p.d.,  lo introduce en esta nueva cultura para él y comienza, antes de llegar a Monterrey, una jornada, como él lo llama, por la Ciudad e México, Guadalajara, Cuernavaca y otros sitios de México, hasta llegar a Monterrey, el destino final de su llamado, precisamente unos días antes de celebrarse aquel primer servicio, en el cual, la parábola de la semilla de mostaza, fue el eje principal sobre el que versó el mensaje de David, como una profecía de lo que vendría.
El principio fue alentador, como lo fuera para Troy Perry en la ciudad de los Ángeles. La convocatoria fue bien recibida y los primeros servicios fueron para muchos algo revelador y extraordinario. Entendieron claramente el mensaje que se les ofrecía al ser incluidos en un proyecto religioso que, por lo general, para ellos y la mayoría de nosotros,  era de rechazo o de condenación, en las iglesias de las cuales proveníamos, sin entender el porqué.
Tanto para Troy Perry, como para David Pettitt, supieron escuchar el mensaje de Dios de que él nos quiere tal cual somos, somos su obra creadora y no debemos de ser rechazados bajo ninguna circunstancia, el nos ama así, tal cual somos.
El tiempo nos ha demostrado que el proyecto tiene fundamento, un profundo sentido del amor incluyente y ha logrado crear una gran familia en el Señor; es como hemos aprendido que sexualidad y espiritualidad se complementan en un sólo don que Dios nos ha regalado (cuerpo y espíritu).
13 AÑOS DE UNA JORNADA DE FE.
A partir de aquella celebración que realizó el Reverendo  Troy Perry hace cuatro décadas, empezó una marcha hacia la fe para enviar un mensaje de esperanza a la comunidad de los excluidos. De esa celebración a la que acudieron trece personas, se sembró una semilla que ha empezado a dar frutos. Ahora, instituida como una organización religiosa formal, con una denominación propia y con presencia en  una veintena de países alrededor del mundo con más de trescientas iglesias y más de cuarenta y tres mil miembros.
En la década de los años 60's, el Reverendo Troy Perry, fue expulsado como un clérigo de una denominación pentecostal debido a su homosexualidad. Pasó los siguientes años luchando para reconciliar su orientación sexual y su espiritualidad cristiana.
El principio no fue fácil y significó para el fundador una larga y penosa marcha  por la defensa de sus convicciones. Se le unieron grandes personajes y teólogos que le apoyaron en su proyecto personal y lo hicieron propio también, dándole sustento a la Iglesia en ciernes.
Troy tuvo que sufrir muchos escarnios, burlas y vicisitudes en su jornada por levantar una iglesia diversa. Huelgas de hambre, amenazas de ser balaceado, llevar a cabo servicios religiosos con chaleco anti-balas  e incluso, atentados incendiarios a las iglesias abiertas, con una gran cantidad de miembros perdidos, al mas puro estilo del Ku Klux Klan sureño en los Estados Unidos, tuvieron que suceder para consolidar a la Iglesia.
Pero su mensaje se propaló por el mundo, una voz fuerte y recia proclamaba la libertad religiosa, por encima del conflicto de la sexualidad. "El Señor es mi pastor, y él sabe que soy gay" fue su mensaje inspirador.
En México también se escuchó y se entendió el mensaje de Troy, se abrieron iglesias afiliadas a la Fraternidad Universal de Iglesias de la Comunidad Metropolitana en la ciudad de México con el Reverendo Jorge Sosa al frente en el año de 1985, en Guadalajara con el Reverendo David Limón y en Cuernavaca con el Reverendo Alfonso Leija pocos años después.
En un proceso muy parecido al llamado que Troy Perry recibiera, otro americano también recibió un llamado similar casi treinta años después, David Pettitt. Para él, el llamado estaba muy claro y dirigido... "sembrar una iglesia en la ciudad de Monterrey, con una semilla tan pequeña como la de la mostaza..."
Así nació Casa de Luz aquella noche del 9 de enero de 1998, en el departamento de los condóminos Constitución. Ahí se celebraron tan sólo unos cuantos servicios porque la convocatoria fue tan grande que los viernes, días acordados para llevarlos acabo, llegaron a acudir tantas gentes que escuchaban el mensaje de David con las puertas abiertas del departamento y paradas en los pasillos y las escaleras del edificio.
