Antiguamente los futbolistas se lesionaban de la tibia, del peroné o de la tibia y el peroné juntos y al mismo tiempo; pero ahora no, ahora los entendidos en la materia medicamentosa dicen que los futbolistas se lesionan de los isquios. ¿Quién sabe lo que son los isquios?. Consulta al canto porque hoy el gallo no canta porque tiene un nudo en la garganta. Lo que he encontrado entre mis apuntes enciclopédicos es que lo isquiástico y lo isquiástica (porque también se lesionan las futbolistas por muy guapas que sean), es todo lo relativo a la cadera o el isquión. ¡Ostras!.
Las ostras son buenas para las ingles que ahora se llaman aductores por eso de ponerse todo al dia. Hace ya mil días que estoy pensando en los ostiakos. ¿Sabéis amigos lectores y amigas lectoras quiénes son los ostiakos?. No son curas católicos cabreados y repartiendo mandobles a diestra y siniestra. No. Son ugrofineses de Siberia Occidental. Lo que no entiendo bien es que Siberia se divida en Occidental, Central y Oriental y pienso y deduzco que en la Siberia (sea Occidental, Central u Oriental) también hay ugrofineses tan finos que ni se les ve pasear por los Montes Putorana. Que conste que no es una palabrota ni he dicho nada malo porque resulta que los Montes Putorana existen y se llaman así. Y para más señas os digo que se encuentran al norte de la Meseta de Siberia y al parecer los ugrofineses de Tura tienen mesas a las que les falta una pata; o sea, que son tripodeas o, mejor dicho, tripataloideas. ¡Ostras!.
Cada vez comprendo más y mejor por qué ciertos gallitos solo cacarean y es que gallito que no canta es porque un nudo tiene en la garganta. Ahora se les ha visto el plumero y ahora, ¡y ya era hora!, parecen los plumeros de limpiar el polvo que usa Panchita, la empleada del Doctor Cataplasma. A lo mejor van y dicen que no saben quién es Panchita. Vaya que si lo saben. Y vaya que sí es verdad que Panchita (sea negra o sea blanca pero resulta que es negra) utiliza a dichos gallitos de pelea como plumeros para limpiar el polvo de la oficina de Cataplasma. Me parece que ya recuerdan aunque intentan hacerse los olvidadizos con esto de llamar lesión de los isquios a la lesión de las meninges y que no se hagan el tonto que saben de qué temas, en plural, estoy hablando. ¡Ostras!.
Otro descubrimiento que acabo de hacer y ya me parezco a Antonio de Mendoza, el primer virrey de la Nueva España porque España es, hoy en día, tan nueva que hasta Madrid, mi querido Madrid, parece ya la ciudad de los prodigios de la que escribió Eduardo Mendoza aunque éste se refería a Barcino, es el Bar Cino. Eso es. En el Bar Cino los chelis cinocéfalos independentistas de Cataluña, Catalunya, Catalonia o Cataleches, aunque en realidad han nacido en pueblos como Membrilla (con perdón pero no se me viene otro pueblo ahora a la moria excepto Mollina) lo que pasan que se las dan de muy catalinos cuando sólo son catarrinos cuya cabeza es alargada como la de un perro. ¡Ostras!.
Esos sí que son isquios totales porque están tan mal de la cabeza que siguen creyendo que el presidente de los colchoneros sigue siendo el Doctor Cabeza. ¡Vaya vida de holgazanes llevan los independentistas del Bar Cino!. Los colchoneros de Madrid al menos se ganaban la vida con el sudor de su frente y eran personas y no gentes como estos desquiciados que sufren lesiones de los isquios en cuanto se en frentan a algún equipo con solera española. Si. Hizo mucho sol hoy en Murcia. ¡Ostras!.
Mando saludos a Pitaluga y espero que me recuerde de los buenos tiempos. Ya. Pero no me voy sin las ganas de decirle de nuevo al vascochutarra de la calle Alcalá de Madrid (en la antigua Carretera de Aragón) que o no tiene ni idea de cuál es la historia del Athletic Club (de Bilbao por pura casualidad) o estaba demasiado harto de vino ese dia, porque no sabe que a Carmelo Cedrún Ochanategui (cuyo suplente fue López, dos años antes de que lo fuera Iríbar y es que se las daba de listo o estaba harto de vino) le ataron, en su época juvenil, los pies a un poste y le metieron un gol que, por supuesto, fue anulado porque hay muchos listos isquistos por ahí suelto como le sucede a usted, señor vascochutarra de la calle Alclá de Madrid que tiene usted menos ideas sobre el Athletic Club (de Bilbao por pura casualidad) que las de un mosquito en vinagreta. ¡Ostras!.