MARIHUANA! (Qu peligro)
Publicado en Mar 05, 2011
PELIGRO...!MARIHUANA! Lo que les voy a narrar es una gran experiencia vivida hace 30 años, lo hago por una advertencia sobre el peligro que corren al tratar de incursionar en las drogas, destruyen su cuerpo, su vida, su familia, y sus amistades. ACLARO QUE NO LAS HE EXPERIMENTADO. Como profesión he tenido la de TODERO AUTODIDACTO, me le he medido a cualquier trabajo donde pueda ganar el sustento.(Pntor de brocha gorda,Talabartero, carpintero cajero de banco, vendedor de seguros, empleado de cadenas de almacenes,comerciante propietario,transportador, etc.) Siempre he vivido en el interior de mi país Colombia, en el eje cafetero. En el año de 1978 me trasladé a vivir a la Sierra Nevada de Santamarta a la finca de mi hermana mayor. Es una finca donde se produce café, como a 2300 metros de nivel del mar. Hacía poco tiempo había perdido mi hogar. me echaron y se quedaron mis 4 hijos con su mamá, 20 años de matrimonio y vida perdidos. Allí compré un campero y me dediqué a trasportar gente del municipio Ciénaga a Sanpedro de la Sierra,un corregimiento. La marihuana pululaba, estaba en pleno apogéo. El primer viaje que contraté fue con un campesino, él solo y cinco costales donde se empaca 5 arrobas de café, llenos. Cuando llegamos a su destino me dijo: ¿sabes qué traemos? No señor, es suyo y usted responde. El señor abrió un costal y me mostró. El susto fué tremendo, estaba lleno de billetes de banco de 100 mil pesos y no supe cúantos millones. Esto es para pagar a los cultivadores, me dijo. Ese año fue la gran bonanza de mariguana y café en colombia.El campesino salía al pueblo pagando expresos en transporte,se emborrachaba, botaba el dinero en parranda, Prostiputas, ron y juego, le compraba todo a su familia y volvía a su cultivo. Me invitaron a sembrar un cultivo y me negué. Al año siguiente, acepté sembrar y se robaron la producción, claro que ya no valía nada. Le conté a un amigo del robo y me dijo que el mandaba a matar el individuo por 5 mil pesos (25 dolares). Aprendí a cultivar la mariguana, en colombia le damos muchos nombres: maracachafa, bareta, la mona, la negra, pategallina, etc. En el corregimiento me pidieron aceptara el puesto de inspector de Policía y acepté con el fin de hacer una buena obra: pavimentar la calle, organizar el puesto de salud y darle más vida. Nunca medí o analicé las consecuencias, porque tenía una población flotante de más de 10 mil personas, con asesinatos, secuestros, robos y muchas cosas más. Me posesioné y al día siguiente la policía me levantó temprano, me dijeron que habían amanecido muñecos, tres muertos. Los trajeron a la capilla y allí les hacía el levantamiento en silecio. No había sacerdote y médico, yo oficiaba los ritos espirituales, la medicina y los mandaba ¡pal infierno! La mariguana salía por camionados y en mulas y caballos. Era un lindo espectáculo ver en las noches 500 y mil mulas viajar por los cerros, el arriero alumbrando con linterna y disparando al aire, hasta llegar a la playa y embarcar directamente en el barco de turno rumbo al Norte. La policía despejaba la vía toda la noche y los camiones viajaban sin contratiempo. El comandante de policía del corregimiento cobraba 300 mil pesos por camión. (afortunadamente no me participaba, yo era civil.) Solamente estuve 2 meses, renuncié por lo peligroso de oficio. En ese tiempo hice levantamiento como de 35 personas, casi todos NN. No se podía investigar, la ley del silencio lo impedía. Tampoco se hacian levantamientos fuera del perímetro urbano. Cuando ocupé mi puesto, me tocó dormir sobre bultos de mariguana. Amanecía borracho todo tururato por el olor, vomitando y con una risa incontrolable, no me atreví a probarla. En todo el pueblo se sentía el ambiente de la yerba. Desde muy joven viví la violencia partidista y me iban a matar. Pero lo que viví en la Sierra fue tremendo, dinero, corrupción y muerte. En 1982 abandoné la Sierra y me vine a Bogotá. Continuará. Chumbimbon, febrero 2011.
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Hctor Restrepo Martnez