Viendo este éxito tenido en la comunidad de Monterrey, David Pettitt, junto con las personas que le acompañaron desde la planeación del primer servicio religioso, tuvieron que darse a la tarea de buscar un lugar propio. Un lugar en el que pudiera sustentarse la nueva iglesia. Después de haber visitado infinidad de locales y casas en renta para escoger el más adecuado, como un mensaje divino, encontraron un espacio adecuado, con propietarios que estuvieron de acuerdo en arrendar el inmueble, que hasta el momento ocupamos, en el entendido de lo que aquí se pretendía llevar a cabo.
Una vez tomado el espacio de la calle de Diego de Montemayor 227 en el centro de la ciudad de Monterrey, se acondicionó y se consagró, en un servicio concelebrado por el Reverendo Jorge Sosas, para que pudiera servir como espacio de alabanza y adoración, así como para residencia de David, quien mantenía una iglesia abierta las veinticuatro horas al día al servicio de la comunidad. El primer servicio religioso en su nuevo espacio, se llevó a cabo el 27 de febrero de 1998, unas cuantas semanas después de haberse llevado a cabo el primero de ellos.
Aquí ya se empezaron a realizar metódicamente todos los viernes a las 20:15 horas. Horario por cierto algo extraño, pero con fundamento. Viernes... porque para la mayoría de los asistentes les era más fácil acudir después de sus labores y poder atender sus compromisos familiares dominicales sin contratiempos. Ocho y cuarto de la noche, porque se destinaban quince minutos a cantos de alabanza en espera de quienes pudieran llegar tarde al servicio y comenzarlo propiamente a las 8:30 de la noche.
Poco a poco se le fueron haciendo remodelaciones al inmueble, cada vez eran más las personas que acudían a los servicios y era tan práctico el espacio, que permitía que en el verano, éstos se pudieran celebrar en el patio y en días lluviosos o fríos, en el interior, en lo que ahora es la antesala del  área social.
Para el año de 1999 era ya tanta la afluencia, que con la generosidad de las aportaciones semanales y de algunos amigos de la iglesia, y también tan extensas las redes que David había ido creando, que todo un año se llevaron a cabo los servicios religiosos en la Iglesia Anglicana de la "Sagrada Familia" de la colonia mitras; donde por cierto, también se celebró el rito de Ordenación de David Pettitt el 26 de Noviembre de 1999, cuando  fuera nombrado también oficialmente como Pastor de la iglesia Casa de Luz, ICM y se le otorgaran las credenciales como clérigo por parte de la Fraternidad Universal de las Iglesias de la Comunidad Metropolitana.
Esos tiempos en los que el crecimiento era tan espectacular, causaba cierta curiosidad más allá de nuestras fronteras. ¿Cómo era posible que una iglesia joven tuviera tanta aceptación en la comunidad latinoamericana? No había otra, inclusive las que ya tenía más años de oficiar en México, tuvieran tanta afluencia como nosotros.
Era frecuente que tuviésemos visitas del extranjero, muchos de ellos, inclusive de las más altas esferas del liderazgo de la fraternidad, como Judy Dahl, quien entonces fungía como Directora de las Iglesias fuera de los Estados Unidos (Global Outreach), el Reverendo Don Eastman que vino a ayudarnos a llevar a cabo el proceso de institucionalización, la actual Moderadora de la Fraternidad, la Reverenda Nancy Wilson y muchos más, miembros de todos los niveles.
Grupos como el de "Unción", "Excel" y otros más, los teníamos como huéspedes de Casa de Luz y participaban con nosotros, codo a codo,  en trabajo voluntario en la remodelación del inmueble así como en la celebración de los servicios religiosos, con el apoyo de su canto y de su música en los coros.
Casa de Luz empezaba a tener su propio lugar de importancia en la Fraternidad, se le conocía como la "Iglesia del siglo XXI" por el trabajo pastoral, social y de evangelización que venía trabajando a nivel regional. Su participación en las conferencias generales y regionales era apreciada y requerida, ya que se le consideraba un modelo a seguir para otras iglesias latinoamericanas en ciernes.
Resultado de este crecimiento inspiró a David Pettitt a visualizar un espacio más digno para celebrar los servicios religiosos. Coincidentemente, la casa contigua a la arrendada, estaba ocupada por unos posesionarios de manera ilegal. Los legítimos propietarios habían cursado una demanda de desalojo para hacer uso del inmueble. Proceso legal que en el tercer año de existencia de la Iglesia tomó efecto.
David iluminado habló con los propietarios con la intención de comprar el inmueble (claro que sin contar con fondos suficientes en la tesorería de la Iglesia) y éstos sin mayor requisito que la palabra empeñada, aceptaron el trato y le entregaron un lunes a David las llaves del inmueble.
