BESTIAS
Publicado en Jan 09, 2011
Les arrancas la muerte de los ojos a los parias,
bestias que se arrastran fuera de la vieja Catedral, miras con asco los muñones y las llagas, odias la vida (Esa vida a la que los ciegos y los idiotas se aferran tanto) ahogas en alcohol lo que otros consideran hermoso, esas bestias huelen a orina y a ti te hierve de pus el alma (Eres poeta) ofreces amnesia, idilio, fugacidades y crueldad, a veces ferrocarriles vacios, burbujas de jabón, cigarros de flores y lágrimas de fango... Ellos son tu musa, los deseas con sucia pasión, los necesitas, les arrancas la muerte de los ojos a las bestias para devolvérselas en palabras porque los maldices con tu falsa piedad.
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Enrique Dintrans Alarcn
Tu escrito tiene fuerza, una gran variedad de expresiones hábilmente encadenadas para delimitar un sentimiento que haga reacionar al lector. Tu hablante expone una visión putrefacta de la poesía, en la que el poeta está sumergido sin remedio. La expresión pus del alma (eres poeta) es muy convincente en el sentimiento.
Pero me llama la atención que las "palabras" han perdido el poder transformador o de intérprete de la experiencia humana y esta pérdida tu hablante la proyecta "en los otros". Es decir en los "otros" que jugando con las palabras han hecho una especie de estafa intelectual en relación con la muerte. "Les arrancas los ojos de la muerte". Al parecer, la auténtica poesía sería exigir a "las bestias" la toma de conciencia de su vulnerabilidad y en definitiva, su radical vocación al fracaso.
Una interpretación.
Aunque no comparto esa visión de la poesía, ni menos del poeta, me parece muy válida la exploración en todas las vivencias humanas. El discurso lírico no se discute, es en lo que siente, una postura. Hay también la poesía, en que el poeta asume la pus en el alma y busca puntos de salida. Pero, como escribo, son formas de hacer poesia. Todo poema tiene intención comunicativa y también trasunta una lectura de la realidad. Esto se aplica del "hablante" y no necesariamente del autor del texto.
Saludos
teresa
Laura Torless
AZUCAR