A esa luz de tus ojos color castaño
busco un porqué para llamarte amor;
corazón de alfabeto bien cristiano
donde beben mis labios tu pasión
enhebrada en tu pelo este año
fuera de toda otra cualquier acción.
Grácil paloma que, en el verano,
hacia su nido vuela alrededor
iniciando un viaje milenario
joven siempre con toda tu emoción.
Kilómetros más allá de lo lejano
lanzas tu mirada de marrón color
llamándome poeta que con mi mano
mezo la pluma de versos con calor.
Nunca sabrá él, el cruel villano,
ñandú de multiples caras sin valor,
o ese que intenta ser milano
que busca en nosotros el dolor.
Resiste, como resiste todo lo que amo
saliendo directo de mi corazón;
te has hecho silencio que yo gano...
un lugar donde llevar siempre razón.
Volveré a tu luz con cuerpo sano,
whisky nunca en mi interior,
xilofón de notas con rellano...
llegaré a ti, todo ufano,
zumbando mil palabras en total canción.