Dentro era un desastre. Años de  posesión ilegal había deteriorado sensiblemente todas las habitaciones. La basura y desechos predominaban en su interior. Las paredes llenas de garffitties y los techos llenos de hollín por la quema de basura para hacer las veces de estufa (porque no contaba con ninguno de los servicios, ni de luz, agua, gas, etcétera durante mucho tiempo) Aún así, para el siguiente viernes, el 27 de Febrero de 2000 en que se tomó posesión del inmueble, se celebró el servicio dentro del espacio adquirido con un remozamiento suficiente para poder estar cómodos en su interior.
Comienza de nuevo una jornada de remodelación y adecuación para hacer el espacio apropiado para el servicio. Con sus propias manos y esfuerzo, David, junto con varios de los miembros de la iglesia, se dieron a la tarea de pintar paredes, derribar muros, abrir puertas y en pocas palabras, hacer digno el lugar para los servicios de alabanza y adoración de Casa de Luz, en un edificio propio.
En estas condiciones, todavía en pleno proceso de remodelación, con algunos muros derribados, pero con los pilares originales que sustentaban el techo, pero que impedía apreciar todo el espacio en su total magnitud, el propio Reverendo Troy Perry, en ese momento Moderador General de UFMCC, consagró el lugar en el mes de septiembre de ese año, para que sirviera como Iglesia ya denominada Casa de Luz (yo diría que una mala traducción del inglés o traducida muy literalmente, porque el sentido que David quería darle al nombre de la iglesia es que fuera un faro que guía en la oscuridad)
Ciertamente, el haber llevado a cabo un acuerdo con los propietarios del inmueble para comprarlo, puso en apuros a la Mesa Directiva de la Iglesia porque no existían los fondos suficientes para enfrentar el compromiso financiero. Pero David con su intuición y sabiduría nos calmaba aduciendo siempre... "no se inquieten, Dios proveerá..."
Y así fue, se firmaron letras a pagar en dos años para completar el valor del inmueble, inclusive que contenían  una cláusula de penalización con intereses, de no cubrirse oportunamente; pero todas ellas se cubrieron gracias a la generosidad de los benefactores que veían en labor que David estaba realizando, un verdadero compromiso con su visión y su llamado.
Para octubre del año de 2002, cuando tendría que pagarse la última letra que quedaba por cubrir, no había, como siempre, el dinero suficiente en tesorería para pagarla y precisamente el día que se tenía que realizar el pago, un amigo de la Iglesia, Artemio Addington, a quien conocimos en la Conferencia General de Toronto, depositó en la cuenta el dinero suficiente para cubrirla. Dios había proveído una vez más. 
Cumplimos nuestro compromiso y el inmueble ya era de nuestra propiedad; claro, solo falta hasta el momento, formalizar los protocolos de transferencia de dominio de la propiedad, porque en su momento, la Mesa Directiva decidió que sólo debería escriturarse a la Asociación Religiosa y no a ninguna persona física o moral en particular y para ese entonces, Casa de Luz, ICM, aún no contaba con el registro oficial de Asociación Religiosa, por no contar con uno de los requisitos establecidos por la Ley: contar con cinco años de existencia.
Vale mencionar que, ya teniendo la propiedad sobre el inmueble, se tuvo la oportunidad de ofrecer los servicios religiosos también en día domingo de manera alterna. Esta labor la propuso a David y la presidió uno de los miembros más antiguos que participaron en la fundación de la Iglesia: Fernando Ramírez.
El revendo David Pettitt aceptó no con mucho agrado esta propuesta y le delegó a Fernando toda la responsabilidad de la organización de dichos servicios. Al principio, no participábamos más de diez miembros en éstos; Fernando en ocasiones flaqueaba en la tarea pero su tenacidad y constancia han permanecido hasta la fecha.
Pero no todo fue miel sobre hojuelas para Casa de Luz, hubo tiempos difíciles ciertamente. Nos enfrentamos a infinidad de problemas internos y externos. Rupturas, crisis y escisiones. Rumores, chismes e intrigas como en cualquier otro grupo social. Demandas ante autoridades y amenazas,  incluso de despojo y expulsión de nuestro Pastor. Sufrimos robos del patrimonio e injurias. Algunos miembros sembraban el temor entre los asistentes. Hubo temporadas en las que el culto religioso tenía que celebrarse a puerta cerrada por los miedos y amenazas que se encargaban de alimentar quienes pienso yo, no le daban credibilidad a la misión y visión de Casa de Luz, ICM.
Paranoia al observar las luces intermitentes de las patrullas a través de las ventanas, de las patrullas que pasaban frente a la iglesia; algunos se escondían pensando en ser levantados como en una razia. Afortunadamente, esto nunca sucedió. A ese grado era el miedo despertado.
