Maruchi y Piluchi (Diario)
Publicado en Jan 06, 2011
Maruchi y Piluchi se quieren casar con cierto descendiente de Marichalar. Maruchi sí. Piluchi no. Con esa señorita se casa un señor. Antes de Pili y Mili era Marisol, Conchita quería ser artista y Joselito soltaba más de un gallo. ¿Qué fue de Joselito el Gallo y Juan Belmonte?. Historia. Eso era ya sólo Historia. Ahora los del Marqués de Riscal quieren otorgar el garbanzo de oro a Juanito Valderrama por lo de su cocicidito madrileño y el garbancito de plata (mientras Garbancito lucha por salir de la tripa del buey) a Perico, el de la botillería selecta y mundial. Mingote se hace famoso dibujando la vida nacional y la codorniz se enseñorea de los campos hispanos.
¿Han pasado los Reyes Magos?. Quizás sí... pero, como siempre, se les ha olvidado la bicicleta y el tren eléctrico porque son cosas para los "niños bien". Así que a recoger los seis lápices de colores alpinos (el de los doce va como siempre para el mismo de siempre) y a pintar papeles o dibujar cenefas en los cuadernos de limpio para asombro y maravilla de Don Florencio. En fin, Maruchi ya ha elegido novio y Piluchi sigue estando más verde que el caminito que va a la ermita, como cantan los españoles en estos tiempos de sequía agosteña. ¿Quieres aprender inglés?. Conmigo está usted muy equivocado señorita porque no quiero saber nada de nada de Briam ni de Mangold porque yo no soy "El Kiki" y porque de mayor sólo quiero hablar y escribir en un lenguaje más a lo español que cualquier otra jerigonza lingüistica de esas más o menos extranjeras de los "niños de Serrano". ¿Han pasado los Reyes Magos?. Posiblemente sí... pero yo leo, en mi colección de pulgas, algo tan inexplicable como que Maruchi y Piluchi se quieren casar con un descendiente de Marichalar el cual, como siempre, sigue escribiendo crónicas de alta sociedad en el ABC o vaya usted a saber qué hay más allá del puente. Me asomo al puente y veo a la parienta del necesitado tender la ropa junto a las vías del tren de Arganda, el que pita más que anda, para que la seque el vapor que suelta la locomotora. Vidas de Carpanta. Mundo de locos pienso yo. Mundo de locos a motor saboreando, a toda pastilla de Avecrem Gallina Blanca, un poco de sustancia con la sopa del cocido. A ver si este año tenemos al fin la suerte que tanto esperamos. ¿Quién suspira?. No lo sé exactamente pero quizás sea algún pastor, por Moratalaz, buscando a sus ovejas descarriadas.
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