Los dos planos en que te proyectas
Publicado en Mar 15, 2011
Tu sombra revienta mis cantares
ya en cerrada noche, el silbido de tus manos a precipitarse viene contra mi dulce espacio, caterva perturbable, laguna para incienso de tu joder poderoso, una lanza que se clava siempre en la misma herida, amparada en lo nocturno. Afuera, en lo que terrestre simula, lugar sólo para locos, también nos pertenece la fracción indisoluble: tiritan las pastillas, tu zona rocosa, mi corazón de madera. Sé bien que tu rostro se me evade, que velas el espejo, que Dios juega en tu bando... Adentro, mi mente se ha enredado, presa en un castillo, quemada en una cama. 5 de mayo de 2010.
Página 1 / 1
|
Karelia
Gracias por la bienvenida.
sartre