Tiempos difíciles en los que llegamos a tener observadores de la Secretaría de Gobernación que venían a corroborar los infundios que se propalaban en contra de la Iglesia y que jamás pudieron ser comprobados porque eran totalmente falsos.
Rupturas entre los miembros de la iglesia por ostentar cotos de poder, luchas de personalidad o tratar de imponer vertientes religiosas distintas a la doctrina de nuestra iglesia, también las sufrimos
David Pettitt terminó su jornada en Monterrey, entregando a la comunidad una Iglesia diversa, con patrimonio propio, con registro oficial ante las autoridades mexicanas como Asociación Religiosa, con un espacio digno y hermoso para la alabanza y la adoración. Dejó bien cimentadas la Iglesia del siglo XXI que soñó.
El deterioro en su salud, la pérdida inesperada de su compañero sentimental de los últimos años en su estancia en Monterrey, así como los reacomodos en la organización de la Fraternidad, precipitaron su partida.
Es hasta el día 1 de Agosto de 2005, cuando regresa a su País de origen, invitado a ser Pastor Asociado a cargo de la Educación de Santa Cruz ICM en Pensacola, Florida.
Recordemos que para ese entonces, habiendo ya desaparecida la Dirección de Asuntos Globales de la Fraternidad, se habían creado siete regiones específicas alrededor del mundo. Monterrey había sido seleccionada para albergar la dirección de la Región VI de la Fraternidad y la oficina de la Reverenda Darlene Gardner estaba precisamente en las instalaciones de nuestra Iglesia.
Entra nuestra Iglesia en una etapa difícil del 2005 al 2007 que la opacara. Sufriendo un proceso de re-estructuración en la que se marca una época en la cual Casa de Luz, ICM enfrentó una falta de liderazgo espiritual.
Para poder liderar a la Iglesia, La Obispa Regional, Reverenda Darlene Gardner, nombra al Reverendo Héctor Gutiérrez para ocupar la posición de Pastor interino mientras se ocupaba el Comité de Búsqueda Pastoral de la búsqueda del Pastor definitivo, posición que ocupó temporalmente y que presidía los cultos mientras sus ocupaciones en la Fraternidad eran compartidas en su lugar de residencia.
Los ministerios que se habían conformado en la época del Reverendo David Pettitt desaparecieron, se dejó de actualizar los medios electrónicos de difusión que se habían conseguido y prácticamente se realizaban los cultos a puerta cerrada con cada vez menos afluencia de participantes y poco interés en los miembros en participar.
Bajo esta situación, se conformó  un grupo que se autodenominó Grupo de Decanos, con los miembros más antiguos que seguían en activo, con la intención de apoyar a la Mesa Directiva en cumplir con sus obligaciones y, en principio, coadyuvar en la búsqueda pastoral para retomar el liderazgo espiritual de la Iglesia.
Coincidencias que Dios establece en el camino, pusieron en el escenario al Reverendo Fernando Frontan, originario de Uruguay. Él conocía ya el proyecto de Casa de Luz, ICM y recibió la invitación para incorporarse a la Iglesia como Pastor Interino. Aceptó el reto y estuvo una temporada presidiéndola.
Regresó a su país y habiendo visto la congregación sus dones de liderazgo espiritual, la Mesa Directiva le propuso formalmente ser pastor de la Iglesia y que cambiara su residencia a esta ciudad.
Aceptó el reto y habiendo cubierto los requisitos legales, llega a Casa de Luz, como clérigo, siendo el primer Pastor que las autoridades mexicanas aceptan y le otorgan la visa correspondiente. Situación que David Pettitt nunca pudo cumplir, porque recordemos que en su época aún no se contaba con el  registro oficial de Asociación Religiosa.
Para el año de 2007, el Reverendo Fernando Frontan Quevedo llega a Monterrey como Pastor Interino proveniente de la Iglesia hermana de Montevideo en Uruguay, el día 9 de febrero y mediante una Asamblea Congregacional celebrada en septiembre de ese mismo año es invitado como Pastor de la Iglesia y se incorpora como tal, cubriendo todos los requisitos establecidos por la Dirección de Asuntos Religiosos de la Secretaría de Gobernación y obviamente de la UFMCC, a partir de 28 de Marzo de 2008.
Comienza con él una nueva época de florecimiento de la Iglesia. Una recomposición del liderazgo espiritual hacia la congregación.  Se da a la tarea de cerrar las heridas abiertas durante la época oscura. Tarea nada fácil, por cierto.
