se que sufro de varias enfermedades crónicas no fisicas, incurables
y no contagiosas. Pretendere enumerarlas...soy víctima resistente de la originalidad, mi color ha demostrado ser unico en su tipo, de un matiz sobrenatural, algo fuera de lo común, dicen que es dificil de percibir por su rareza y es una sorpresa cuando se observa.
Tengo todititos los huesos fracturados gracuias al coraje que me ha explotado en los dentros, haciendo de mi propia sangre un proyectil liquido que va derecho en el camino, tengo cicartrices en mi piel morena y quemada por causa de las exposiciones a las candentes temperaturas de mi enojo.
Otra que se suma a la lista, es mi paranoia alucinante, esa que me permite ver a traves de los glaciares de intenciones ajenos, la que me dicta que corra mas rapido para alcanzar a la muerte y pedirle tiempo extra, es esa la que me dice que me esconda cuando no me buscan  que aparezca cuando anuncien la llegada de la policia, esa me dijo que cuando a todo mundo  le da por correr detras de mi, es preciso aparecer camuflada por ahi y ver si sus busquedas minimo se acercan al objetivo.
qué otra enfermedad sufro?
Desconfianza. Me enseñé a mi misma a no taparme los ojos y no cerrar los oidos a lo que el resto dice... estar alerta y sobrellevar el camino. La señora incredula me enseñó a que es preciso aparentar creer que creo y despejar las preguntas y verdaderas respuestas en mis dentros.
Vivo con ataques constantes de egocentrismo incontrolado, loco, a veces soportable...desatado. Me he creido el centro de un unverso y lo soy -porque me refiero a mi personal universo- pero mis visiones de unverso personal trascienden afuera y pareciera como si yo fuera la magna cosa sobre esta tierra, y no egocentrismo, sino ausencia de modestia, lo cual es razonable.
Nadie ha encontrado una camisa fuerte para aplacar mi rebeldia, que tiene todas las posibles causas y otro de tanto de posibles consecuencias, nadie ha podido domar el monstruo qu late dentro de mi y que amenaza con salir a la minima provocacion... mas que rebeldia en el cabello, soy rebeldia en actitud, revolucion propia y en el corazon.
Y así, estas son pocas de las muchas enfermedades que sufro... las mas importantes, las mas pesantes, las que me convierten en lo que soy y me diran lo que sere, son las que pueden matarme cien veces y revivirme unas mil mas.