- ¿Que es la vida, papá?.
- La vida es un viaje desde la Nada hacia el Todo.
- ¿Y es largo ese viaje?.
- Lo suficiente para que vayas creciendo sintiéndote siempre persona.
- ¿Da tiempo para jugar?.
- En el viaje de la vida da tiempo para jugar y da tiempo para soñar.
- ¿Qué se puede soñar en el viaje de la vida, papá?.
- Todo lo que tu imaginación desee.
-¿Y siempre viajaremos juntos tú y yo?.
- Verás. Es hora que te explique una cuestión. La vida es un viaje circular que tiene muy diversas estaciones. Continuamente estamos dando vueltas a esas estaciones y en cada una de ellas sentirás una emoción diferente. Pero hay una estación llamada Muerte donde si todo nuestro viaje es feliz y van bien todas las cosas y no hay accidente alguno entonces yo me bajaré allí y tú seguirás dando vueltas...
- Entonces... ¿me abandonarás?.
- No te abandonaré jamás. Escucha bien. No tengas miedo nunca a la Muerte. Esa estación no es un punto y final sino solo un punto y seguido. Yo me bajaré, si todo va bien, antes que tú porque ya estaré cansado de viajar dando vueltas y necesitaré descansar por un tiempo. Pero no te preocupes. A ti también te llegará ese mismo cansancio y bajarás en la estación llamada Muerte.
- ¿Eso es el Todo?.
- No. Ya te dije que no le tengas miedo a la Muerte. Una vez que bajes en dicha estación yo te estaré esperando y juntos ya volveremos a continuar el viaje ya no circular sino todo recto hacia el Todo que es infinito. En ese infinito llamado Todo viviremos sin cansancio alguno por toda la eternidad.
- ¿Y siemnpre hay que bajarse en la estación Muerte?.
- Si Dios quiere ni tan siquiera la conoceremos.
- Me gusta el viaje de la vida. Gracias papá por haberme sacado de la Nada y haberme regalado el billete...