Con él, se comienza también a mantener la feligresía y a difundir la palabra a más miembros de la comunidad. Se retoma el concepto de la iglesia del siglo XXI que había quedado en el olvido, También se retoma una posición más activa en el concierto de las iglesias y en las organizaciones de la sociedad civil, en el reconocimiento de los derechos religiosos y humanos.
Como figura pública que era en su país de origen, aplica todos sus dones a reconstruir la presencia de la iglesia en los medios de comunicación.  En esta época se crea la radio "Voces Cristianas" con al dirección de Manuel Villarreal. Y se crean distintos programas radiales enfocados a difundir el evangelio y el mensaje liberador de la Iglesia a un grupo mucho mayor de personas, con el alcance que los medios electrónicos de comunicación lo permiten.
La iglesia pareciera que toma vida nuevamente y obtiene reconocimiento por parte de las autoridades gubernamentales relacionadas con los asuntos religiosos. Pero va más allá. También tiene un gran respeto y reconocimiento de líderes y organizaciones civiles no gubernamentales que, en muchos de los casos, acuden a él para obtener su consejo.
Eventualmente, es criticado por tener una posición tan abierta hacia la defensa de los derechos religiosos de la comunidad, que rayan en un hilo muy delgado con la situación política que otros líderes sociales le cuestionan; aduciendo que, como extranjero y como clérigo religioso reconocido por la Secretaría de Gobernación, no debiera inmiscuirse en asuntos políticos internos del país.
Recordemos aquel mensaje a manera de ejemplo que públicamente realizó en la plaza central de Monterrey, frente al palacio de gobierno local, cuando en alta voz sus palabras retumbaron en toda la plaza... "Pido perdón a nombre de todos mis hermanos clérigos y sacerdotes... Stop a la homofobia...  No más discriminación y rechazo por ser abiertamente gay..."
Son dos años los que le lleva reconstruir a la Iglesia. Su jornada se ve truncada cuando decide no renovar su contrato con la Mesa Directiva para continuar como Pastor en la Iglesia y decide regresar a su terruño, como el lo dijera. Regresar a su gente y a sus costumbres.
Una vez anunciada su partida, se crea la incertidumbre en la congregación sobre la forma en que sería sustituido su liderazgo. Se pensaba que nuevamente entraríamos en otra etapa de tinieblas. Pero el designio de Dios estaba escrito. Aparece en escena el Reverendo Alejandro González, quien es introducido a la Iglesia por el Reverendo John Doner, dirigente del grupo "Las otras ovejas", organización hermana de la UFMCC.
Alejandro es presentado al Comité de Búsqueda Pastoral que había sido integrado para comenzar el proceso de sustitución de Fernando y es aceptado su interinato  y se incorpora a Casa de Luz, ICM el 25 febrero de 2010.
Por primera vez, la transición se lleva al cabo  teniendo a los dos pastores simultáneamente, uno saliente y otro entrante. Esto le da la oportunidad que la transición no fuera tan dolorosa, como en las ocasiones anteriores.
Con Alejandro al frente, la iglesia empieza tomar un rumbo distinto a los precedentes. Con David veíamos a un misionero, con Héctor a un erudito, con Fernando a un activista. Las expectativas estaban muy altas y bien fundamentadas.
Alejandro sería un pastor local, mexicano originario de la ciudad de Torreón del estado de Coahuila. Seminarista de formación religiosa, evangelista de  formación teológica. Con él no tendríamos los problemas de las relaciones con las autoridades de Gobernación y Relaciones Exteriores, para aceptarlo como aspirante a clérigo de la Iglesia.
Pero ciertamente comienza una nueva era para la iglesia. Si bien con Fernando se reconstruyó la postura de la Iglesia ante el concierto de las iglesias y de la fraternidad, con Alejandro se comienza a reconstruir las paredes que el tiempo había venido deteriorando y a recomponer la estructura de los ministerios que habían venido desapareciendo o dejando de operar en las anteriores épocas; en otras palabras, a reorganizar la iglesia a su manera particular de ver las cosas y su experiencia previa como pastor evangélico en su denominación de origen.
Llegamos con Alejandro en esta jornada de fe a la actualidad.  Dios ha querido que Casa de Luz, ICM se mantenga en marcha. Se ha mantenido firme a pesar de todos los malos augurios y de las vicisitudes que se han sufrido. La jornada de fe no ha terminado, es apenas un comienzo; son los primero trece años de una jornada muy larga por venir.
