Hace un ao mi corazn qued vaco...
Publicado en Jun 09, 2011
Hace un año que el teléfono dejó de sonar, hace ya un año que saliste de mi vida, dejando mi corazón en mil pedazos. Una sola palabra que rompió mi corazón y para siempre me dejó presa de esta angustia, de este dolor. Te marchaste sin voltear, sin decir nada más, llevándote mi corazón y todo el amor que te tenía. Desde ese día sólo me quedan los recuerdos de lo vivido
Ahora ha pasado un año y creí estar preparada para escribirte pero recordar lo que pasamos ha hecho que mi corazón y mi amor por ti, vuelva a salir de donde lo tenía tan guardado. Espero que al leer estas líneas, recuerdes el amor que decías sentir por mí y mi más grande deseo es que realmente lo hayas sentido porque yo sí sentí muchas veces que me amabas. A veces no se puede creer el estar tan cerca de alguien y a la vez tan lejos sea posible, porque así te he sentido, cerca de mí todo este tiempo pero a la vez muy lejano porque tu mutismo me lo comprueba y me hizo aceptar que así es... voy caminando por la calle, la noche es cálida y las estrellas me observan, pero yo no las veo. El aire no corre y, a lo lejos, busco desenfocar las luces que me llevan a revivir el recuerdo. Una lágrima recorre mi rostro y al llegar a mi boca la inunda de palabras que sé que callaré, prisioneras de mi corazón serán, de este carcelero e iluso corazón que aún te extraña.... Sólo sigo esperando y dejando el tiempo pasar porque las heridas solo el tiempo las cura. Pero aunque así sea, yo voy contra el viento, y tengo el sentimiento de no querer dejar ir el dolor que habita en mí, ya que este, nació del amor y ese amor, nació al ver tus ojos y tu sonrisa aquel día, eso no lo querría olvidar nunca, aunque lastime tanto como el verte partir sin volverme a mirar. Y siguiendo así, caminando, a veces parando, otras veces yendo más rápido o más lento, cierro mis ojos, cada vez con más fuerza, para luego abrirlos y esperar que todo sea un mal sueño y que todavía estés...pero no es así y las cosas no tienen ni el color ni la forma ni el sentido que tenían tiempo atrás.... es que todavía siento tu respiración a mis espaldas y tu presencia insoluble que hacía que cada día de nuestro encuentro, a pesar de que pasara tan pronto, valgan más que nada en el mundo porque un minuto a tu lado, un segundo en tus labios para mí, eran la gloria. Ahora solo recuerdo tus caricias en mi piel, suspiro pensando que nada me falta y darme vuelta, miraré tus ojos y te diré de nuevo cuánto te amo. Pero todo queda en eso, en solo ideas y pensamientos porque ya no eres real, porque ya no estás ni estarás más en mi vida. Ahora todo se mueve en cámara lenta, los colores cambian de blanco y negro a sepia para volver a ser colores que rodean cada sentimiento. Lo que fue se desintegra enfrente mío, lo que es ya no es nada y lo que tendría que ser ya no será porque se fue... los sonidos se vuelven irreconocibles y entre la multitud sólo siento el latir de mi corazón, desesperada, sólo, buscando un tesoro que parece haber sido enterrado para siempre. Respiro profundamente buscando renovar el oxígeno que corre por mi sangre. Intento pellizcarme para poder despertar. Hago lo posible por llegar al fin de este cuento y poder leer uno nuevo. Quiero morir para revivir entre las cenizas como el ave fénix. Quiero ser agua para congelarme, condensarme, elevarme y caer como lluvia en tus manos. El dolor es muy grande. El porcentaje de agua que forma mi cuerpo son las lágrimas que contengo y la sonrisa que demuestro es la máscara de mi tristeza profunda. Es que nada importa ya si el camino que elegí se transformó en miles que no quiero seguir. Es que vivo en un universo paralelo al que escribí y no me sirve, no es lo que deseo en este momento. Porque sigues sin estar y de nuevo te veo partir, te veo alejándote sin dar vuelta atrás. Es el día de hoy y no entiendo el por qué de cómo cambian las cosas en sólo segundos...un día estás en el cielo y al otro no puedes levantarte de la tierra ni siquiera para soñar porque te duele mucho. Ayer todo era perfecto y hoy, sólo queda dolor en alma. No sé cómo me ganó la ingenuidad al creer que eras eterno... y estoy acá, sentada, con la mirada perdida en algún punto donde antes se encontraban nuestros sentimientos. Intento otra vez en vano desenterrar aquel tesoro y sólo consigo embarrarme las manos con promesas inconclusas que me perseguirán por siempre, promesas que nunca se cumplieron, ilusiones forjadas a través de los años de espera y esos años de espera, nada valieron, nada importaron, nada aportaron a tu vida, ahora creo que solo fueron años de angustia para ti por la "doble vida" pero jamás voy a entender, porqué volver para de nuevo dejarme, ¡CON LAS MANOS VACIAS, EL CORAZON ROTO Y EL ALMA ENTRISTECIDA! Hoy veo la radiante luna, más bella que nunca, como un hada que me ilumina y con su hermosura me concede un deseo, anhelantemente le pido, que me dé el don de olvidarme de ti, porque desde mañana donde volverá a salir el sol, quiero un nuevo despertar para mí, donde ya la tristeza se esfume, y renazca en mí nuevamente, mi clara sonrisa. Decidí seguir mi camino y encontrar nuevos hombros para apoyarme más no para depender y ofrezco los míos para así poder caminar juntos en la misma dirección hasta donde la vida nos permita llegar, estaré más cerca del creador, porque se abrirán nuevos horizontes al final del sendero que está detrás de la línea azul de la esperanza, allá donde se pierde el sol y aparece la luna que se rodea de las estrellas, señalándome el rumbo de mi nuevo amanecer. Desde ya, estarás en una hoja de mi cuento mágico, pero desde mi nuevo solemne despertar, ya serás parte de mi vida pasada, porque empiezo a consolidar mejor mi nuevo presente y fijar las nuevas metas que me llevaran a un futuro de nuevas esperanzas y de nuevos logros. Dios te bendiga siempre, lo deseo de todo corazón, desde la soledad de mi alma.
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Ana Maria