  
13 AÑOS DE SER UN IGLESIA ECUMÉNICA
A pesar de la formación pentecostal del fundador de la Iglesia, el Reverendo Troy Perry, su visión cristiana era incluyente. Al proyecto se le unieron miembros de distintas denominaciones, tanto protestantes como católicas. El eje central de la iglesia es la cristiandad, lo que le ha dado su estructura y su permanencia. "En nuestra iglesia no se discrimina a nadie" podría ser su sustento ecuménico.
En México, a diferencia que en los Estado Unidos, la mayoría de la población es católica, pero aún así, se proclama la ecumenicidad de la Iglesia como razón de ser de la misma.
Nacida de un llamado que recibiera Troy Perry, como él mismo dijera..."Ahora sé que voy a estar en la perfecta voluntad de Dios."
Su primer sermón versó sobre la humildad, el ser propiamente humano, espiritual, dentro de la homosexualidad y nos refiere textualmente de aquel momento: "Debemos amar y construir, liberarnos y liberar a otros de sus sentimientos en contra de nosotros."
Como su proyecto empezó a crecer y a atraer cada vez más a muchos fieles cristianaos de diferentes denominaciones religiosas y orígenes distintos, Troy Perry se dio a la tarea de estructurar una iglesia incluyente y ecuménica, nos refiere nuevamente: "...sabía que tendría que empezar a resolver los problemas de organización, administración, la doctrina y los servicios de la iglesia. Tenían que estar resueltos pronto, para que todo el mundo fuera capaz de conocer y confiar en la iglesia, para que fueran realmente una parte de su cuerpo, de su identidad. Yo sabía que no estaba empezando otra iglesia pentecostal. Yo estaba empezando una iglesia que sería verdaderamente ecuménica."
Por su lado, el fundador de Casa de Luz ICM provenía de la iglesia Católica, aunque se incorporó a la Fraternidad en los Estados Unidos como un miembro más.
Al ir tomando forma como iglesia propia, Casa de Luz ICM fundamenta su doctrina en la doctrina misma de la Fraternidad Universal, que al calce estable: "Las Iglesias Comunitarias Metropolitanas son una Iglesia ecuménica; es decir, nuestra fe es la fe sustentada en Jesús, hijo de Dios Madre y Padre, que vino al mundo a dejarnos un mensaje de amor, la redención de nuestros actos al margen del amor, libertad, fraternidad y unidad con Dios a través de nuestra fe en la Trinidad que es un solo Dios que se manifiesta en Dios, Madre y Padre de bondad, Jesús su hijo, redentor nuestro y en el Espíritu Santo protector. Nuestra Iglesia retoma, por su ecumenismo, la tradición cristiana primitiva común a todas las expresiones actuales de la cristiandad, con las que pretende establecer un diálogo respetuoso y, en la medida de lo posible, un trabajo conjunto; al igual que con cada una de las diferentes religiones del mundo, con las que converja en esa fuente primigenia y meta final de amor y colaboración."
La Iglesia, estructurada ya formalmente desde el 31 de Enero del año 2000, según los estatutos aprobados por la Asamblea Congregacional celebrada en ese entonces, reconoce y acepta los estatutos, normas, reglamentos y procesos establecidos en la XIX Conferencia anual de la Fraternidad Universal de Iglesias de la Comunidad Metropolitana, con una Doctrina, Sacramentos y Ritos propios.
Como Sacramentos, nuestra iglesia reconoce y acepta los de la Santa Comunión y el Bautismo. Como Ritos oficiales, se establecen: La Ordenación, La Obtención de Membrecía, La Santa Unión o Sacramento del Matrimonio, el Rito Funeral, el Rito de la Imposición de Manos y el Rito de la Bendición.
Desde su inicio, Casa de Luz, ICM, ha ejercido el Sacramento del Bautismo para todos aquellos miembros que manifiestan sus deseos de ser bautizados en la fe de Cristo Jesús y se ha practicado de muy diversas formas, tanto en agua viva como en bautisterio propio. Y como eje de los servicios religiosos regulares y especiales que se realizan, se ofrece el Sacramento de la Comunión, sin restricción alguna, ni condición especial para poder recibir el cuerpo y la sangre de Jesucristo.
De igual manera, Casa de Luz, ICM, ha practicado los ritos antes mencionado, tan sólo recordemos que en esta ciudad, fue ordenado el Pastor Fundador, David James Pettitt, muy al principio de su ministerio. Los otros pastores que hemos tenido, fueron ordenados en la Fraternidad en distintas épocas y lugares y, esperamos que pronto, nuestro actual Pastor Interino, el Reverendo Alejandro González, pueda también ser ordenado como clérigo reconocido por la Fraternidad Universal, una vez que haya cumplido con los requisitos que ésta establece y pueda incorporarse plenamente como Pastor definitivo de la iglesia, con las credenciales que la Fraternidad le entregue en su momento como clérigo.
Santas uniones, funerales, ritos de sanación con imposición de manos, así como ritos de bendiciones, son muy comunes en la Iglesia. Recordemos tan sólo los servicios de bendición de mascotas, a manera de ejemplo, que el Reverendo Fernando Frontan implementó en Iglesia y que tuviera mucha aceptación en la comunidad, o la bendición de parejas que se instituyó los días 14 de febrero en la celebración del día del amor y la amistad desde la época de David Pettitt
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13 AÑOS DE SER UNA IGLESIA DEMOCRÁTICA
Quiero mencionar que la Iglesia Casa de Luz, ICM, tiene todo un ordenamiento jurídico que le da sustento. Se rige de manera democrática a través de las asambleas congregacionales que toman las decisiones para nombrar pastor y nombrar miembros de la Mesa Directiva, la que apoya en la administración de la Iglesia, eligiendo a los miembros que la integrarán entre aquellos que han aprobado el curso de membrecía y han cubierto el rito correspondiente.
Tan democrática es nuestra Iglesia, que incluso la propia Fraternidad toma sus decisiones a través de conferencias regionales y generales, en las que todas las iglesias afiliadas tienen una representación, tanto de los clérigos como de los laicos. En la penúltima Conferencia Regional, se eligió a la Reverenda Nancy Wilson en el 2007, como Moderadora General de la Fraternidad, en lugar del Fundador, Reverendo Troy Perry que durante más de 30 años la dirigió y que él mismo decidiera jubilarse.
Casa de Luz, ICM, no es la excepción, a raíz de la decisión de dar por terminado su ministerio acordado, el Reverendo Fernando Frontan regresó a su país y en nuestra organización, en Asamblea Congregacional Extraordinaria, se nombró un Comité de Búsqueda Pastoral, que se encargará de evaluar la gestión del Pastor Interino y someterá a la Congregación local, la prórroga del interinato o la contratación definitiva del reverendo Alejandro González, una vez que haya cumplido con los requisitos que los estatutos de la Fraternidad y de nuestra iglesia establecen para así considerarlo.
La Mesa Directiva se integra, como es sabido, según los estatutos vigentes, por el Pastor de la Iglesia, Un Secretario, un Tesorero y dos vocales, así como por un Delegado Laico, quien es el que lleva la voz de la comunidad a las asambleas regionales y generales. El Pastor funge como Moderador de la Mesa Directiva y tiene en su caso el voto de calidad en las decisiones que se deban tomar.
La Mesa Directiva también es nombrada democráticamente entre los miembros del la congregación que hayan cumplido los requisitos establecidos de antigüedad y haber tomado el curso de membrecía y el rito correspondiente.
Esta estructura interna, está claramente establecida en los Estatutos acordados antes mencionados, lo que le dan una personalidad jurídica propia como Iglesia y un reconocimiento oficial como Asociación Religiosa, ante las autoridades mexicanas de la Secretaría de Gobernación y de Relaciones Exteriores, lo que le da certeza para operar, tan sólo con las restricciones que la Ley mexicana les impone a todas las iglesias reconocidas en el país.
  
13 AÑOS DE SER UNA IGLESIA DIVERSA INCLUYENTE
La Iglesia de la Comunidad Metropolitana nace de un llamado que recibiera Troy Perry hace más de cuarenta años. Si nos ubicamos en el año de 1968, podemos recordar que el mundo entero estaba convulsionando. Las revueltas de Paris en Francia, la razzia de Stonewall en Nueva York, el concierto revolucionario de Wood Stock, el fin de la guerra en Vietnam, el comienzo del movimiento hippie y su apertura sexual, fueron hechos que marcaron el inicio de la Iglesia Comunitaria Metropolitana.
Particularmente la revuelta de Stonewall dio como resultado la creación de la primera iglesia a nivel mundial con un ministerio particularmente dirigido a la comunidad de homosexuales, lesbianas, bisexuales y transgénero.
Así como fuera para Troy Perry y la naciente Iglesia de la Comunidad Metropolitana en los Estados Unidos la posibilidad de publicitarse en la revista Advocate de circulación entre la comunidad gay, para Casa de Luz ICM, lo fue la revista Rola Gay que dirigiera Carlos Shaper en la ciudad de Monterrey, también de circulación en la comunidad gay de esta ciudad y otras más de la República Mexicana.
Rola Gay sirvió de plataforma para que muchas personas supieran del ministerio de la Iglesia y llegaron a ésta después de haber visto la publicidad insertada y leer los artículos que regularmente el Reverendo David Pettitt publicara en la misma.
La aparición del terrible mal del SIDA en la década de los ochenta, trajo para la iglesia en general, un nuevo ministerio para atender a varios de los miembros que la padecían, enfocándose principalmente a la prevención y a evitar el rechazo y la discriminación para los portadores.
De Casa de Luz ICM surgieron varios proyectos que se dedicaron a su ministerio con un carácter eminentemente social y que le han dado forma a organizaciones no gubernamentales que han tenido un desarrollo propio y a la creación de un activismo social de varios líderes que han pasado por la Iglesia.
El proyecto OASIS de Género, Ética y Salud Sexual que dirige Mriaurora Mota, COMAC (Comunidad Metropolitana, A.C.) de Antonio Nevares, Sobrevivientes del SIDA de Jorge Galván y otras más, así como líderes que aquí han encontrado sustento y apoyo, ahora luchan también en contra del SIDA, la homofobia, la discriminación y los derechos sociales incluyentes de la comunidad LGBT.
Es importante resaltar que, a instancias de nuestra Iglesia, se organizó la primera marcha por el orgullo Gay hace más de diez años. Siendo en aquella época un atrevimiento que pocos supieron afrontar y que, en su momento, no tuvo mucha respuesta por las organizaciones civiles, pero que, en la actualidad, se ha vuelto una verdadera tradición y han logrado un poder de convocatoria general, al que han acudido miles de miembros de la comunidad, en la cual Casa de Luz ICM, forma ya parte de un gran equipo que se ha integrado para organizarla.
Pero no nada más se ha trabajado en el aspecto del activismo social; Casa de Luz ICM, como lo establece su misión, también ha colaborado en distintas actividades culturales y deportivas que tiene  un alcance más allá de nuestra propia comunidad local.
Vale la pena resaltar el haber logrado la organización de del primer Congreso de Historia de la Comunidad LGBT en el año 2000, que tuvo una aceptación no nada más a nivel local; sino que, se tuvo una respuesta a nivel nacional e internacional.
Se presentaron en esa ocasión, más de veinte ponencias, con todo el rigor académico que un trabajo histórico requiere, provenientes de diferentes partes de la República y del Extranjero. Teólogos como Fray Julián Cruzalta o Pablo Navarro Hernández de la propia fraternidad, originario de Puerto Rico, expusieron temas relevantes.
En la actualidad, las memorias de este congreso están siendo revisadas para ser publicadas por el Instituto Nacional de Antropología e Historia, como un legado de Casa de Luz ICM para la historia de la comunidad LGBT tan olvidada por los historiadores.
También se han celebrado eventos como el Homenaje a Benedetti por su reciente fallecimiento, lectura de poesía, exposiciones fotográficas, de pintura y arte en general. Se ha llevado a cabo representaciones teatrales, pastorelas, performance  y toda clase de eventos culturales que son de interés para la comunidad.
En el {ámbito deportivo, se han celebrado distintos torneos deportivos, resaltando el de Vóley Bol que organizara Guillermo Acosta, miembro activo de nuestra comunidad.
Sobre todo, debo de mencionar el espíritu trasformador que la iglesia ha tenido en muchas personas que han escuchado su mensaje liberador.
Han desfilado por la Iglesia miles de personas que estoy seguro, ya no son las mismas después de haber escuchado y participado en sus actividades. Casa de Luz ICM les ha dejado una huella transformadora.
RETOS A ENFRENTAR
Casa DE Luz no es una organización estática, está en marcha en esa jornada hacia la fe, nadie la detendrá... "Si Dios está contigo... ¿Quién puede estar en tu contra?
Sus retos son muy simples de escribir: "Derrumbar muros" Tal como lo establece la Fraternidad. Muros de homofobia e intolerancia.
"Brindar esperanza..." A toda la comunidad LGBT. Dignificar nuestra lucha por los derechos religiosos y sociales.
Transitar efectivamente a la Iglesia del siglo XXI para ser modelo de la Iglesia Latinoamericana.
Reafirmar la inclusividad. En Casa de Luz ICM todos y todas tiene cabida. Los brazos de Jesús el Cristo están abiertas para ti, tal como lo simboliza la Cruz principal de nuestro templo.          
Una Iglesia para todos y todas sin distinción alguna
Casa de Luz ICM
Iglesia Comunitaria Metropolitana de México, A.R.
Afiliada a la Fraternidad Universal de Iglesias de la Comunidad Metropolitana (UFMCC)
Dirección:
Diego de Montemayor 227 y 219 Sur
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